

El estadounidense fue la sorpresa en la final de los 1.500 en la que Ingebrigtsen se quedó sin medalla.
PorJuanma Bellón

El estadounidense es un producto de la renovada pasión norteamericana por las pruebas de fondo y semifondo. En París se transfiguró en otra clase de atleta.
PorSantiago Segurola

Una plata no sabe a oro, aunque a veces la celebremos como tal, porque la segunda posición significa que has perdido ante un rival. Pero hay platas, eso es verdad, que saben muy bien. Como la de Katir.
PorJuan Gutiérrez

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