Los 24 FPS del cine están muy bien, pero Hellblade 2 no es una película

Senua’s Saga: Hellblade 2 es uno de los lanzamientos más esperados de 2024. Se trata de la secuela de un título que se erigió como una de las grandes sorpresas de 2017. Ahora, el próximo 21 de mayo, Ninja Theory tratará de afianzar lo que ya es una franquicia con una nueva aventura protagonizada por Senua, una guerrera picta atormentada por los fantasmas que se ocultan en lo más profundo de su ser.

Todavía es pronto para poner en tela de juicio la calidad del título, pues habrá que esperar aproximadamente un mes y medio para que lleguen los análisis de la prensa y se conozca la puntuación que es capaz de alcanzar en Metacritic. Sin embargo, hay algo recién confirmado que, como resulta evidente, ha desatado la polémica entre los jugadores: el hecho de que Hellblade 2 funciona a 30 FPS en Xbox Series X|S.

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Esto no es cine

Recientemente, el director de efectos visuales de Senua’s Saga: Hellblade 2 explicaba al medio GamePro que la decisión de limitar el juego a 30 FPS atiende únicamente a razones creativas. ¿El motivo? El intento de acercarse a los 24 FPS de las películas en aras de brindar al ¿jugador? una experiencia que le permita sentirse como si estuviese en el cine. Sus palabras no me parecen una locura, aunque creo que hay un detalle que todos hemos pasado por alto.

Se trata, por supuesto, del hecho de que en PC no exista dicha limitación y el juego pueda funcionar a más FPS en función de los componentes de nuestro equipo. Partiendo de que en Xbox Series X|S no solo lidiaremos con los dichosos 30 FPS, sino con una resolución dinámica y que, para más inri, no habrá ninguna posibilidad de alternar entre modos gráficos, mi pregunta es la siguiente: ¿por qué no es igual que en PC? ¿no era una decisión creativa?

Llamadme loco, pero cuando veo algo que tiene rabo, cuatro patas y ladra, tiendo a pensar que es un perro. Y si tuviese que apostar todo lo que tengo a adivinar qué tipo de producto es Senua’s Saga: Hellblade 2, pondría incluso las llaves del coche a una sola palabra: videojuego. No he visto entradas para ver la historia de Senua en los cines, ni tampoco me ha llegado ningún correo de una plataforma de streaming en la que se indica cuándo se estrena. Lo único que sé es que lo jugaré en mi Xbox Series X. En peores condiciones que aquellos que lo hagan en PC, claro. Eso sí, yo en mi consola lo disfrutaré como si fuese una película y ellos no.

Igual si es una película, pero de terror

No me refiero a Hellblade 2, sino a la presente generación de consolas. Porque si bien es cierto que no voy a negar los avances técnicos que de los que estamos disfrutando, también lo es que me cuesta entender lo rápido que se ha normalizado que “esto es lo que hay”, según dice mucha gente cuando hablamos de que Starfield salió a 30 FPS, Dragon’s Dogma 2 y otros tantos traen de vuelta los tiempos de carga (al cargar partida) de hace diez años y el título de Ninja Theory no aspira a ofrecer 60 FPS porque se quiere parecer al cine.

Espero que en un futuro cercano en el que probablemente aparezcan esas PS5 PRO, Xbox Series Mega no sé qué o a saber qué invento, no llegue un parche que mejore las condiciones del juego y evidencie que más que una decisión creativa, todo se debía a una limitación de hardware. Todo sea por no tener que comenzar a pensar que la única película que hay aquí, es la que nos han querido vender.