Dead Island 2 y la clave de su éxito: menos es más

No cabe duda de que Dead Island 2 se ha posicionado como una de las grandes sorpresas de lo que llevamos de 2023, sobre todo tras su convulso desarrollo. Ahora en manos de Dambuster Studios, la esperada secuela logró llegar a buen puerto cambiando la filosofía de diseño respecto a los estudios que pasaron por él.

¿Cómo ha cambiado Dead Island 2?

En declaraciones a IGN, su director creativo, James Worrall, ha explicado que Yager tomó una “aproximación demasiado compleja” a la hora de desarrollar los cimientos del juego. “Pienso que el problema al que se enfrentan los juegos, en general, es el exceso de complejidad, y eso se vuelve en contra del estudio cuando están intentando sacar el juego hacia delante. Así que, al principio, decidimos ‘vale, no, solo será gente contra zombis, y tenemos un motor de gore que va a hacer que el combate sea realmente visceral y táctil”.

Worrall también incide sobre la escala del juego. Acostumbrados al ritmo de hoy donde el tamaño de los mapas cada vez es más grande, el equipo decidió reducir la escala a pequeños distritos desconectados entre sí, todo ello dentro de la ciudad de Los Ángeles. Esto choca con la visión original en Yager, quienes buscaban varias localizaciones de California en un mundo abierto de pleno derecho. Es más, buscaban incluir cooperativo para hasta ocho jugadores, mientras que la versión final de Dambuster Studios lo redujo a tres.

En MeriStation logró una calificación de 7,8 sobre 10, un análisis en el que decíamos que era “diversión en estado puro”. “Pese a que no nos encontramos con una evolución de la fórmula, el equipo ha dirigido de manera inteligente sus recursos. Nos encontramos con una aventura que funciona, mantiene un buen ritmo y que cumple con los requisitos de los fans del género. Le sienta realmente bien prescindir de un mundo abierto de grandes dimensiones”, concluíamos. Puedes leer el texto aquí.

Fuente: GamesRadar