Yassine Bounou, conocido como Bono, está siendo el jugador revelación del Mundial. El portero, MVP del partido tanto contra España como contra Portugal, solo ha recibido tres tiros a puerta en todo el Mundial.

El meta africano ha nacido en Canadá, es hincha de River y habla con acento argentino. Convertido en una de las estrellas del combinado marroquí, no solo está haciendo historia en Qatar 2022. Él mismo tiene su propia historia de superación.

Lucha por un sueño

Yassine es hijo de migrantes marroquíes que llegaron a Canadá. Nació lejos de Marruecos: en Montreal y volvió a la tierra de sus padres cuando tenía 7 años. Desde pequeño, mostró interés por el fútbol y formó parte del club Wydad Casablanca, pero su papá se opuso a que se dedicara al deporte. No obstante, Bono se empeñó en ser profesional.

“Toda mi vida consistÍa en jugar al fútbol en la calle. AprendÍ en la cuesta de un parking, dibujando la porterÍa en la pared y colocando cubos de basura”, explicó.

Bono inició su carrera profesional con el Wydad Casablanca, donde debutó en el primer equipo con apenas 19 años. Para el 2012 firmó con el Atlético de Madrid, donde jugó dos temporadas para el filial, el Atlético B. Tras lo hecho con los colchoneros tuvo la invitación de Marruecos para representar al combinado de aquel país y debutó en el 2013 en un juego ante el Burkina Faso.

En 2014, el Atleti cedió a Bono al Zaragoza y, en 2016 -cuando acabу su contrato- firmó por el Girona. Un equipo en el que se mantuvo hasta 2019, cuando él mismo pidió ser cedido al Sevilla F.C., donde ha crecido hasta transformarse en un ídolo de multitudes, además de desarrollarse como un líder nato.

Su vida ha estado ligada a España. Sin embargo, se conoce que es un gran aficionado del fútbol argentino e hincha del River. De hecho, tal y como reveló hace algunos meses “,mi perro se llama Ariel, porque uno de mis jugadores favoritos era Ariel Ortega”.

Héroe sereno y padre de familia

Bono siempre se ha mostrado modesto y reservado. Un perfil que cultiva desde sus inicios en las canchas.

El crack está casado con Imane, de 30 años, con quien empezó a salir en 2017. Y aunque no está claro cuándo contrajeron matrimonio, la pareja sí ha compartido en Instagram que tuvieron un hijo, en 2020.

La esposa marroquí de Bono, tiene 238.000 seguidores en Instagram, red social en la que muestra su pasión por la moda, su pequeño y sus mascotas.

Tras la gesta de los Leones del Atlas ante los lusos, el meta, de 31 años, saltó al césped del Estadio Al Thumama, seguido del pequeño Isaac, de dos añitos de edad, que llevaba puestos los guantes de su padre, quien le tiró balones para que los parara. Así es Bono, de trabajar en un mercadillo a héroe nacional de Marruecos.