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Es casi imposible acceder a la mayoría de juegos lanzados antes de 2010
Un estudio pone en entredicho la preservación de los videojuegos, al descubrir la dificultad de acceder a los clásicos.
Desde siempre a los ejecutivos de las principales compañías de videojuegos se les ha llenado la boca con la preservación, pero la realidad es otra muy diferente. De hecho, un estudio llevado a cabo por dos fundaciones ha desvelado que solo es posible encontrar aún un pequeñísimo porcentaje de los juegos lanzados antes del año 2010, concretamente, un 13%.
La preservación de los videojuegos, casi inexistente
Por ejemplo, si nos vamos muchos años atrás, allá por la década de los 80, descubrimos que solo el 4,5% de los juegos de una plataforma como Commodore 64 se pueden encontrar aún, en formato digital, por supuesto. Avancemos un poco más, esta vez a los años 90: si queremos disfrutar del catálogo de la familia Game Boy, solo lo podremos hacer del 5,8% de sus juegos, algo que se ha agravado debido al reciente cierre de la eShop de Wii U y 3DS. Desde entonces, solo los encontraremos a través del catálogo del servicio Nintendo Switch Online.
“Imagina que la única manera de ver Titanic sea encontrar una cinta VHS usada, y mantener el equipo antiguo para poder verla”, dice dicho estudio. “Suena loco, pero es la realidad que vivimos en los videojuegos, una industria de 180 mil millones, mientras los juegos y su historia desaparecen”.
Nada cambiará hasta 2024, cuando la legislación que rige la preservación y acceso a los videojuegos, la DMCA -Digital Millennium Copyright Act- será revisada. “Confiamos en que este estudio incite al cambio y la preservación de los videojuegos sea más fuerte antes de que perdamos más”, dicen desde la VGHF -Videogame History Foundation-.
“Espero que este estudio despierte a la gente”, dice Frank Cifaldi, codirector de la VGHF. “Durante años hemos sabido que la disponibilidad de juegos clásicos de manera legal y segura ha sido terrible, pero nunca hasta ahora se habían puesto números a eso. Los resultados son peores que cualquier otro medio”.