Una de cal y otra de arena para los anfitriones en Milán

Las NextGen Finals, el torneo de los maestros de 21 años o menos, ya está en marcha un año más, como viene siendo costumbre con mucho acento italiano. No solo por la sede, el Allianz Cloud de Milán, también porque el país transalpino viene produciendo notable talento joven que aflora en esta competición. Este martes tocó una de cal y otra de arena.

Por un lado, Francesco Passaro cayó en el primer partido de la cita ante el checo Jiri Lehecka (4-1, 4-3 (7) y 4-1, recordemos que aquí se juega en un formato reducido). Este último, un tenista más curtido que a sus 21 años, los mismos que Passaro, ya está en el top-75 del circuito (el italiano es el 119), en el que tiene actividad más regular que su rival este martes, quien ha destacado mucho en los Challenger (títulos en Trieste y Forli) pero prácticamente carce de bagaje ATP (sus únicos dos torneos del año los ha disputado el mes pasado en Nápoles y Florencia).

Se notó la diferencia de cuajo desde el comienzo, con un Passaro más espero que concedió con cierta facilidad la primera manga. Reaccionó en la segunda el de Perugia y consiguió forzar un tie-break largo y tenso, que también acabó yendo al zurrón contrario. Con un Tourmalet por delante, se le hizo larga la contienda a Francesco y acabó encajando un nuevo 4-1 que da a Lehecka el liderato del grupo verde.

El del rojo es por ahora para Lorenzo Musetti, que no es el más veterano del torneo (20 años) pero sí el más asentado ya en la élite tenística, 23º del ranking con dos trofeos este año, el del 250 de Nápoles y el del 500 de Hamburgo. De Carrara, ciudad históricamente famosa por su industria marmolera, el toscano hizo valer su condición de favorito antes el taiwanés Tseng, 90ª raqueta mundial que se impuso este año en los Challenger de Murcia y Bengaluru (India) con un triple 4-2 en una hora y 11.

Vengó así la derrota de su compatriota y equilibró la cuenta italiana antes de que Arnaldi, otro paisano, se midiera en el primer turno de la tarde contra el estadounidense Nakashima. Se llevó el gato al agua el segundo (2-4, 4-3 (7), 4-3 (4), 3-4 (4) y 4-2 en 2h 15) en una batalla que enfrentó al 134º de la lista mundial, el transalpino, contra el 49º, otro de los jóvenes que llega a Milán como candidato claro al título, tras ganar hace no mucho el 250 de San Diego y meterse regularmente entre los ocho mejores de torneos ATP esta temporada. Arnaldi, que solo tiene un partido en la élite en su curriculum este año y ha ganado el Challenger de Francavilla al Mare, además de llegar a la final en otros varios, plantó cara. Se adelantó y llevó al desempate la segunda y tercera mangas, pero ahí impuso sus tablas Nakashima, que vaciló en el cuarto parcial antes de sentenciar en el quinto para acompañar a Lehecka en cabeza del grupo verde tras la primera jornada. En la del grupo rojo, junto a Musetti, está el suizo Dominik Stricker, 111º de la ATP, que derrotó en el último pulso del día al británico Jack Draper tras tres tie break consecutivos y una hora y media de juego que dejaron un resultado curioso: 4-3 (5), 4-3 (5) y 4-3 (5).