Análisis de WWE 2K25, aún con sus peros, un producto completísimo para el fan del wrestling

La WWE se encuentra en un momento de expansión indudable, y es que en el momento en que este texto vea la luz, de hecho estará por celebrarse, o se habrá celebrado ya, un show principal de Smackdown! en Barcelona. La emisión de los shows semanales y PLE en Netflix ha hecho que la compañía de wrestling más popular del planeta sea accesible a más público, contando con las estrellas lo suficientemente carismáticas como para elevar el listón: el face por excelencia Cody Rhodes, CM Punk, Roman Reigns, Seth Rollins, las esporádicas -pero rotundas- apariciones de The Rock, y por supuesto, el recientemente tornado a heel John Cena, en su tour de retiro. Visual Concepts, conscientes de ello, han dado un paso más incluyendo novedades de enjundia en este WWE 2K25, aunque las más importantes tienen más de potencial por explotar que de realidad.

Ampliar

La Isla aún tiene mucho margen de mejora

La principal novedad es La Isla, protagonizada por Roman Reigns, la primera aventura en un entorno abierto de la saga que bebe directamente de La Ciudad de NBA 2K, estando ambos juegos desarrollados por el mismo estudio, aunque por equipos diferentes. Es evidente que el feedback ha existido, pero por ahora, este modo se percibe más como una primera y tibia toma de contacto que como algo en lo que realmente vayamos a invertir decenas de horas durante la temporada, aunque eso es algo que el tiempo dirá. Visual Concepts irá añadiendo contenido temático, seguramente coincidiendo con acontecimientos y eventos reales, pero por el momento nos encontramos con un entorno no demasiado grande donde, entre guiños y homenajes a diversas estrellas como Undertaker o Rhea Ripley, también podemos toparnos con, cómo no, varias tiendas donde adquirir atuendos, tatuajes o complementos para nuestro alter ego... a cambio de los consabidos VC.

Esta es, como sabemos sobradamente, la moneda virtual -que puede adquirirse a cambio de dinero real- habitual en los juegos de 2K Games -también presente en PGA Tour 2K25 y por supuesto, en NBA 2K-, y se ha convertido peligrosamente en una seña de identidad de la compañía. Como no podía ser de otra manera, estos VC también son empleados para mejorar las habilidades de nuestro personaje, y aunque es posible conseguirlos jugando, las cantidades son irrisorias en comparación con los precios de todo. No podemos dejar pasar la oportunidad de quejarnos por estas mecánicas más típicas de un juego freemium para móviles que de un título que se lanza a precio completo, pero mientras sea un modelo de negocio rentable, mucho nos tememos que continuará al menos en el medio plazo.

Ampliar

También duele prácticamente comenzar este análisis hablando de micropagos, pero es lo que hay. Afortunadamente, disfrutemos de este modo o no, su presencia no es óbice para que continúen las formas de juego habituales en las que se perciben mejoras en absolutamente todas, algunas de peso.

El Hombre Sabio nos presenta un Showcase fantástico

Con sus peros, pero se antojaba difícil superar Showcase of the Inmortals, la sucesión de combates históricos de Wrestlemania que disfrutamos en WWE 2K24, repleto de momentos realmente icónicos. Contra todo pronóstico, el Showcase de WWE 2K25, con The Bloodline como protagonista, ha conseguido superarlo, y Paul “Wiseman” Heyman, con su indudable carisma y sus intervenciones tiene mucho que ver, introduciendo cada combate de una manera que sería capaz de aportar empaque a un squash en un house show cualquiera. En esta ocasión vamos a encarar una serie de combates potagonizados por los diferentes miembros, actuales o pasados, de esta facción, tales como Reigns, Solo Sikoa, Sami Zayn o Jacob Fatu, pero también por sus predecesores.

Ampliar

Hay dos cambios principalmente que nos han hecho disfrutar especialmente de este Showcase. Uno de ellos es, aunque a veces aporte una dificultad endiablada, la presencia de objetivos limitados, disponiendo de un tiempo limitado para llevarlos a cabo. Insistimos, a veces es muy difícil hacerlos en el tiempo determinado, pero añade una capa de profundidad y rejugabilidad, ya que completándolos todos ellos conseguiremos varios desbloqueables para el resto de modos. Ya que decimos esto, al César lo que es del César: por mucho que antes habláramos de micropagos, WWE 2K25 tiene una cantidad de contenido brutal al que podemos acceder simplemente jugando, y también hay que dejar claro que en ningún momento hemos sentido que sea necesario pagar un solo céntimo para disfrutar.

A lo que íbamos. Otro de los elementos que hace diferente este Showcase es el desarrollo de los combates. Como recordamos, en Showcase of the Inmortals debíamos llevar a cabo cada pelea exáctamente tal y como transcurrió realmente, pero ahora nos encontramos con situaciones what if?, en los que tendremos que cambiar el resultado final. También habrá combates imposibles entre luchadores de diferentes generaciones, con lo que los escenarios se amplían exponencialmente, así como la diversión. Temíamos por la capacidad de este modo para sorprendernos y divertirnos, pero hay que confesar que el trabajo en este sentido ha sido sencillamente fantástico.

Un completo patio de recreo para el fan del wrestling

El aficionado a la saga va a encontrarse un lugar familiar si es asiduo durante las últimas temporadas. My Faction vuelve a representar el modo favorito para los coleccionistas, y aunque estén presentes las prácticas habituales del coleccionismo de cartas -no hace falta ni mencionarlo a estas alturas-, presenta varias mejoras que vale la pena destacar, como la sustitución de Proving Grounds por World Tour. Este nos ofrece una cantidad considerable de desafíos temáticos que son especialmente atractivos por el hecho de que nos va a animar a utilizar las cartas menos jugables de nuestra colección, teniendo que jugar con cartas de bronce o plata y verdaderos mindundis que de otra manera, no usaríamos en todo el año.

Ampliar

Mientras, Faction Wars vuelve a sobresalir al ser casi un modo dentro de este modo, con carácter roguelike, y en el que se han añadido nuevos nodos para hacerlo aún más variado. Eso sí, parece que hay que calibrar un poco la dificultad, ya que solo en la segunda fase nos hemos encontrado con un equipo de 4 formado por miembros de The Bloodine y donde todos los contendientes comienzan con el super finisher (tres barras) cargado, habiendo terminado todo tras dos spear de Roman Reigns en apenas unos segundos. Por desgracia, nos hemos encontrado también con Live Events para los que es requisito necesario para participar hacerlo con cartas que solo aparecen en sobres, poniendo una barrera incomprensible para quien no quiera invertir dinero real.

El modo que sigue mejorando cada año, siendo a su vez completamente diferente, es My Rise. En WWE 2K25 interpretamos a dos nuevas estrellas de la WWE, tanto masculina como femenina, que unen fuerzas para derrocar a Mutiny, un motín que ha partido de NXT y amenaza con tomar el control de toda la empresa. Ambos personajes, apoyados por CM Punk, lideran la resistencia que se opone a este movimiento que cuenta con luchadores de la talla de Kevin Owens o Bailey, y del cual Triple H parece estar al margen. La historia se desarrolla con unas cuantas decisiones que tomar que marcarán el devenir de la misma, y cuyas diferencias hacen que valga la pena darle una segunda vuelta -como mínimo- para descubrir todas las ramificaciones, además de, dicho sea de paso, plantearnos combates divertidísimos, como esta Elimination Chamber contra Andre Chase, Nathan Frazer, y más rivales.

Ampliar

Esta vez sí, la única manera de hacer progresar a nuestros dos protagonistas es únicamente a través de los puntos de experiencia que logremos en los combates, y como en la variedad está el gusto, estos serán de muchos tipos distintos. Se trata de una manera divertidísima de descubrir todos los tipos de pelea que podemos organizar al tiempo que disfrutamos de una trama que firmaría el propio Triple H en la WWE real.

Mientras, My GM vuelve a hacer gala de las mismas virtudes de los últimos años, pero también de los mismos defectos. Da la sensación, al fin y al cabo, de que para tener éxito como mánager de una marca tenemos que seguir unas normas demasiado estrictas: combinar siempre los mismos tipos de luchador, repetir una y otra vez la misma rivalidad... Sí es cierto que tenemos un montón de opciones, y es realmente divertido manejar el destino de las estrellas que hayamos elegido en el draft, cuadrar presupuestos, etc... pero también frustrante sabiendo que a la hora de organizar un show estamos atados a unas reglas que no nos dejan dar rienda suelta total a nuestra imaginación. Puestos a soñar, nos gustaría que en Visual Concepts se atrevieran a combinar lo mejor de My GM y lo mejor de Universe para crear lo que sería un modo de juego total que, sin lugar a dudas, sería automáticamente el favorito de los fans. O simplemente, y este cambio es más sencillo de implementar, que las estrellas que consiguiéramos in game tuvieran repercusión en la percepción del combate entre los fans.

Ampliar

La pasada generación no da más de sí, pero WWE 2K25 cumple

Una vez más, y cruzamos los dedos porque sea la última, WWE 2K25 está también desarrollado para PlayStation 4 y Xbox One. Esto no es óbice para que Visual Concepts sea capaz de plasmar unos modelos de la casi totalidad -prácticamente 300- de los luchadores realmente buenos, pero no podemos evitar pensar en lo que podríamos llegar a disfrutar si se centraran por fin en tan solo la presente generación y PC. De momento solo hay unos pocos títulos deportivos que se han atrevido a dar el salto -NHL 25-, pero ojalá con el tiempo lleguen más, y es que esta es una franquicia que ganaría muchos enteros con un paso adelante visual. Aún así, solo hay que ver la imagen bajo estas líneas, el nivel es muy alto para tratarse de un desarrollo multigeneracional.

Ampliar

Nota: 8,1/10

Hemos realizado este análisis con un código facilitado por 2K Games para PlayStation 5.