Swords & Soldiers
- PlataformaWii8.5
- GéneroEstrategia
- DesarrolladorRonimo Games
- Lanzamiento22/05/2009
Festín estratégico
Espadas y soldados. Tres facciones para afrontar una guerra por todo lo alto con un solo objetivo; demostrar cuál de ellas es la que mejor sabe organizar una fiesta gastronómica. No es cuestión de menospreciar a estos soldados que se dejan la piel a tiras por demostrar que sus técnicas bélicas son las mejores, como tampoco este título de Wii Ware que llega avalado por Nintendo con el gusto de convertirse en uno de los más destacados del catálogo de la tienda virtual. Horas de diversión por un precio ridículamente barato, es difícil decirle que no a la obra de Ronimo.
Hay que tener ojo para saber diferenciar los productos notables de los sobresalientes. Algo nos decía en Frankfurt, cuando tuvo lugar la exposición del catálogo de la tienda virtual de NDS / Wii Ware, que Swords and Soldiers estaba predestinado a convertirse en uno de los grandes del catálogo de este servicio, que en los últimos meses apenas ha sido capaz de presentar propuestas a la altura de lo que se esperaba de él en un principio. Si bien es cierto que la tendencia general es la de pensar que la tienda Ware' está en plena etapa de madurez, hay múltiples motivos para considerar que los mejores exponentes del servicio ya han visto la luz, producciones muy destacadas en la línea de World of Goo o Lost Winds que ni cortos ni perezosos han logrado aupar el servicio hasta lo más alto que se conoce a día de hoy.
No obstante nunca es fácil saber exactamente con qué clase de videojuego se va a encontrar el jugador cuando decide invertir su dinero en un título apenas conocido, que tampoco cuenta con el apoyo mediático, por no hablar del generalista. Desgraciadamente esta situación se viene repitiendo a lo largo de los años con multitud de producciones que han aparecido en formato físico sin saber exactamente cómo publicitarse, acabando así olvidadas por el paso del tiempo. Los esfuerzos de Ronimo, una curiosa empresa con un puñado de artistas (que así se consideran a sí mismos, ya que todos proceden de las artes técnicas) que decidió bautizarse con uno de los nombres más curiosos que se recuerdan en la industria: Robotic Ninja Monkeys.
Durante nuestra visita a Alemania tuvimos la oportunidad de charlar largo y tendido son uno de los productores del título, si es que se puede considerar tal, quien muy alegremente presentó su obra explicando todos y cada uno de los puntos que debían llamar nuestra atención. De hecho fue él quien explicó que en el equipo de programación sólo encontramos a un desarrollador, mientras que el resto se ocupa de tareas meramente artísticas, como bien comentábamos en el párrafo anterior. No es de extrañar por lo tanto que Swords and Soldiers destaque principalmente por su estilo visual, bastante poco frecuente en la actualidad, claramente influenciado por obras del calibre de Castle Crashers, como el propio holandés tuvo ocasión de hacernos entender en su día, varios meses atrás en el tiempo. Nuestras primeras impresiones quedaron plasmadas en el siguiente artículo. Ahora es momento de conocer si realmente acertamos en aquel vaticinio.
La diferencia respecto al título de Vanillaware radica precisamente en la colocación de las susodichas unidades, ya que aquí toda la acción transcurre a la altura del suelo, sin plataformas ni unidades voladoras que ofrezcan más posibilidades al factor estratégico. Nada más lejos de la realidad, aquí lo más importante es ser veloz a la hora de jugar con los materiales que obtenemos al principio de cada nivel. La aventura comienza tras una breve presentación donde podemos apreciar por primera vez la calidad gráfica, estilizada de forma tremendamente llamativa, para poco más tarde presenciar un brevísimo tutorial donde se explica grosso modo las posibilidades de combate con las que contamos durante la partida. Es prácticamente inevitable posar la vista sobre las unidades que manejamos, ya que, como bien comentábamos anteriormente, la mecánica de juego no es precisamente la más compleja que hayamos conocido.
De hecho podríamos decir todo lo contrario. Si en algo ha acertado Ronimo es en hacer las cosas fáciles pese a ofrecer un buen número de posibilidades a los jugadores más experimentados, que encontrarán en este título un buen foco de entrenamiento para matar el estrés que haya causado un título de mayor envergadura. Así pues nuestro objetivo es cosechar oro a medida que aumenta nuestro poder mágico, el maná, siempre con un ojo puesto en los inventos que automáticamente va produciendo nuestra sociedad. Cada una de las tres facciones -vikingos, aztecas y chinos- tiene sus propias habilidades, atributos específicos que les ayuda a ganar oro a mayor velocidad en detrimento de la potencia en los combates físicos, los más comunes durante las escaramuzas.
Nuestra primera preocupación ha de ser entrenar unas cuentas unidades para que se pongan manos a la obra en cuanto a la recolección de oro. Una vez contamos con un mínimo de solvencia económica invertimos en la primera mejora evolutiva, dentro de un recuadro que a poco de comenzar la aventura se convierte en un compañero indispensable durante la aventura. Desde aquí controlamos los atributos que queremos potenciar, así como las habilidades mágicas que más nos convienen en cada ocasión. Es esencial, por poner un ejemplo, potenciar la regeneración de maná en vista a poder curar a nuestras unidades cuando estén batallando, especialmente cuando contamos con soldados rasos, apenas lo suficientemente poderosos para enfrentarse por sí solos a un ejército al completo.
La historia avanza proponiendo al jugador distintos estilos de juego. No sólo debemos tener en cuenta los recursos, ya que en otras misiones comenzamos con un número determinado de soldados, con un puñado de monedas de debemos invertir de la forma que mejor convenga en cada ocasión con el fin de terminar la misión con la mejor puntuación posible. Nuestro equipo siempre se encuentra a la izquierda de la pantalla, el enemigo a la derecha. Con la cruceta direccional podemos mover la pantalla a nuestro antojo, aunque siempre debemos estar pendientes a la zona donde transcurre la acción. Las envestidas enemigas son muy frecuentes, pese a que la dificultad en general de la aventura (en cualquiera de las tres facciones, dos de ellas hemos de desbloquearlas) no es precisamente muy elevada.
La variedad de posibilidades con la que contamos en esta modalidad es exactamente la misma que en la campaña en solitario, siendo necesario evolucionar los hechizos, unidades y demás de cara a conseguir mejores soldados, mayor resistencia ante los ataques enemigos, ataques mágicos más poderosos, etcétera. De vez en cuando es posible también escoger entre dos caminos, principalmente cuando contamos con un número limitado de soldados -y de dinero- a nuestro cargo, momento en el que tendremos que decidir si tirar por la vía fácil, sin recompensa alguna, o por la más exigente, llenándonos los bolsillos con más dinero / maná, según se tercie la ocasión. La variedad de retos solo viene a confirmar todo lo que abarca Swords and Soldiers desde su perspectiva RTS, que comienza lentamente para ir cobrando fuerza a medida que completamos las misiones.
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.