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Descansen en paz Wii U y 3DS: Nintendo cierra definitivamente sus servidores
El cierre de los servidores de Nintendo 3DS y Wii U tiene lugar entre el 8 y el 9 de abril de 2024. Toda la información, sistemas afectados y qué implica el cese de los servicios.
El 8 de abril de 2024 es la fecha señalada para el cierre de los servidores de las consolas Nintendo 3DS y Wii U. De esta forma llega el fin de una era, y su ocaso definitivo, ya que Nintendo decide descontinuar prácticamente por completo los servicios en línea de estos sistemas salvo por unas muy escasas excepciones. Debajo os dejamos con toda la información relevante, incluyendo a qué hora cierran los servidores y qué significa el cierre:
¿A qué hora cierran los servidores de Nintendo 3DS y Wii U? ¿Qué significa que cierren los servidores?
Tal y como se puede leer en la web de soporte de Nintendo, el cierre de los servidores de Nintendo 3DS y Wii U está previsto para las 4PM PDT del 8 de abril de 2024. Esta fecha y esta hora equivale a las siguientes en distintos territorios hispanohablantes:
- España (península y Baleares): 1AM del martes 9 de abril.
- España (Islas Canarias): 12AM del martes 9 de abril.
- Argentina, Brasil, Chile y Uruguay: 8AM del lunes 8 de abril.
- Bolivia, Cuba, República Dominicana y Venezuela: 7AM del lunes 8 de abril.
- Colombia, Ecuador, México, Panamá y Perú: 6AM del lunes 8 de abril.
- Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua: 5AM del lunes 8 de abril.
A partir de este día a esta hora en función de nuestra región, será imposible jugar en línea a los videojuegos de Nintendo 3DS y Wii U. Los sistemas afectados son Wii U y todas las consolas de la familia Nintendo 3DS (Nintendo 3DS, Nintendo 3DS XL, New Nintendo 3DS, New Nintendo 3DS XL, Nintendo 2DS, New Nintendo 2DS XL). Títulos como Splatoon, Mario Kart 8 o Super Smash Bros. for Wii U/3DS dejarán de ofrecer sus modos en línea tras el cierre de estos servidores.
Otro servicio que deja de tener soporte en Nintendo 3DS es SpotPass, pero StreetPass sí seguirá funcionando porque solo usa comunicación local. Eso sí, tanto en Wii U como en 3DS se podrá seguir jugando sin conexión sin problemas a los videojuegos que dispongan de este modo.
El Banco de Pokémon y el Poké Trasladador son dos aplicaciones de Nintendo 3DS dedicadas al almacenamiento de Pokémon que seguirán teniendo soporte por ahora. Son dos apps que permiten mover nuestros Pokémon entre distintos juegos e incluso sistemas: desde Nintendo DS a Nintendo 3DS y a Nintendo Switch vía Pokémon HOME.
Eso sí, Nintendo aclara que por lo pronto se podrán seguir actualizando los videojuegos que requieran parches y también se podrá volver a descargar todo lo que hayamos adquirido previamente al cierre de la eShop de 3DS y Wii U en marzo de 2023.
¿Cuáles son los motivos del cierre de los servidores de Nintendo 3DS y Wii U?
Aunque Nintendo no ha dado detalles al respecto, no parece descabellado pensar que el cierre de los servidores responde a una necesidad económica. Crear y conservar una infraestructura en línea cuesta dinero en forma del propio coste de los servidores y los sueldos destinados al personal que los mantiene, y tanto Nintendo 3DS como Wii U son videoconsolas que Nintendo dejó de fabricar en favor de Switch.
En otras palabras: Nintendo está actualmente centrada en seguir dando soporte a Nintendo Switch, motivo que indirectamente ha influido en la decisión de cerrar los servidores de Nintendo 3DS y Wii U.
El cierre de los servicios en línea es algo a lo que tristemente nos hemos acostumbrado y es inherente al paradigma actual de la industria de los videojuegos. En 2024 también se cerrará el bazar de Xbox 360 como parte de los planes de Microsoft de dejar de dar soporte a esta videoconsola lanzada en 2005 y también descontinuada en la actualidad.
El cierre definitivo de estas plataformas es un argumento recurrente a favor de la preservación de los videojuegos en formato físico, ya que los medios como los cartuchos o los discos que albergan muchos juegos tienen como vida útil la misma que el soporte físico que utilizan, en contraste con las plataformas digitales, que solo siguen “vivas” mientras que sus respectivos dueños lo permitan.