Alcaraz saca pecho para meterse en las semifinales

En la cita más exigente de la semana, Carlos Alcaraz respondió de manera sobresaliente en Cincinnati. El español obtuvo una victoria que tuvo mérito, porque Andrey Rublev le plantó cara, y de qué manera, antes de ceder: 6-3, 4-6 y 7-5 en 2h17. Este sábado (no antes de las 00:00, Movistar+), Alcaraz se enfrentará en las semifinales a Alexander Zverev, que apabulló a un mermado Ben Shelton (doble 6-2 en 77 minutos). Será el 12º duelo entre ambos, con un balance favorable al hamburgués (6-5), que ganó el último choque, el año pasado en las ATP Finals. El otro cruce lo disputarán, desde las 21:00, Jannik Sinner y Terence Atmane. Con 12, Carlos es ahora el tercer español con más presencias en penúltimas rondas de Masters 1.000, igualado con Moyá, por detrás de Nadal (76) y Ferrer (18).

“Mantuve los pensamientos positivos todo el tiempo, aunque perdiera la concentración en algunos momentos. Eso fue clave”, dijo Alcaraz, que amplía su racha en eventos de este nivel a 15 victorias, con las que iguala en el sexto puesto histórico las mejores de Sinner, Nalbandián y Agassi. Tradicionalmente peor para él, la fase del curso que sigue a Wimbledon este año empieza bien, como pasó en 2023, cuando el murciano llegó a la final en el estado de Ohio (cayó ante Djokovic). Es la segunda vez que llega tan lejos en un torneo de la categoría tras el Grand Slam británico. Ya ha ganado los cinco que se disputan antes y le faltan en su palmarés los cuatro restantes.

La variedad del saque ayudó a Alcaraz ante un rival que no lo hace nada mal en ese aspecto. Carlos colocó 11 aces y obtuvo mucho rédito con los segundos. Y al resto estuvo sensacional. Ese buen desempeño le permitió hacer dos quiebres en el primer set, uno para colocar el 2-1 en el marcador y otro para cerrarlo. Mientras, Rublev se perdía en discusiones con el juez de silla, Mohamed Lahyani, sobre el poco tiempo que tenía entre saque y saque, para él, inferior al de Alcaraz, una protesta inconsistente, porque el reloj se activa automáticamente.

Vuelta de tuerca

Carlos tenía que aprovechar la velocidad de crucero que había alcanzado para superar al moscovita. Y no la redujo, pero al otro lado de la pista el nivel y, sobre todo, la actitud, mejoró en una fase del partido ordenada y vistosa. El servicio le funcionó a Rublev para ganar un par de juegos en blanco y atacar con mayor intención los de Alcaraz, que intentó afinar el drive, con la idea de evitar un break que terminó por conseguir Andrey (4-3) antes de consolidar su ventaja e igualar después el encuentro.

La tercera manga comenzó con parón por el desvanecimiento de un espectador, fruto de los 33 grados y la humedad del 50% que azotaban en Cincinnati. La tónica de igualdad se mantuvo, hasta que Alcaraz, que sufría con los saques abiertos de Rublev, amenazó con romperla por valentía. El ruso escapó con del primer envite. Con el segundo no pudo. Parecía decisivo, porque suponía el 5-3 y saque para el titán de El Palmar. No le quedaba otra que jugársela y lo hizo con acierto para alargar y darle suspense a un desenlace que Carlos decidió al resto, jugando con los nervios de Andrey, que entregó el duelo por una doble falta.

Zverev, sin problemas ante un Shelton agotado

En la sesión nocturna de la P&G Center Court, Zverev no tuvo problemas para superar a un Shelton claramente bajo de energía. Al campeón en Toronto le pasó factura la acumulación de partidos en condiciones extremas de calor y humedad y no pudo competir de igual a igual con el alemán, aunque este también necesitó asistencia médica y el uso de un inhalador.

“No me siento muy bien ahora, pero tengo unas horas para volver a estar fresco y, ojalá, sentirme al 100% otra vez. En realidad no sé que ha pasado, porque salí a la pista sintiéndome, probablemente, en la mejor forma de los últimos meses, sintiendo la bola fenomenal en ambos lados. Al final del primer set no me encontré bien y progresivamente peor. Espero que mañana esté bien para tener una oportunidad”, dijo Zverev, que tendrá que estar bien para hacer frente a Alcaraz. “Haré todo lo posible. Jugaremos por la noche y eso es positivo, porque podrá dormir todo lo posible para estar preparado”, zanjó Sascha, campeón en 2021, que alcanza las semifinales del torneo por cuarta vez. Esta es la cuarta vez, en otros tantos enfrentamientos, que supera a Shelton.

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