Cómo jugar a Fire Emblem: guía para fans recién llegados y veteranos

El expresidente de Nintendo, Tatsumi Kimishima, anunció en abril de 2016 que Fire Emblem se había convertido en una de las principales franquicias de Nintendo. Aunque hoy en día parece evidente, hubo un tiempo en que la saga no gozaba de la popularidad de que disfruta hoy. A fin de cuentas, aunque el primer juego se lanzó en 1990, Fire Emblem no salió de Japón hasta 2003, y no nos llegó a España hasta 2004.

Es posible que lleves tiempo queriendo darle una oportunidad a la franquicia, pero que sientas que la gran cantidad de opciones es abrumadora y no sepas por dónde empezar. O puede que ya hayas jugado a unos cuantos títulos y estés buscando recomendaciones más avanzadas. Por eso elaboramos esta guía, para que encuentres el punto de entrada adecuado para ti.

Comencemos con algunas nociones básicas.

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¿Necesito jugar los primeros para entender los nuevos?

No. Los juegos de Fire Emblem no tienen continuidad, salvo contadas excepciones, así que puedes jugar al título que quieras sin miedo de entrar en una historia a medias.

Sin embargo, ten cuidado con estos casos:

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Todo lo que debes saber

Fire Emblem es una saga de RPG estratégico en la que reclutas personajes, los subes de nivel y les proporcionas equipamiento para luchar. En muchos títulos también puedes desarrollar vínculos entre unidades, haciendo que se vuelvan más poderosas cuando luchan en casillas contiguas.

Lo primero que llama la atención sobre Fire Emblem es que, cuando tus guerreros caen en combate, mueren para siempre. Esto te obliga a tener mucho cuidado con las decisiones que tomas, pues cada pequeño error podría ser fatal. Por esto se unen nuevos combatientes a tus filas en casi todos los capítulos, para llenar los huecos de los caídos. Esta característica puede resultar abrumadora para muchos jugadores, por lo que, a partir de Fire Emblem: New Mystery of the Emblem, todos los juegos incluyeron un modo novato en el que las unidades vuelven a la vida después de cada batalla.

Nuestros soldados disponen de distintos tipos de movimiento: unidades a pie, que son el eslabón básico de todo ejército; caballeros pesados, que se mueven con más lentitud pero gozan de mayor defensa; unidades voladoras, que pueden atravesar cualquier tipo de terreno sin penalizaciones; y unidades de caballería, que recorren más casillas, pero se ralentizan en terrenos difíciles, como los bosques, o son incapaces de cruzarlos, como ríos o montañas.

Otra característica especial es el triángulo de armas. Un resumen es que las espadas son fuertes contra las hachas, las hachas contra las lanzas, y las lanzas contra las espadas: es decir, que cada duelo es un “piedra, papel, tijera” de la muerte. Según el título, esta relación entre armas también se extiende a otros campos, como la magia. Además, existen otro tipo de relaciones: por ejemplo, los arcos son efectivos contra unidades voladoras, y siempre existen armas específicas para luchar contra caballeros pesados, dragones, etc.

Un aspecto central es el cambio de clase: en la mayoría de los títulos, nuestros personajes comienzan en una clase inicial y, al llegar al nivel 10, pueden usar un sello especial para evolucionar, o bien a una clase predeterminada, o bien a una que nosotros elijamos. Algunos juegos, como Fire Emblem: Three Houses, permiten mucha más libertad a la hora de asignar clases a nuestras unidades, haciendo que la experiencia sea mucho más personalizable.

Como hemos mencionado antes, nuestras unidades pueden crear vínculos si se encuentran en casillas contiguas mientras luchan. Además, algunos títulos, como Fire Emblem: Three Houses y Fire Emblem Engage, permiten actividades fuera de la batalla para estrechar lazos, tales como entregarles regalos o comer juntos. A menudo, cuando se consigue el suficiente nivel de afecto entre unidades afines, los personajes gozarán de un final juntos tras la batalla final. En casos como Fire Emblem Awakening y Fire Emblem Fates, incluso pueden llegar a tener descendencia, que se unirán a nuestras filas.

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Ahora que conocemos los detalles más importantes, es hora de hacerse una pregunta vital:

¿Por qué juego empiezo?

Si no tienes presupuesto

La forma más fácil de iniciarse es descargar Fire Emblem Heroes para tu móvil. Se trata de un gacha con 8 años de recorrido (y sin visos de acabar pronto) con muchísimo contenido free-to-play, por lo que no es necesario que gastes un solo euro para disfrutarlo. Puede ser un buen punto de partida, pues se trata de un Fire Emblem a pequeña escala: te enseña los tipos de unidades y movimiento, el triángulo de armas, algunas de las habilidades principales, e incluso te presenta a los personajes más importantes de todos los títulos. Eso sí, ten cuidado de no hacerte muchos spoilers.

Si tienes una Nintendo Switch

Una Switch es todo lo que necesitas para jugar al mayor best-seller de la franquicia: Fire Emblem: Three Houses. Es uno de los juegos más aclamados tanto por la crítica como por la audiencia (ambos le dan una nota de 89 en Metacritic), y suele aparecer en los puestos más altos de casi todos los rankings de la franquicia.

¿Lo mejor? Por el precio de un solo juego te llevas cuatro. Three Houses te da a elegir, desde el principio, entre tres rutas diferentes, y una de ellas puede salir de dos maneras distintas. La trama es de las mejor desarrolladas, además de ser de las más maduras y desgarradoras, y la jugabilidad no le va a la zaga: te da tantas opciones de personalización que cada partida se siente distinta a la anterior. También incluye muchas de las mejoras que han hecho que la franquicia más accesible, por lo que puede ser el mejor punto de entrada.

Si te gustan los juegos retro y tienes una suscripción + paquete de expansión a Nintendo Switch Online, puedes jugar a Fire Emblem: The Blazing Blade (conocido fuera de Japón como Fire Emblem, a secas). Este fue el punto de partida de muchos jugadores, pues fue el primer juego en salir de Japón, y goza de tanta calidad que la franquicia siguió publicando títulos en Occidente. Se trata de un juego muy divertido, que ofrece varias rutas, y cuyos protagonistas son de los más queridos de la saga.

Quizá hayas visto que el título más reciente es Fire Emblem Engage, pero no es recomendable empezar por ahí. Ni siquiera debería ser tu segunda o tercera opción. De hecho, es mejor no darle una oportunidad a menos que ya seas fan. El motivo es que este título posee la trama más infantil y endeble de la saga, hasta el punto de que puede parecer una comedia. Aunque seguramente sea el título con las mejores mecánicas de juego, y su apartado gráfico es excepcional a nivel técnico (independientemente de lo que opines de las decisiones estéticas), Fire Emblem Engage es un muy mal punto de partida, y dejará a los jugadores nuevos con una impresión errónea de lo que es la saga.

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Si tienes una Nintendo 3DS

Aunque la N3DS está cayendo en el olvido, son muchos quienes aún poseen una, y no es difícil encontrar todavía títulos de Fire Emblem de segunda mano. Si es tu caso, estás de enhorabuena, pues tienes acceso a tres juegos excelentes.

Fire Emblem Awakening no es solo el juego mejor valorado de la franquicia (la crítica le da un 92 y la audiencia un 9.0 en Metacritic), sino que también es el que la salvó de ser cancelada por Nintendo. Como confesaron sus directores en un Iwata Pregunta, en este título decidieron tomar decisiones muy atrevidas y experimentales dado que iba a ser el último. Eso lo convierte en un juego dinámico y fascinante, con algunas de las mecánicas más osadas hasta entonces. Junto a Three Houses, este es el juego más recomendable para los nuevos jugadores.

Para que te hagas a una idea, se trata de un juego de fantasía con viajes en el tiempo, en el que los descendientes de nuestros soldados vienen del futuro para prevenirnos de una distopía post-apocalíptica. Nosotros tomamos un rol en cómo son dichos descendientes, pues podemos elegir quiénes serán sus padres, alterando su apariencia y sus habilidades. Además, el (o la) protagonista es un avatar que creáremos nosotros a nuestra imagen y semejanza, sumergiéndonos aún más en la historia.

Fire Emblem Fates consiguió superar las ventas de Awakening gracias a una propuesta muy interesante: te sitúa en medio de un conflicto entre dos países, y debes elegir a cuál de los dos apoyar. ¿El girito? La realeza de ambas naciones es familia del protagonista, quien, de nuevo, es un avatar de nosotros mismos. La elección de ruta viene al más puro estilo Pokémon: debemos decidir si apoyamos a Nohr o Hoshido dependiendo del título que compremos, Linaje o Conquista. Más adelante se lanzó el DLC Revelaciones, una suerte de ruta dorada en la que ambos países se alían contra una amenaza común. Quizá lo más curioso sea que la trama de estos juegos fue desarrollada por Shin Kibayashi, un guionista y mangaka japonés.

En último lugar tenemos Fire Emblem Echoes: Shadows of Valentia, un remake increíblemente ambicioso de Fire Emblem Gaiden. Gozó de menos éxito comercial que sus compañeros de consola, pero se ganó el amor de su público gracias a una dirección artística excepcional y una banda sonora increíble.

Este título no repite la mecánica de tener descendencia que vimos en Awakening y Fates, pero nos ofrece otras propuestas muy interesantes, como la capacidad de explorar mazmorras al más puro estilo RPG. Si quieres una experiencia más tradicional, sin llegar a ser retro, este es el título ideal por el que empezar.

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Si eres un veterano

Puede que ya seas un fan curtido de la saga y tengas largos años de experiencia a tus espaldas. Quizá estás buscando recomendaciones más específicas para llegar a conocer el auténtico espíritu de Fire Emblem.

En ese caso, te recomiendo darle una oportunidad a la saga de Tellius, compuesta por Fire Emblem: Path of Radiance y Fire Emblem: Radiant Dawn. El acceso a ellos es más complicado, ya que fueron lanzados para Gamecube y Nintendo Wii, y existen pocas copias de cada uno, por lo que alcanzan un precio demencial de segunda mano. Sin embargo, merecen mucho la pena: no por nada, a menudo coronan los rankings de mejores juegos de la saga.

Estos títulos siguen la trayectoria de Ike, líder de los Mercenarios de Greil, y Micaiah, líder de la Brigada del Alba, en la guerra que se libra en el continente de Tellius entre Crimea, Daein y Begnion. Este conflicto quizá sea la historia mejor escrita de Fire Emblem, y por ello se ha convertido en uno de los más memorables entre quienes han disfrutado de estos juegos. Eso sí: recuerda usar la misma tarjeta de memoria entre ambos juegos, pues los progresos del primer título pasan al segundo.

Más difícil aún es que tengas una Game Boy Advance a mano, pero, si fuera así, no dejes de darle una oportunidad a Fire Emblem: The Sacred Stones. Desgraciadamente, aún no ha llegado al servicio de Nintendo Switch Online, pero hay posibilidades de que lo haga en un futuro.

Los fans acérrimos de la franquicia lo adoran como un juego de culto, y no es difícil ver por qué: tiene a dos de sus mejores protagonistas, trata algunos temas sorprendentemente oscuros para ser Nintendo, y tiene una jugabilidad rompedora para la época. Además, ofrece una gran variedad de clases nuevas, en contraposición a los títulos que vinieron antes. Si hasta ahora lo habías pasado por alto, este es el momento de ponerte a jugarlo.

En último lugar dejo el juego más inaccesible, una auténtica joya de nicho para los fans más puretas: Fire Emblem: Genealogy of the Holy War. Se lanzó en 1996 para Super Famicom, pero aún no ha salido de Japón; de hecho, los fans no dejan de pedir que Nintendo haga un remake al estilo Echoes: Shadows of Valentia. Es por eso que muy pocos han tenido la oportunidad de jugarlo.

Genealogy se ha ganado un puesto en todos los podios de la franquicia porque cuenta con una trama sorprendentemente madura y oscura que bien podría rivalizar con Juego de Tronos. Tanto es así que los directores de Fire Emblem: Three Houses, Toshiyuki Kusakihara y Genki Yokota, contaron en una entrevista con Gamespot que este título fue una de las principales influencias a la hora de crear la historia de Fódlan.

Además, si realmente quieres sumergirte en la historia del continente de Jugdral, puedes jugar a Fire Emblem: Thracia 776. Si lo haces, ve con una advertencia: es café para muy cafeteros. Es un juego endiabladamente difícil, en el que hasta los bastones pueden fallar cuando intentas curar a tus aliados. Ve con la idea de que este es el Dark Souls de los Fire Emblem.

Este es el estado de Fire Emblem a día de hoy, pero el nuevo año, marcado por los rumores de la consola sucesora de Nintendo Switch, seguramente nos traiga muchas nuevas noticias. ¡No pases por alto la oportunidad de ponerte al día con estos juegos antes de que llegue el momento!

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