Entrevista
Javier Bardem, rey Tritón en La Sirenita: “Soy republicano, lo único que tengo en común con él es una hija”
El actor habla sobre su personaje en el filme de Disney, así como acerca de la experiencia de trabajar en el live-action del clásico.
Centro de Madrid, hotel Four Seasons. Accedemos al Salón Neptuno, un nombre que encaja a la perfección con La Sirenita, la versión en acción real del clásico de Disney, ya en cines. Allí, Javier Bardem, que se introduce en las escamas del rey Tritón, ha pasado por una intensa sesión de entrevistas, pero todavía le queda una más. Nada más entrar, una de las profesionales que nos acompaña le pide, no sin un cariz irónico, que nos diga algo que no haya contado en las otras 35 entrevistas anteriores, una solicitud bastante complicada, sobre todo porque los ritmos de vida actuales llevan a que el contenido esté volcado en la red en cuestión de minutos.
“Me abruma esto, no es bueno para las cabezas”, reconoce Bardem. “Me acuerdo cuando grabamos Los lunes al sol en el año 2002. Esperamos a que abrieran los quioscos para comprar los periódicos y fuimos a mi cuarto a desayunar cerveza y a leer las críticas, que fueron muy buenas, era algo especial”. Según el actor, “vamos demasiado deprisa” y estamos continuamente “anteponiendo lo que va a suceder”.
¿Qué tiene en común con el rey Tritón?
Horas antes del encuentro, un fotógrafo le ha pedido que hiciera un gesto de rey y el actor se ha hecho viral tras gritar un “¡viva la república!”. También ahora, una de las primeras palabras que salen de su boca es que es republicano. Pero ¿qué tiene en común con su personaje, el monarca de los mares?
“Que tengo una hija y ya. Creo que ahí se acaba todo”, responde. “Lo que es nadar no nado muy bien y aguantar la respiración bajo el agua tampoco. Imagino que también me excede el miedo y la inseguridad”, las expectativas de uno mismo sobre sus hijos. “Es el miedo de cualquier padre o madre, el concepto de proyectar lo propio en lugar de ver y escuchar a ese individuo, por pequeño que sea. Y respetar eso. Con el miedo y el vértigo que produce, pero todos hemos sido hijos e hijas”.
Hay una pulsión entre lo que uno quiere para sus vástagos y la libertad de ellos para convertirse en lo que verdaderamente son. “Ahí es donde me encuentro y me desencuentro con él, pero es una cosa que pasa inconscientemente”. Bardem considera que si le hubieran ofrecido ese papel antes de tener hijos probablemente no lo habría aceptado.
Una canción inédita interpretada por Bardem
Confirma que ha rodado una canción que no llega a salir en la película, aunque estará disponible en los extras del DVD y del Blu-Ray”. Se titula ‘Impossible Child’, que se traduciría como ‘Niña Imposible’, me imagino. Se trata de una canción original de Alan Menken y Lin-Manuel Miranda, preciosa, rock-opera, maravillosa. Primera canción que canto en una película, porque claro, yo empiezo a ensayar esto en el año 2019, la grabo en el 2020, pandemia. En el 2021 hago Los Ricardo y Cocodrilo [se refiere a la película infantil Lilo, Mi amigo el cocodrilo]”. ¿Y por qué se descartó? “Lo que hizo el director con ella es muy hermoso, habla de cómo Tritón se da cuenta de que puede ser la razón de que su hija quiera irse de casa. Esa vulnerabilidad del tema en ese momento de la película hubiese hecho spoiler del final”.
A pesar de ser el rey de los mares, Javier Bardem rodó casi toda la película fuera del agua, aunque también tuvo que mojarse. “El peor día fue cuando rodé en el agua, en Cerdeña. ¿A que no he contado que casi me ahogo?”, bromea. “Es mentira. La cámara estaba muy lejos. Yo tenía que estar metido en el agua con una cuerda—todo esto con armadura y peluca, pesaba un huevo—. Y sí, el agua me llegaba por aquí (se lleva las manos al cuello). Aguantaba la respiración, y cuando me quitaban la cuerda, tenía que contar treinta segundos y salir. Y me ahogaba, ‘pero sí eres Tritón’, me decían. Lo pasé fatal”.
Sebastián, el cangrejo que ejerce de consejero del rey, mantiene el mismo papel en La Sirenita de Rob Marshall, pero ¿cómo se grabaron estas escenas? Bardem explica que había tres versiones del personaje: “El cangrejo que sale, que es un muñequito que yo me quería llevarme a casa y no me dejaron; el segundo era un señor con marioneta que cuando el cangrejo se movía iba por ahí detrás de mí, vestido de azul para que no se le viese; mi favorito, los ojos del cangrejo, era una bola azul con los dos ojos. Ahí es cuando yo me moría de risa, yo no puedo trabajar con eso”.
“Lo bueno y el lujo es que el actor que lo dobla estaba en el rodaje. Yo nunca rodaba acorde a su grabación, yo hacía las escenas con el actor. Cuando el cangrejo salía trabajaba el actor. Me encontraba a su lado y eso molaba porque interactuaba con él”.
“Halle Bailey nos dejó alucinados”; “Melissa es muy loca, una punky”
Sobre sus compañeras de reparto ha tenido muy buenas palabras. Halle Bailey encarna a Ariel, la joven sirenita que anhelaba caminar en el mundo de los humanos. “Nos quedamos muy alucinados con su capacidad de trabajo, inagotable y minuciosa. Yo flipaba porque es la primera película que ha hecho. ¡Vaya primera película, Ariel! Y luego calentaba la voz y yo empezaba a llorar. Me emocionaba, pero ¿esta tía, esa voz? Hasta que cantó y dije: ‘¡Pero esta tía cómo canta así!’ Tiene una cosa que es de estrella cinematográfica real, un aura que cuando la ves dices... quiero seguir mirando. Ha nacido con eso”.
Melissa McCarthy se pone en la piel de la antagonista, la malvada Úrsula. Bardem solo compartió un día de filmación con ella, aunque la ha podido conocer más a fondo (no del océano) durante la promoción, ya que fue emparejado con ella en las entrevistas. “Me he partido el culo de risa, es una loca, una punky. Pero está muy bien, ella es una grandísima devoradora del mundo Drag Queen, y lo basó todo en eso, en Divine, que era la gran Drag Queen de la época de John Waters. Realiza un trabajo excepcional, me encanta lo que hace”.
La Sirenita ha adaptado su mensaje a la realidad contemporánea, pese a que el amor romántico sigue presente: “Hay que romantizar el amor, lo que no creo es en el amor idílico, en la idealidad del amor, que el amor es suficiente o que debe ser único o para siempre. Eso sí son cuentos de hadas que a una cierta edad no deberían existir”, opina. “Pero si creo en el romanticismo del amor diario, que lleva trabajo, esfuerzo y atención. El decir ‘te quiero, qué guapa estás’, realmente no olvidarte de ver a la persona y atender sus necesidades todos los días. Lo romántico es ver al otro de verdad. Ahí está lo hermoso, ahí está el encuentro, el dejarse ver y ver al otro de verdad. Pero eso tiene relación con lo que decías tú, vamos demasiado deprisa. Es imposible verse a uno mismo y ver a nadie”.
Sus hijos han influido en el tipo de películas en las que acepta trabajar: “Ahora he abierto mucho más la mano al tema infantil. Y he descubierto un mundo. Cuando yo hago Los Piratas el niño era muy pequeño; cuando hice Cocodrilo fue porque quería darme este placer y compartirlo con ellos. Me lo pasé tan bien. ¡Y coño! Hay que trabajar, hay que bailar, tienes que hacer como que estás ante un cocodrilo cuando no hay nada. Pero al mismo tiempo hay una ligereza que es divertido trabajarla. Mi personaje en la Sirenita es el más intenso. Queremos a un rey que lo pase mal, pues aquí estoy yo. Si el rey lo tiene que pasar mal aquí voy yo”.
En cuanto a las películas adultas, no ha cambiado su criterio de elección, salvo que en la actualidad evita participar en producciones que le tengan alejado de casa durante más de 14 días.
“¿Quién te gustaría que te diera el premio en el Festival de Cine de Donosti?”,le preguntan justo cuando la mesa redonda está a punto de concluir. “Mi madre”, comenta de forma sentida. Pilar Bardem falleció en 2021, pero el actor asegura que el premio se lo entregará alguien cercano. “Yo sé que va a haber alguien ahí que yo quiero que esté. No puedo decirlo”.
La Sirenita se ha estrenado exclusivamente en cines. Lee aquí la crítica de MeriStation.