Tony Hawk's Pro Skater 2 (GBC)
Vuelve a subirte en tu monopatín y esta vez disfrutalo de verdad
El skateboarding vuelve a la Game Boy Color después del patinazo (y nunca mejor dicho) del anterior Tony Hawk para volver ahora con más fuerza y retarnos a atravesar diversos escenarios haciendo gala de todas las piruetas imaginables.
El skateboarding vuelve a la Game Boy Color después del patinazo (y nunca mejor dicho) del anterior Tony Hawk para volver ahora con más fuerza y retarnos a atravesar diversos escenarios haciendo gala de todas las piruetas imaginables.
Bajo un sistema de control totalmente arcade, este juego nos invita a tomar el papel de cualquiera de los 13 patinadores reales disponibles (entre ellos Tony Hawk, por supuesto) en uno de los dos únicos modos de juego: modo carrera y patinaje libre. A lo largo de los 7 circuitos, 4 de ellos disponibles desde el principio, deberemos cumplir un total de cinco objetivos a cada cual más complicado (pero no difícil) que el anterior. Hacer un combo de cinco movimientos, deslizarnos por todos los taxis de la ciudad, conseguir 5.000 puntos o completar la palabra SKATE cogiendo las cinco letras repartidas por el circuito, son algunos ejemplos.
El principal atractivo del juego está en ir superando poco a poco cada uno de los retos para los que cada vez necesitaremos mayor pericia y conseguir realizar más movimientos especiales. De esta forma ganaremos más dinero para comprar más monopatines y poder alcanzar los objetivos más complicados. Al igual que en la vida real, cada vez que no nos salga un movimiento o no consigamos saltar hasta donde queramos, nos picaremos para seguir intentándolo una y otra vez hasta conseguirlo. Los puntos son vitales en este sentido, y los perderemos si no aterrizamos bien después de hacer cada salto.
Sin embargo, son sólo dos los modos de juego que tenemos a nuestra disposición, aunque han intentado darle un poco más de variedad añadiendo muchos patinadores y dos monopatines extra diferentes por cada uno además de una pequeña galería con ocho fotografías de saltos especiales que van descubriéndose al avanzar en el juego. Pero estos no han sido suficientes alicientes para que este Tony Hawk's Pro Skater 2 tuviese más diversidad y posibilidades de juego.
Los escenarios tienen un scroll lateral en algunos casos, y en otros la vista es aérea: podremos movernos en todas direcciones. En el modo carrera tendremos dos escasos minutos para completar cualquiera de los cinco objetivos y podremos intentarlo cuantas veces queramos, pudiendo salvar la partida en cualquier momento mediante un password, e incluso podremos imprimir con la impresora de Game Boy la ficha con la foto del personaje y el password. El modo libre nos ayudará a entrenarnos en los mismos escenarios pero esta vez sin límite de tiempo.
g r á f i c o s
A pesar de que los únicos elemento de la pista que están en movimiento son el patinador y los items, no son en absoluto sosos ya que están decorados con diversos elementos propios de cada ambiente, como coches, helicópteros, rampas más y menos grandes, bancos, árboles, escaleras...
Los movimientos del personaje están muy bien representados, tanto las caídas, saltos o piruetas diversas propias de un "skater" así como los movimientos menos espectaculares, como al maniobrar con el monopatín. Las pantallas de menús están muy bien diseñadas mostrando un aspecto muy atractivo.
Por lo demás, el nivel gráfico es en general bueno.
m ú s i c a
Llama muy poco la atención. Son melodías muy normalitas que pueden pasar desapercibidas. Hay un tema distinto para cada nivel que va acorde con la ambientación, pero tampoco es como para tirar cohetes. Han cumplido con la cantidad pero no con la calidad de las músicas, así que este aspecto del juego se queda totalmente en un segundo plano.
s o n i d o f x
Muy escasos. Aparecen fundamentalmente en las pantallas de menús y poco más. Son meramente funcionales y no destacan en absoluto. Durante el desarrollo del juego sólo escucharemos cosas como las caídas, derrapes sobre objetos y al coger los ítems. Muy pobre en este sentido.
j u g a b i l i d a d
El manejo es sencillísmo: el patinador avanza solo y nosotros podremos frenarle con el botón B y saltar con el A. Las piruetas y acrobacias salen casi solas (las más básicas), y las cuestas empinadas las podremos subir como si nada. La dificultad en el control viene cuando tengamos que controlar otras situaciones, por ejemplo, cuando llevemos cierta velocidad siendo difícil frenar rápidamente o dar la vuelta, controlar la dirección en el aire, conseguir saltos más altos para llegar a determinados ítems, subirnos en determinados lugares o hacer movimientos especiales para ganar más puntos. La dificultad está ajustada de forma que iremos progresando poco a poco y el juego nos durará lo suficiente. Además, según vayamos descubriendo los nuevos escenarios, se hará más variado el juego.
c o n c l u s i ó n
Es un juego con una estructura muy básica: avanzar consiguiendo una serie de objetivos para alcanzar nuevas pistas y monopatines. No hay lugar para modos de juego más diversos o posibilidades estratégicas de utilizar ítems o enfrentarnos a otros patinadores, por poner algunos ejemplos. Se queda muy corto en este sentido, una pena. Sin embargo, no hay que poner en duda el esfuerzo que han realizado para alcanzar una jugabilidad enganchante y la variedad de ambientes que nos podemos encontrar dentro de los distintos escenarios, así como una dificultad bien ajustada, que obliga a intentarlo una y otra vez poniendo a poner a flor de piel nuestro instinto de superación. Merece la pena si te gustan mucho los deportes y si quieres recrearte imitando a los profesionales del skateboard de una manera que es, la verdad, muy poco realista. Recomendado para amantes del skate y para los que quieran probar juegos deportivos diferentes, aunque no sean demasiado buenos. Hubiera sido un juego muy recomendable si fuera más completo.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.