Star Wars 1313, Impresiones Gamescom

Star Wars 1313 ha vuelto a hacer acto de presencia en una feria internacional y tras mostrarse a puerta cerrada en el E3 2012, de forma reducida, llega ahora al resto de los medios para demostrar que su hechizo no fue azaroso. Si bien el material jugable que se ha visto es el mismo que en la feria californiana, sobre el cual ya os hablamos el pasado junio, durante la nueva cita ha habido posibilidad de profundizar en el proceso creativo del videojuego que LucasArts define como la "primera experiencia madura de Star Wars en el sector"

Como sabréis, 1313 es el nombre de la localización en la que tiene lugar el juego, una megápolis subterránea poblada por lo peor de la galaxia, "ese lugar en el que no querrías perderte por la noche", citando al manager general del estudio. Situado en Coruscant, no existen los Jedi ni la Fuerza, todo se basa en el ingenio, la posibilidad de pisar a los demás. Los criminales lideran los negocios, los débiles caen y los fuertes sobreviven. En este entorno hostil sobreviven los cazarecompensas o bounty hunters, cuyo representante más famoso en la franquicia cinematográfica es Boba Fett. Y nosotros asumimos el control de uno de ellos, que trabaja junto a su compañero en una nave recuperando cargas -o robándolas- para luego venderlas al mejor postor. Hay que sobrevivir.



Quizá lo más interesante de este concepto no sea sólo el reinventar un microuniverso dentro del mapa de nombres y galaxias que han derivado de los sueños de George Lucas, si no que su propia base en un mundo azotado -ahora mismo- por la crisis casi se torna como una especie de premonición, utópica en nuestra sociedad, pero que sirve como ejemplificación de cómo podrían llegar las cosas a ser llevadas al extremo. Antes de la demo del juego se nos mostraron infinidad de concept arts con algunas de las localizaciones de la ciudad, adaptaciones de lugares comunes en 'ciudades del pecado', como una suerte de prostíbulo integrado en un casino, gente jugando a las cartas, apostando dinero. También callejones oscuros con matones esperando a sus víctimas.

1313 será un lugar rico en personajes, razas y creencias. En los mismos concept arts se mostraron varios tipos de extraterrestres, algunos creados para la ocasión, de formas y colores hasta ahora inexplorados manteniendo en su mayor parte la forma humanoide (bípedos, con proporciones humanas) pero a la vez con señas distintivas, como cabezas terminadas en punta o cuernos. Durante la demo del E3 -y la vista ayer en Colonia- podemos observar al menos a dos humanos (los protagonistas), droides programados para robar, una criatura de forma indefinida pero claramente salvaje, etcétera. Con la mecánica de juego aún por definir, pues sabemos que será un título de acción y aventura pero desconocemos su amplitud en términos de si será lineal, mundo abierto, etc., sólo queda celebrar la variedad que demuestran estos concepts para dotar de personalidad a la localización al tiempo que la oxigenan con elementos que van más allá de lo evidente, viviendo más allá de su referente materno.



Lucas Arts, Lucas Films e incluso Industrial Light & Magic están tras el desarrollo de uno de los juegos que probablemente veremos ya en la próxima generación. Lo que se nos mostró corría en un PC híper-vitaminado con los últimos modelos de nVidia, y difícilmente podría moverse en una PlayStation 3/Xbox 360 sin un downgrade gráfico. Considerando que la versión mostrada es una pre-alpha y que sus imágenes por segundo eran algo inestables (30fps de forma nativa, algo menos en momentos de muchos efectos simultáneos) es difícil pensar cómo podría hacerse más fluido sin sacrificar algo a cambio: definición. En el E3 ya nos dejó boquiabiertos y esto no cambia, especialmente visto en una televisión gigantesca, a alta resolución.

Los modelados de Star Wars 1313 están vivos, tanto es así que la forma de darles vida consiste en coger a unos actores, ponerles varios puntos de mocap y permitirles respirar, interpretar. Lo que vemos dentro de la pantalla es su representación visual, no hiper-realista, pero si muy cercana a los modelos: gestos, movimiento de ojos, forma de caminar, entonación... el concepto pasa por filmar una película que termina siendo videojuego. Esto en las secuencias de vídeo, porque una vez que se llega al juego la cosa cambia. No a nivel técnico, pues la transición de vídeo a jugabilidad real es suave, asombrosa, si no a la propia mecánica, que coge un poco de aquí a allá para crear una mezcla que, quizá por falta de información, no sorprende, pero que tampoco desagrada.



En el segmento jugable comentado tenemos acción en tercera persona, movimiento por una nave en llamas, posibilidad de acabar con enemigos usando varios tipos de pistola (con balas, ondas de expansión, etc.), también segmentos de plataformas con agarres en salientes, recordando un poco a Uncharted. Pero aún sin haberse mostrado como algo rompedor a nivel jugable llama la atención como ejercicio tecnológico, un primer paso hacia lo que podríamos esperar de la próxima generación en términos de movimiento, detalle, animaciones y captura de personajes. Lo que hemos visto nos ha gustado, pero tampoco hemos visto mucho más que en junio. Así que teniendo en cuenta que el juego no llegará como pronto hasta bien entrado 2013, habrá que esperar.