26 aces de Milos Raonic sentencian el 1-0 para Canadá

26 saques directos de Milos Raonic, el joven gigante canadiense de 1,96 y 22 años, nacido en Montenegro, sentenciaron el primer punto del Canadá-España de Copa Davis. Acorazado por su monstruoso primer servicio, con puntas de 224 y 225 km/h, Raonic (número 15 del mundo y líder de Canadá) se impuso al zurdo mataronés Albert Ramos Viñolas (número 51) por 6-7, 6-4, 6-4 y 6-4 en dos horas y 55 minutos. Canadá manda por 1-0, a la espera del segundo partido de individuales, que disputarán a continuación Marcel Granollers y Frank Dancevic.

Entrenado por el asturiano Galo Blanco, que ocupa sitio oficial con el equipo canadiense, Raonic concretó el 68% de primeros servicios, con los que ganó… el 86% de puntos jugados. Bajo el cañoneo del saque-mazo de Raonic, Ramos no pudo gestionar ni un solo punto de ‘break’, aunque logró decantar en su favor la primera manga al ganar los cuatro últimos puntos del ‘tiebreak’. Raonic controlaba esa muerte súbita con 5-3 y saque, pero envió al pasillo una derecha clara y Ramos aprovechó para tomar ventaja. Empero, Raonic logró el primer ‘break’ del partido en el juego inicial del segundo set y por ahí comenzó a cimentar su victoria.

Cifras: Raonic ganó 137 puntos totales, por 119 de Ramos. Y el canadiense-balcánico conectó 78 golpes ganadores (incluidos los 26 ‘aces’), por sólo 36 de Ramos, cuyo juego liftado y de control se ajustó a las características de la tierra batida… sobre la pista rápida y de bote bajo del Thunderbird Sports Centre de la British Columbia University, en Vancouver. Lo mejor que hizo Ramos (al margen de sus 13 'aces') fue defender los puntos de ‘break’ en contra. Ahí, Raonic sudó de lo lindo y necesitó 18 puntos de rotura sobre el servicio del zurdo catalán para ganarse los tres ‘breaks’ que decantaron el partido, en los sets segundo, tercero y cuarto. Ramos sólo cometió 18 errores no forzados contra los 36 de Raonic, pero eso no le valió para escapar a la artillería pesada que se le venía encima. Así, Raonic firma el 1-0 y la suerte de España en esta eliminatoria empieza a depender al máximo de Marcel Granollers.