WWF WrestleMania X8
¡Los calzones al aire están de moda!
El Wrestling es seguido por millones de aficionados en USA, aunque en el resto del mundo también tiene sus adeptos. THQ nos trae la segunda incursión de este deporte en GameCube. ¿Cumplirá con las expectativas?
El Wrestling es seguido por millones de aficionados en USA, aunque en el resto del mundo también tiene sus adeptos. THQ nos trae la segunda incursión de este deporte en GameCube. ¿Cumplirá con las expectativas?
El entrenador da vueltas nervioso. Un sudor frío recorre su prominente calva mientras sus pequeños ojillos giran sin cesar mirando hacia todos los rincones del cuartucho donde os encontráis junto al masajista. De repente se para, hace rechinar los dientes y decide hacer una llamada telefónica con el móvil. Tras un minuto de susurros inaudibles desde la camilla en la que te encuentras postrado, te grita en el oído por última vez: "¡Es tu única oportunidad para hacerte con el cinturón de campeón!. ¡Así que no falles!".
Los gritos de la muchedumbre enfurecida en el estadio resuenan a través de las delgadas paredes del vetusto edificio, y los periodistas se agolpan en la puerta esperando a que sea abierta. Emoción, un ligero cosquilleo en el estómago, y unas pequeñas molestias en el brazo del anterior combate, son las únicas sensaciones que consiguen llegar a tu ofuscado cerebro, lo que cuenta ahora es salir a la palestra y hacerlo lo mejor posible, la pantomima de la lucha libre americana está a punto de comenzar y tú eres uno de los personajes que pululan este divertido y a la vez extraño escenario. No defraudes a tus seguidores, puede que consigas el ansiado cinturón de campeón de un certero sillazo. Ya te tocaba el relevo...
Y es que se hacía extraño que todavía no hubiera sido lanzado ningún título de wrestling en condiciones para GameCube, tras la cantidad ingente de juegos de este tipo aparecidos en Nintendo 64. THQ y Yuke, dos auténticos "expertos" en la materia, nos traen de la mano de Proein Wrestlemania X8, un juego que combina sabiamente el espectáculo de este deporte y el carácter popular, con 42 luchadores, féminas incluidas, que ha sabido evolucionar a lo largo de los años y adaptarse a los tiempos actuales. Sin embargo no todo iba a ser bueno, y si bien como primerizo no anda nada mal, rectificar es de sabios y hay cosas que nos gustaría ver reparadas en futuras entregas. ¿Qué no? Bien, sigue leyendo y te harás una idea de lo que podrás encontrarte al introducir X8 en tu GameCube.
g r á f i c o s :
Sin llegar a ser brillantes cumplen de forma correcta con su cometido. Sin parones y a unos continuos 50 frames por segundo durante los combates, incluso cuando luchan 4 personajes a la vez en los rings enjaulados, es desde luego lo mejor que podemos destacar del engine gráfico. Los luchadores, algunos realizados mejor que otros, y más fieles a su aspecto real, no son para tirar cohetes. Construidos a base de pocos polígonos, presentan un aspecto demasiado cuadrado para lo que hubiera sido deseable, sobre todo en los planos cortos de la cámara. Lo bueno es que la iluminación incide de forma maravillosa sobre los esculturales cuerpos, y los reflejos y brillos estarán a la orden del día, quizás en determinadas ocasiones sean excesivos, pero ahí queda. Algunos detalles como el pelo de determinados luchadores también han sido bien resueltos Las melenas al viento están de moda entre los luchadores así que no te extrañe ver esas caídas tan dramáticas o esos complicados cortes.
Negativamente también hemos de hacer referencia a los graves errores de clipping con algunos objetos, sobre todo las mesas cuando se cogen como "armas", que atraviesan continuamente partes del ring, al propio contrincante, etc. No influyen demasiado en el transcurso de la partida pero se hacen notar y puede hasta ser molesto. Más dedicación en estos errores no hubiera estado nada mal.
Los estadios por su parte son espectaculares. Es una auténtica pena que no queden en un primer plano durante los combates, debido sobre todo a la naturaleza de este deporte, pero podremos admirarlos y fijarnos en sus detalles durante las fastuosas entradas de los luchadores al principio de las peleas. Nueve en total, cada uno con unas características distintas que los diferencian entre ellos, pero todos bien construidos y de aspecto sólido y convincente. Podríamos llegar a decantarnos por el ring que pone nombre al mismo juego: Wrestlemania X8, con unas pantallas gigantes dignas de mención y unas estructuras metálicas de fondo que ni la Fura del Baus.
El público que llena los estadios sin embargo son otro cantar, y si bien es lo mejorcito que podemos encontrarnos en este tipo de títulos, no llega a satisfacernos del todo por el momento. Se trata de sprites planos, con pocos frames animados y algo insulsos (¿dónde están las manos gigantes y los típicos fans tratando de tocar a los luchadores en el pasillo hacia el ring?) En fin, por lo menos en Yuke se han dignado a ofrecer bastante profundidad en el público y a que porten pancartas con los nombres de los luchadores que se encuentran combatiendo en ese momento. Algo más de atención al respecto podría otorgarle mayor personalidad el juego.
Por último no podemos dejar pasar las increíbles entradas de los luchadores en el ring. Si algo ha caracterizado a este espectáculo puramente americano, es la parafernalia que poco a poco se ha ido complicando a lo largo de los años, convirtiéndose finalmente en una de las partes más importantes de los propios combates. Todos los luchadores, los 42, tienen su entrada predefinida, con escenas de vídeo a pantalla completa (de calidad regular) o bien con animaciones de fondo plasmadas en las pantallas gigantes que adornan los estadios. El Enterrador entrará con su Harley acompañado de la típica música rockera; The Rock precisamente, hará el "gamba" micrófono en mano como sólo él sabe; o Hollywood Hogan el pobre, nos haré recordar que antes eran tiempos mejores para esta auténtica leyenda del wrestling. Todos ellos irán acompañados por el fervor del público, gritando incesantemente y creando un fabuloso ambiente, y por efectos de luz bien conseguidos, amén de sus características canciones claro...
m ú s i c a :
¿Cómo? ¿Mande? ¿Qué es eso que suena durante los combates y que trata de convertirse por arte de magia en una melodía? ¡Uf! Hacía tiempo que no escuchaba, o sufría más bien, un despropósito tan grande en una banda sonora para un juego. Si bien las músicas en los títulos de wrestling, durante los "encarnizados" combates, no tienen porque ser sorprendentes, no deja de ser cierto que las canciones en Wrestlemania X8 son patéticas y con una calidad ínfima, que ponen incluso en aprietos el apartado sonoro de GameCube. Composiciones repetitivas hasta la saciedad inundadas de samples cutres y de baja calidad, más bien pertenecientes a máquinas de décadas anteriores, son lo que nos encontraremos durante el combate. Lo mejor es que podremos desactivarla y concentrarnos en los efectos sonoros, aunque desgraciadamente éstos tampoco son como para alegrarse en exceso.
Lo único que se salva de la quema absoluta de tamaña herejía, son los breves cortes musicales que preceden a los combates y en los que aparecen los luchadores. Aunque de sonido poco contundente para lo que podría esperarse, por lo menos las reconocibles canciones "The Rollin", "The Game" o "Here Comes The Money", ayudan a que el apartado musical levante cabeza. Algo es algo.
s o n i d o F X :
Lo más sorprendente sin duda es la ausencia de un comentarista, tan típicamente arrogante e insaciable en esta clase de "retransmisiones deportivas". Puede que se haya eliminado por acabar convirtiéndose en la mayoría de las veces en un simple patán que repite frases a destiempo, o es que simplemente a Yuke no le ha interesado añadir esta opción, pero lo que está claro es que no hay atisbos de un comentarista que amenice los combates con sus chistes y groserías.
En cuanto al resto de los sonidos poco que destacar, golpes, plantillazos, patadas voladoras (lo mejor del wrestling), utensilios varios como mesas, sillas, escaleras, etc. están vivamente reflejados en el juego, aunque sin aspavientos ni la calidad suficiente como para destacar. Afortunadamente provocan que la terrible música quede solapada en un merecido segundo plano durante los combates.
j u g a b i l i d a d :
Desde aquellos antiguos juegos de wrestling de principios de los 90 (quien no recuerda los esfuerzos de Acclaim por llegar a todas las máquinas con su WWF), los títulos basados en este peculiar deporte han tratado de mejorar la simulación y olvidar un tanto la vertiente arcade en la que se incidía en un principio. Sin embargo, la lucha libre no es fácil de simular, hay numerosísimos aspectos a los que atenerse y contempla en el engine del juego. Desde los agarres (fundamentales en un juego de estas características), hasta el uso de determinados objetos de forma poco ética.
Si nos quedamos con alguno de los juegos que han tratado de plasmar de la mejor forma este deporte en una máquina de Nintendo (y probablemente en general) sería sin duda No Mercy y Wrestlemania 2000, de Aki y la propia THQ. Muchos de los componentes actuales de Yuke son precisamente antiguos empleados de Aki, así que era de esperar que podríamos encontrarnos en Wrestlemania X8 con un producto basado en la misma jugabilidad que su "predecesor", o al menos un control semejante. Sin embargo la sorpresa ha sido mayúscula. El juego para GameCube resulta, al menos en nuestra opinión, menos controlable y peor definido a la hora de combatir.
La diferencia mayor estriba en el orden de ejecutar los golpes y en el algo extraño sistema de "agarres" al contrario. Si bien al final el jugador puede acostumbrarse, nos parece más ágil y dinámico el sistema empleado en los dos títulos para la consola de 64 bits de Nintendo. En X8 tendremos que ejecutar miles de combinaciones de botones (hay nada menos que cinco páginas reservadas a los controles en el manual del juego) que son complicadas de memorizar y por ende de realizar durante el combate. Eso sí, casi todos los golpes y llaves típicas de este deporte estarán representadas con bastante celo en el juego de Yuke, y por lo menos los expertos en la materia sabrán sacarle todo el jugo mientras que el resto de jugones nos tocará quedarnos en segundo plano.
En cuanto a los modos de juego, no nos podremos quejar de ninguna de las maneras, y es que Yuke se las ha ingeniado para embutir en el GOD una auténtica amalgama de modalidades de combate diferentes, con posibilidad incluso de definir tus propias reglas. A saber:
Además, podremos combatir en rings normales, sin reglas (hardcore), donde todo vale, en jaulas abiertas o cerradas (la celda infernal), combates de escaleras, de mesas, del hombre de hierro, etc. No será por posibilidades desde luego.
Y si te aburres de los luchadores predefinidos siempre podrás optar por crearte tu propia super estrella, hecha a medida y con los rasgos que más te gusten. Podrás "configurarlo" desde el más nimio detalle de la cara hasta el tipo de ropaje o los tatuajes que desees que luzca, incluso podrás definir sabiamente los movimientos, actitud y personalidad que pretendas obtener durante los combates. Una opción desde luego a tener en cuenta, sobre todo si eres de los que prefieren el multijugador con unos amiguetes y cada uno con un personaje creado desde cero.
c o n c l u s i ó n :
Wrestlemania X8 es por ahora el único juego de estas características disponible para GameCube (Legends of Wrestling no es más que un esperpento), por lo que si eres un auténtico fan de este inconfundible deporte, y te encuentras en tu salsa cada vez que se habla de agarres, latiguillos o patadas voladoras, puede que el título de THQ satisfaga tus necesidades de cara a la lucha libre. Aún con esos problemas y defectos a los que hacemos alusión más arriba, sigue siendo impresionante la cantidad de movimientos y combinaciones de los mismos que podemos hacer en un combate, y la cantidad de opciones y modos de juego en el título no deja de ser abrumadora con todas las de ley.
Quizás más divertido en multijugador que en solitario, y con diversos aspectos por pulir, tanto técnicos como jugables, Yuke podría haber creado un producto mucho más acorde con la actualidad y la máquina en la que se desarrolla. En fin, quizás para la próxima ocasión...
l o m e j o r :
l o p e o r :
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.