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ROLAND GARROS

Revancha en París

Rafa Nadal y Diego Schwartzman veinte días después del triunfo del argentino en Roma. Buscarán la clasificación para la gran final del domingo.

ParísActualizado a
Revancha en París
Shaun BotterillGetty Images

Hace 20 días, Diego Schwartzman vivió uno de los días más felices de su vida. Había perdido nueve veces seguidas contra Rafa Nadal en otros tantos enfrentamientos y por fin ganó al balear. Fue en las semifinales de Roma y todo cambió para él. La temporada del argentino había sido más bien discreta, pero tras vencer al rey de la tierra en la pista en la que este había levantado nueve veces el título, se vino arriba y el impulso le ha llevado hasta las semifinales de Roland Garros. Hoy (14:50, DMAX y Eurosport), Nadal tratará de vengarse en París de aquella derrota.

A su favor, el manacorí tiene la historia y unos antecedentes en el torneo que le son muy favorables. Está ya en su zona de confort: siempre que ha pasado de cuartos en el Bosque de Bolonia después ha sido campeón. O dicho de otra manera, nunca ha perdido un partido de semifinales en el major francés. Su marca es abrumadora: 12-0. Tantas victorias como títulos conquistados. "Confiamos en nuestro jugador, sabemos dónde está, su historia en este torneo... Aunque las condiciones sean distintas, sigue siendo Roland Garros y la Philippe Chatrier", dice su entrenador, Carlos Moyá.

Esa es la sensación general, que Nadal puede y debe ser superior a Schwartzman en un partido sobre tierra batida a cinco sets. Lo piensan hasta los compatriotas del Peque. Juan Mónaco, extenista del top-10 y buen amigo tanto del español como se su rival en semifinales, describe así lo que puede pasar hoy en la capital de Francia: "Rafa nos acostumbra a que lo normal es que él gane siempre. En Roma eran otras circunstancias y ahora ya ha competido y con muy buen nivel. París es su territorio, es el dueño de Roland Garros. Todo eso ayuda a que se sienta mejor y juegue en su mejor versión. Está bien físicamente y con la confianza por todo lo alto".

Ayer, Nadal se entrenó en compañía de Moyá, que le hizo de sparring, y con la ayuda de Francis Roig, que se incorporó a la expedición del mallorquín hace unos días, y de su fisio, Rafael Maymó. Practicó, entre otras cosas, la respuesta a restos cortados y cortos como los que hizo a menudo Schwartzman en Roma. Todo en un ambiente positivo. En la pista de al lado se ejercitó a la misma hora su oponente, que ha sufrido más en lo que va de campeonato, algo que puede ser bueno por un lado, el de la preparación ante situaciones límite, y malo por el otro, por lo que se refiere al desgaste físico. Diego ha tenido que afrontar 62 puntos de break en su contra en seis partidos (salvó 41); Nadal, sólo 15 (se libró de 11). Y lleva tres horas y media más en pista que Rafa (13h:34 contra 10h:04). Podría decirse que el torneo empieza hoy realmente para Nadal mientras que Schwartzman viene de vuelta. En cualquier caso, la revancha está servida.