Theatrhythm Final Bar Line: se abre el telón en Nintendo Switch

Final Fantasy ha construido un legado incontestable en la historia del videojuego. A lo largo de décadas hemos vivido historias emocionantes que a día de hoy recordamos con cariño. Final Fantasy X y su desafío a la institución religiosa, la historia de amor de Final Fantasy XVIII, el dolor y la pérdida en Final Fantasy VII... Hace pocas semanas, revivimos muchos de esos momentos en Distant Worlds, el concierto que homenajea una música tan icónica como la saga de Square Enix a la que acompaña. La música y la estrategia, por su lado, sirvieron de pilar para construir Theatrhythm, una divertida saga donde revisitamos míticos combates al ritmo de una banda sonora atemporal. El próximo 16 de febrero, Theatrhythm Final Bar Line nos hará bailar en Nintendo Switch con un precioso homenaje a toda una historia de Final Fantasy. En MeriStation asistimos a su presentación y entrevistamos a Ichiro Hazama, director; y Masanobu Suzui, productor; quienes hablan con nosotros de la evolución de un videojuego musical que incorpora a su partitura la estrategia rolera.

A ritmo de Final Fantasy

Theatrhythm Final Bar Line nos invita a un viaje por todos los Final Fantasy hasta el XV, que iremos desbloqueando a medida que progresemos en el juego y consigamos llaves para abrir los títulos a nuestra elección. Con cada juego, desbloquearemos a sus personajes, que podremos usar en diferentes juegos. Cada uno de ellos tiene un rol diferente, que deberemos tener en cuenta a la hora de organizar nuestra formación. Asimismo, iremos consiguiendo objetos y mejoras con los que podemos potenciar a nuestro grupo, con invocaciones incluidas y míticas como Shiva o Ifrit.

Adaptar Final Fantasy a un juego de ritmo fue una apuesta segura, según relata Masanobu Suzui productor de Theatrhythm Final Bar Line: “La música de Final Fantasy es tan icónica que sabíamos que los fans iban a responder bien ante un título musical sobre la saga”. Pero no se trataba de hacer un juego musical más: “Queríamos meter el componente estratégico de un videojuego de rol, al ser Final Fantasy una saga RPG”, añade Ichiro Hazama, director del juego. “Se puede disfrutar como un juego musical, pero también damos un aspecto muy original con la vertiente rolera. Disfrutas también mejorando a los personajes y escogiendo a un equipo equilibrado para las batallas”. Trasladar las batallas a un juego musical inspiró en hacer los 3 tipos de escenario que contiene la saga: las fases de combate, de exploración y de evento, donde las mecánicas cambian hasta lo que los creadores definen como “tres juegos en uno”. Final Fantasy VI fue el título que empujó a Hazama a crear un título musical, y a día de hoy la aventura de Terra le sigue emocionando.

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Bailando con Nintendo Switch

Theatrhythm Final Bar Line llega a la Nintendo Switch después de que sus predecesores brillaran en Nintendo 3DS. El cambio más evidente y que supuso un reto para Indies Zero y Squaare Enix es el propio tamaño de la pantalla, como destaca Hazama: “Pasamos de la pantalla portátil a la televisión, y al tener en un tamaño mayor el escenario y los personajes tuvimos que cuidar muchísimo más los detalles y la calidad del vídeo. Necesitamos aspirar a un mayor nivel”.

El salto a la DS ha propiciado un cambio ha causado revuelo entre el público: pasamos de la pantalla táctil a los Joycon. “Fue más fácil para nosotros”, apunta Hazama. “Ya habíamos hecho Kingdom Hearts: Melody of Memory y la versión de arcade de Theatrhythm, que nos ha permitido experimentar con los controles de mando y con pulsar dos botones a la vez. Queríamos expandirlo y explorar esa idea y sus posibilidades”. Suzui destaca que han tenido mucho tiempo para experimentar con nuevos controles y perfeccionar un sistema de juego que resultara atractivo para nuevos jugadores y veteranos que ya venían de la pantalla táctil de Nintendo 3DS.

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Un homenaje a Final Fantasy para todos los jugadores

A lo largo de 35 años, Final Fantasy ha evolucionado tanto en su diseño y su narrativa, y también a nivel musical, lo cual tiene su impacto en Theatrhythm Final Bar Line. “Ha habido una evolución, pero creo que la diversificación también ha sido clave”, subraya Hazama. “Si miras cada Final Fantasy, tienes a diferentes compositores, como Yoko Shimomura o Nobuo Uematsu, y de cada juego hemos escogido también unas pocas canciones que representan la variedad de compositores y estilos”. Suzui señala que la variedad de sonidos ha cambiado a lo largo de la historia de Final Fantasy, llegando a una mayor complejidad a medida que han pasado los años desde Super Nintendo a la Nintendo 3DS y la actualidad, y lo hemos tenido muy en cuenta a la hora de diseñar los desafíos.

En cuanto a los temas vocales, también han resultado un gran desafío para el estudio. Temas como One Winged Angel sí han resultado sencillos de trasladar, según Hazama, pero en otros temas ha resultado más complicado priorizar la parte vocal o los riffs de guitarra.

Hazama y Suzui también hablan de los modos multijugador, que crearon tanto en modo cooperativo como en versus: “Queríamos un juego que pudiera disfrutar toda la familia y un grupo de amigos desde el mismo sofá. Y también hemos metido un modo competitivo, pero no queríamos alimentar una rivalidad agresiva, sino una competitividad más amistosa. Creo que la gente que más jugará a este juego son fans de Final Fantasy, y con el multijugador creamos una oportunidad de socialización entre jugadores que adoran una saga y que pueden disfrutar de su música de forma diferente”.

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Theatrhythm Final Bar Line se dirige a públicos muy diversos: desde jugadores veteranos de Final Fantasy, jugadores novicios y fans de los juegos musicales. Con diferentes niveles de dificultad, Indies Zero tuvo todo un reto a la hora de crear un desafío apropiado y provechoso para todos. “Son públicos que buscan cosas diferentes en un juego”, reconoce Suzui. “Por ejemplo, Hazama es muy fan de los RPG y adora su componente estratégico. En cambio, otros jugadores se inclinan más por las técnicas de un juego de ritmo, y otros que adoran competir, pero sin excesivas exigencias; y otros tantos a los que sí les estimulan los grandes desafíos. Así que teníamos que hacer un juego que gustara a todos esos perfiles”.

¿Nuevas colaboraciones?

El mundo de Theatrhythm Final Bar Line no sólo se quedará en Final Fantasy: van a incorporar temas de otros juegos como NieR Automata y Live A Live. “Escoger estas colaboraciones entre otras propuestas ha sido difícil”, admite Suzui. “Hemos tenido que seleccionar títulos que fueran populares entre los fans y discutir con Square Enix, juego a juego, sobre qué podíamos adaptar y qué no. En cuanto a cómo integrar un juego como NieR Automata a Final Fantasy, Hazama tiene una política muy clara: sólo podemos los escenarios y la música, pero tanto los personajes como los monstruos tienen que ser de Final Fantasy.”

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Final Fantasy XVI es uno de los lanzamientos más esperados en este 2023 y su aparición en Theatrhythm Final Bar Line sería algo tan esperable como esperado. Pero el proceso de llevar un Final Fantasy a su escenario musical requiere su tiempo, como apunta Hazama: “Encajaría muy bien, pero con cada Final Fantasy que incorporamos seguimos un proceso. Tenemos que jugarlo en profundidad para comprender bien el juego y ver qué canciones conectan mejor con los fans, así que pasará bastante tiempo hasta que podamos hacer algo con Final Fantasy XVI”.

35 años de Final Fantasy en chibi

Otro de los retos de Theatrhythm Final Bar Line es aunar en una misma estética todo un legado de juegos que han evolucionado no sólo a nivel gráfico, sino estético. El estilo chibi fue el ganador a la hora de crear un estilo artístico que reuniera a todos los títulos. “Cuando creamos Theatrhythm, no teníamos un producto que uniera diferentes Final Fantasy y que tuviera un estilo artístico propio que los cohesionara”, recuerda Suzui. “Entonces decidimos que teníamos que apostar por un estilo que fuera consistente, que nada más verlo pudieras identificarlo con un Theatrhythm”. Así fue como Atsuhiro Tsuchiya, también conocido como Monster Octopus, decidió apostar por el chibo y animaciones de marioneta.

La narrativa de Theatrhythm Final Bar Line también obligó a Indies Zero a presentar a los personajes de diferente manera, cuya personalidad se conoce y se desarrolla en sus respectivos juegos. Y, aun así, conseguimos reconocer los rasgos más prominentes de una distante Lightning, una dulce Aerith o un jovial Tidus. Sus expresiones faciales han sido escogidas a conciencia, admite Hazama, y el color de su foco también nos adelanta rasgos su personalidad, y cada uno hace una reverencia especial, inspirada en el hecho de que hombres y mujeres en los conciertos saludan de manera distinta. “También hemos seleccionado las frases más representativas de cada personaje en su juego original para que recuerdes cómo son y para que los demás se hagan una idea de su personalidad. Nos llevó su tiempo elegir qué frases eran más definitorias para cada uno”.

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Theatrhythm Final Bar Line incluye un sistema de recomendaciones que ha sido para Indies Zero una de las mayores metas en el desarrollo. “Puede abrumar un catálogo de 385 canciones, y tener un sistema de recomendaciones puede ser una buena guía, también para incentivar a jugadores a probar canciones de otros Final Fantasy que no han jugado”, señala Hazama. “Hay una tendencia entre los jugadores que consiste en jugar sólo a canciones de juegos que se conocen, y con este sistema podemos recomendar canciones que puedan gustarles también. Así se crea una oportunidad para probar escenarios y temas nuevos”.

Dos días después de San Valentín, Theatrhythm Final Bar Line nos sacará a bailar momentos que nos volverán a llenar de amor, esperanza y nostalgia.