En el palco, están asediados por los juzgados, acorralados por informaciones periodísticas.
Convendría por el bien del interés general que hoy ganase la tropa de Ancelotti; por el bien de nuestro Campeonato.
En el juicio público, lo importante es hacerles creer a los demás que tienes una buena mano.
En Barcelona pasan de la ortografía de “sólo” y pasan del fútbol.
Se juega el partido clave de la Liga. Si equipo blanco quiere que siga viva, debe ser ambicioso.
Más allá de los intereses que van a seguir compartiendo Barça y Madrid en la esfera privada, el matrimonio va a ser difícil de sostener en público.
El Madrid no va a tirar esta Liga, pero sabe que el domingo sólo le vale un resultado. Un triunfo les pondría como motos. Ellos sí creen. Yo también.
El Madrid se procuró un nuevo chute de confianza en Europa, perfecto para afrontar la visita al Barcelona.