Rafa Nadal vuelve a la pista este viernes en Adelaida. El balear participará, junto a los mejores de los rankings masculino y femenino, en un minitorneo de exhibición que comenzará a las 13:00 hora australiana (03:00 en España). A Day at the Drive reunirá a Nadal con el número uno del mundo, Novak Djokovic, y con el tres, Dominic Thiem, en un evento que contará con las primeras raquetas de la WTA, Ashleigh Barty, que no ha tenido que confinarse al ser australiana, Simona Halep, Naomi Osaka y Serena Williams. También están como invitados Jannick Sinner y Irina-Camila Begu. 

En el Memorial Drive Tennis Centre, y como apoyo a la Australian Tennis Foundation y su trabajo en las zonas más desfavorecidas del sur del país, Nadal, que pudo prepararse en Manacor y no juega desde que perdiera en semifinales de las ATP Finals contra Medvedev, se enfrentará desde las 09:40 hora peninsular a Thiem. Antes, a las 03:40, empezarán los partidos con el duelo entre Djokovic y Sinner, al que seguirán los de Serena contra Osaka y Venus ante Begu. Para terminar, en la sesión de tarde, tras el bolo de Rafa se verán las caras Barty y Halep. Estos dos encuentros podrán seguirse en Eurosport.

Adelaida dará el pistoletazo de salida a la gira aussie en medio de la polémica por la que bastantes jugadores consideran como un trato de favor a las estrellas del tenis. Nadal y compañía han pasado la cuarentena, que terminó en la tarde de este jueves, con varios miembros de sus equipos y con familiares, algo que no han podido hacer los que han estado confinados en Melbourne. También han podido salir de sus habitaciones con terraza durante cinco horas diarias para entrenarse, una posibilidad que han tenido también algunos en la capital de Victoria, todos excepto los 72 que estuvieron en contacto con algún positivo por COVID en los vuelos procedentes de Dubai, Abu Dabi y Los Ángeles.

Respuesta a las críticas

Nadal respondió a las críticas desde dos puntos de vista y dejó en entredicho la actitud de Djokovic, que hizo públicas sus reivindicaciones ante la situación de sus compañeros. "Aquí cada uno intenta sacar el máximo rendimiento posible dentro de nuestras posibilidades y ayudarnos entre nosotros, lo que pasa es que algunos necesitan hacerlo público y otros los hacemos de una manera más privada sin tener que publicar todo lo que vamos haciendo", dijo en ESPN Argentina. "Se habla de que los que estamos en Adelaida estamos en mejores condiciones, pero no he oído a ninguno de Melbourne decir que tiene una habitación mejor que la de otros. Estos que quizá se han quejado tanto de nuestras condiciones en Adelaida no han decidido quedarse confinados sin entrenar", señaló. Al día siguiente, en CNN, el español ofreció un punto de vista más humano: "Es normal quejarse, pero, por otro lado, ves cuántos están muriendo en el mundo, cuántos están perdiendo a su padre o a su madre, sin tener la oportunidad de despedirse. Es algo real, no filosófico, eso es la vida real y es lo que está pasando en mi país donde personas cercanas a mí están sufriendo esta situación". Este viernes pasará de la pantalla del ordenador a una pista de tenis, en un simulacro de lo que será la competición, que para él empezará de verdad el 2 de febrero en Melbourne como líder de España en la ATP Cup.