SpikeOut: Battle Street
¿Echas de menos Final Fight? ¿Streets of Rage es tu saga preferida? ¿Ni te acuerdas del dineral que te gastaste en King of Dragons? Sin problemas. Recupera el tiempo perdido con SpikeOut y reparte leches en 3 dimensiones como pensabas que nunca volverías a dar...
¿Echas de menos Final Fight? ¿Streets of Rage es tu saga preferida? ¿Ni te acuerdas del dineral que te gastaste en King of Dragons? Sin problemas. Recupera el tiempo perdido con SpikeOut y reparte leches en 3 dimensiones como pensabas que nunca volverías a dar...
Quizá los beat'em'ups sean los juegos que peor se han adaptado a las 3 dimensiones. Hasta Mario lució como -casi- nunca en Super Mario 64, pero a día de hoy no hemos podido hincarle el diente a un juego que recogiera el espíritu, sabor y, sobre todo, maneras jugables de los grandes clásicos del género. Los títulos protagonizados por Cody, Haggar, Guy, Axel o Blaze han caído en saco roto en esta generación, y los que han intentado ofrecer una experiencia similar, como los Baldur's Gate de consolas, no han conseguido encapsular el regusto arcade del que estaban dotados Final Fight y compañía.
Románticos, abstenerse
Quizá el problema es que las compañías, en la vorágine en la que se hayan sumidas, prefieren desarrollar títulos de una complejidad más elevada que los Golden-Axe-Style. Las mayores posibilidades de las consolas actuales hace que los desarrolladores de juegos se sientan obligados a crear fórmulas en las que eso de pegar puñetazos y patadas como que no es lo suficientemente inmersivo, virtual o cualquiera que sea el adjetivo que más suene la conferencia de desarrolladoras de turno.
Y es que las apuestas retro estilo Ikaruga no son precisamente las más populares en el listado de lanzamientos de las consolas de este milenio, más bien constituyen la anécdota alternativa que algunos ven como el punto glam de un sector cada vez más orientado a los beneficios. Pero hay compañías que llevan en ésto demasiados años como para limitarse a seguir el camino emprendido por la mayoría. Para bien o para mal.
Cuna de éxitos
Nacido en las recreativas hace ya unos cuantos meses, cuando aparecieron las primeras informaciones sobre Spikeout, no fueron pocos los que lo vieron como el Streets of Rage de la nueva generación. Una de las series más exitosas de la compañía nipona Sega en Megadrive que reaparecía en el sector del que nunca había perdido el liderato. Tenía sentido.
Presentado en muebles de hasta 4 pantallas, SpikeOut permitía en los salones recreativos el juego local - en algunos casos hasta por Internet - de hasta un cuarteto de jugadores. Una experiencia muy gratificante que posibilitaba los combos entre varios personajes a un único enemigo y un mayor espacio visual - nada de Splits Screens ni medias tintas: una experiencia arcade como mandan los cánones. A pesar de que lleva ya bastante tiempo pululando por los salones recreativos de todo el mundo, e incluso ha acabado cediendo su puesto a otras recreativas más "jóvenes", la conversión de SpikeOut se perfila ahora en el horizonte la conversión a Xbox del arcade de Sega. Y nosotros, tan contentos...
Training Day
El argumento es, como tantas otras veces en los juegos de lucha, una mera anécdota. Dos bandas rivales, Team Spike y Team Inferno, enfrentadas por la supremacía en una gigantesca urbe en la que la violencia y las batallas callejeras dictan las leyes. Las rencillas entre ambos gangs se han prolongado durante años, pero es ahora cuando las cosas se están volviendo realmente feas en las calles.
No hay que ser un genio para saber de qué va todo el asunto: elegir a un integrante de una de las dos bandas y no parar de presionar los botones del mando hasta que no quede un enemigo en la pantalla. ¿Demasiado trivial? Bueno, de eso se trata. Es parte de la gracia del asunto... Hay que decir que uno de los aspectos más sorprendentes de este beat'em'up, y punto diferenciador con los juegos del género de generaciones pasadas, es la extensa plantilla de personajes que está disponible para seleccionar a vuestro guerrero urbano. Además, una vez elegido, podréis dotarle del aspecto que más os guste gracias a la posibilidad de cambiarle la ropa, el peinado e incluso el colocarles diferentes tatuajes en el cuerpo. Suponemos que, a medida que vayáis avanzando en la aventura, más y más ítems se desbloquearán para que podáis continuar personalizando el look de vuestro héroe preferido, pero es sólo un pensamiento...
Mamporros en 3D
El control, uno de los pilares en los que se sustenta el género, permitirá, según la misma Sega, que tanto los jugadores menos curtidos como los expertos del pad se sentirán como en casa, ofreciendo facilidad de uso para realizar las técnicas más básicas a la vez que exigiendo cierto nivel para ejecutar los combos y movimientos más devastadores. ¿Alguien dijo Virtua Fighter?
Olvidaos de las dos dimensiones. Si quedaba alguna duda de que éstas estaban destinadas a apropiarse de todos los géneros de los videojuegos - Tetris Worlds y Fatal Fury Wild Ambition así lo demuestran -, con SpikeOut Sega reivindica un género que ya parecía condenado a sucedáneos del estilo The Punisher, recuperando los elementos que lo convirtieron en uno de los más grandes de la década de los 90 y colocándolos en un apartado técnico de última generación.
Así, lo que más llama la atención es el gran tamaño de los personajes y las animaciones de las que han sido dotados. Un trabajo que recuerda en acabados - salvando las diferencias - al realizado por la propia Sega en la incursión de la franquicia La Jungla de Cristal en su última consola hasta el momento: Dreamcast. La posibilidad de recoger ítems, aunque en menor medida que en Die Hard, también estará presente en SpikeOut. Hay que decir también que los escenarios son muy amplios y están dotados de un gran colorido. Los jugadores tendrán, gracias al espacioso diseño, un gran margen de maniobra de cara a moverse por ellos, lo que siempre es de agradecer.
Xbox Live powered
En un género en el que el principal aliciente era el poder jugar a dos bandas, la entrada en escena del servicio online de Microsoft abre un abanico de posibilidades diferentes al Hot Seat o juego multijugador local de toda la vida. Hasta 4 personas podrán participar activamente en la misma partida a través de Internet, como ya se vio en la máquina original, aprovechando además las ventajas del Live, como la comunicación por voz. Pero surge una duda: no se ha confirmado si los jugadores que participen en la acción de forma local lo harán mediante la socorrida Split Screen o si, simplemente y como parece casi confirmado, Sega ha preferido cortar por lo sano y no permitir juego multijugador en una misma máquina. Sería una lástima...
Gracias al Live también se implementará un ránking virtual en el que los mejores jugadores pelearán, nunca mejor dicho, por alcanzar las primeras posiciones en él. Un aliciente quea aquellos que busquen una mayor profundidad en su experiencia a los mandos de SpikeOut sabrán valorar como toca.
A finales de este mismo mes de marzo saldrá a la venta en Japón y en los USA. Su lanzamiento en el mercado PAL, por desgracia, aún se hará esperar como mínimo un par de meses. Cosas del márketing internacional, porque las diferencias entre la versión NTSC americana y la PAL, localización aparte - si es que se lleva a cabo -, tendrían que ser inexistentes. Pero bueno, así va el mercado...
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