WWE: Day of Reckoning 2

Vuelve el mejor juego de wrestling a GameCube, con grandes mejoras en la jugabilidad y un apartado gráfico que quita el hipo. Pese al poco interés europeo por la lucha libre, Day of Reckoning 2 bien merece nuestro interés.

Uno de los géneros que menos interesa al público europeo pero encandila al norteamericano son los títulos basados en la WWE, World Wrestling Entertainment. Uno de sus mayores exponentes es la licencia oficial que posee THQ y que por ende posee los títulos más fidedignos y a la postre, más interesantes.

El año pasado estrenaban nueva saga. Tras dejar los WWE Wrestlemania para Xbox, se estrenaban en GameCube con WWE Day or Reckoning, cosechando muy buenas críticas de prensa y gran acogida entre los poseedores de la consola. Justo un año después, THQ prepara la continuación, también en exclusiva para GameCube.

THQ, o más concretamente, el desarrollador japonés Yuke's, han centrado sus esfuerzos en mejorar varios de los aspectos en los que más flaqueaba su antecesor. En primer lugar suponemos una historia más limitada, pues empezar como pobre luchador hasta alcanzar la fama parece un gran argumento, pero ahora que ya somos famosos, la historia buscará nuevos y giros y situaciones más allá del cuadrilátero.

Cada luchador tendrá su propia historia, con problemas y beneficios personalizados, y sobre la que podremos variar su desarrollo dependiendo de cómo reaccionemos en distintas situaciones. Habrá que entablar amistades con otras superestrellas, conseguir el cariño de cuantos más admiradores posibles, e incluso ser capaces de seducir a la Diva, esa mujer que la WWE elige, además de por su belleza y sus curvas, por sus cualidades físicas dentro del ring.

Mientras la barra de energía se está llenando, será preferible evitar los ataques del contrario o defendernos con golpes menos potentes y más disuasorios. Pero cuando alcance un determinado nivel, será el momento de inclinar la balanza a nuestro lado y pasar a la acción. Con el stick C podremos ejecutar diferentes tipos de retención de nuestro contrincante para mantenerlo 3 segundos pegado a la lona para salir victoriosos, además de ejecutar peligrosos ataques especiales o incluso humillarlo de cara al público, sujetándole las extremidades para provocarle daño (no intentéis hacerlo en casa, que luego los videojuegos resultan ser violentos…).

Estos movimientos consumen stamina, y si no lo hacemos en un momento acertado, o nuestro rival consigue quitarnos de encima mientras lo mantenemos contra el suelo no durará en aprovechar el momento: estamos bajos de fuerza, acaba de ganarnos una contra, y no dudará un segundo en hacernos morder el suelo. De ahí la parte estratégica en la que decidamos si el momento es bueno o no para realizar la llave pertinente. La cabeza será importante si no queremos servirle la victoria en bandeja.

El detalle de los luchadores raya a un excelente nivel, y veremos un modelado de personajes que promete ser lo más selecto de GameCube y uno de los mejores trabajos gráficos de la actual generación de consolas. Cada personaje tiene su propia musculatura, nada de modelos preestablecidos: brazos, piernas, torso, abdominales… Añade su propia vestimenta, desde ajustados slips hasta las vestimentas más estrambóticas que podamos imaginar. Un 30% más de polígonos por luchador evidencian el salto en tan sólo un año de desarrollo, suprimiendo además del público en 2D por uno poligonado y mejor animado.

Venas marcadas, tatuajes, sudor, puñetazos que lanzan saliva al aire, tatuajes, distintos tonos de piel… Todo está perfectamente texturizado, las luces y sombras de focos y flashes de cámaras recorren toda la anatomía y la piel refleja a la perfección estos cambios en iluminación. Donde más se nota el detalle gráfico es en las caras, perfectamente recreadas, y que muestran expresiones de dolor, gritos, gestos, e incluso hasta se han moldeado los dientes. Las capturas hablan por sí solas.

WWE Day of Reckoning 2 supone un nuevo título del género exclusivo en GameCube, sumado a la licencia oficial que permite luchadores reales, mejoras en el control, una historia más elaborada y un salto gráfico que evidencia todo lo que puede dar de sí la consola de Nintendo. Su lanzamiento en Europa todavía es una incógnita, más que nada por el escaso interés que suele tener la lucha libre.