Así nace un necrófago de Fallout: cinco horas sin poder cerrar los ojos y nada de radiación

Ni radiación ni leches. Para ser un necrófago lo que hacen falta son cinco horas de maquillaje en las que no puedes ni cerrar los ojos. Así lo ha confesado el propio Walton Goggins , el actor que interpreta a Cooper Howard en la serie de Fallout, o dicho de otro modo, la persona que da vida al cowboy más viejo que haya visto la televisión. En una entrevista para The Wrap, Goggins ha explicado las complicaciones de transformarse en ghoul.

“No podía cerrar los ojos y tenía que estar sentado en un mismo sitio todo el tiempo así que me ponía algún western de fondo y me servía para preparar el papel”, cuenta el actor en la revista. “Al principio llevaba 5 horas, pero Jake Garber (el responsable del maquillaje) logró reducir el proceso a 1 hora y 45 minutos. Se volvió tan bueno que tuve que pedirle que se tomara algo más de tiempo porque algunas de las películas que veía duraban dos horas o dos horas y media”.

Goggins desvela que lo único que estaba hecho por ordenador era la nariz, el resto era analógico y a base de prótesis. “No queríamos que la audiencia sintiera repulsión por verle la cara horriblemente desconfigurada. Queríamos que fuera atractivo de ver a su manera. Fascinante. Que te apeteciera inclinar la cabeza y estudiar su rostro. Y que si bien las piezas fueran duraderas, también fueran tan delgadas como para conservar y captar mi expresividad facial”.

El aspecto del necrófago se alargó y estudió durante nueve meses e incluso ya en rodaje el actor estaba preocupadísimo por cómo quedaría en cámara. “Era lo que más inseguridad me daba cuando empezamos porque no sabía si estaba transmitiendo todo lo que quería con mi cara. Jonathan Nolan tuvo que tranquilizarme y confirmarme que se apreciaba todo. Creo que se debió a que conservamos mis ojos. En un momento dado probamos a usar lentes de contacto y era muy diferente, a nadie le gustaba el resultado que daban así que no tardamos en quitarlas”.

Pero al final los sacrificios merecieron la pena. “Era aterrador verlo”, añade su compañera Ella Purnell, protagonista de la serie. “Era realmente espeluznante. Hicieron un gran trabajo con las prótesis y aunque parece un alienígena, al mismo tiempo hay algo inquietantemente humano en él. Creo que eso es lo que lo hace tan aterrador”.