Un récord anunciado
Pues, sí, el keniano David Rudisha pudo con el récord mundial de Wilson Kipketer en 800 metros. Corrió en la ISTAF de Berlín en un tiempo de 1:41.09, dos centésimas más rápido que el danés nacido en Kenia. Kipketer tenía la plusmarca en 1:41.11 desde el 28 de agosto de 1997, en Colonia. Rudisha lleva un año en estado de gracia y estaba claro que el récord de su ex compatriota iba a caer, más temprano que tarde. Y cayó.
Los 400 metros los pasó la liebre, el también keniano Sammy Tangu,i en 48.65 y en estos momentos no hay datos de en cuánto los pasó Rudisha (en todo casi por bajo de 50 segundos), que a los 600 metros ya era líder con 1:14.54. En el récord mundial anterior, Wilson Kipketer pasó cada 200 metros en los siguientes tiempos: 23.8, 25.5, 25.3 y 26.5. Es decir, que al toque de campana marcó 49.3 y a los 600 metros 1:14.6, tiempo éste similar al de Rudisha.
En los anteriores récords mundiales de 800 metros el paso de los 400 por el atleta que superó la plusmarca fue así: Kipketer 1:41.24, en 1997 (48,3); Kipketer, 1:41.73 en 1997 (49.61); Sebastian Coe, 1:41.73 en 1981 (49.7); Coe, 1:42.4 en 1979 (50.6); Alberto Juantorena, 1:43.44 en 1977 (51.4), y Juantorena, 1:43.5 en 1976, en la final olímpica de Montreal (50.9).
Volviendo a Wilson Kipketer. Nunca se había visto un despliegue de marcas similar al suyo en ese año 1997. Entre el 8 de agosto y el 24 del mismo mes hizo cinco carreras, con estas marcas: 1:43.38, 1:41.24 (récord mundial), 1:42.77, 1:42.20 y 1:41.11 (también récord del mundo).
En cuanto a David Rudisha, que sólo tiene 21 años, ha corrido seis veces en 1:43.00 o menos y dos de ellas en menos de 1:42.00. Llaman la atención los 1:42.84 que ha sido capaz de hacer este año en la altitud de Nairobi (1.661 metros), récord mundial también en este aspecto.
Arturo Casado
El campeón de Europa consiguió marca personal. Los frutos de un cambio de estrategia (no preparar la competición invernal en sala) y el tremendo trabajo del madrileño siguen dado sus frutos. Arturo es un ejemplo y el único medallista español en los Europeos que no sólo sigue manteniendo un alto nivel, sino que se ha superado a sí mismo. La Copa Continental de Split (primer fin de semana de septiembre) le espera.
Caster Semenya
Esperaba que estuviese bien, aunque no estaba seguro de que fuese a ganar, porque la carrera era dura. Si la surafricana no hubiera mejorado ostensiblemente desde sus dos carreras en Finlandia, no se hubiera presentado en Berlín, el estadio en el que fue campeona mundial. Os confieso que me alegro de que ganase, porque Semenya me merece más respeto de la italiana Cusma, que fue tercera ayer, y que en los Mundiales la calificó lisa y llanamente de "hombre", en una actitud que debería avergonzarla. .