Nos encontramos ante un crossover, al más puro estilo NeoGeo Battle Coliseum ya que en él se cruzan juegos de una misma compañía. Eso sí, los personajes que se verán las caras en Spectral vs. Generation provienen de dos sagas que nada tienen que ver con el género de las tortas. La primera de ellas, Spectral Souls, cuenta con dos entregas en PS2 y una en PSP (conversión de la segunda parte de PS2). La segunda, Generation of Chaos, es mucho más prolífica, ya que cuenta con cinco entregas en PS2, una en PSP (conversión de la cuarta parte de PS2) e incluso una futura versión destinada a la nueva PS3. Ambas series pertenecen al género RPG estratégico, al más puro estilo Final Fantasy Tactics, y no han llegado a salir de Japón a excepción de las versiones PSP, las cuales vieron la luz en el mercado estadounidense a lo largo del pasado año. Los creadores tanto de las dos series anteriormente mencionadas como del juego que las une y las traslada a un nuevo género responden al nombre de Idea Factory, grupo programador cuyos miembros poseen un extenso currículum en el mundo del videojuego. Algunos de sus integrantes pertenecieron en el pasado a las ya extintas Matrix (desarrolladora que saltó a la fama al crear esa pequeña joya del RPG de acción bidimensional que es el Alundra de PS1) y Ancient (desarrolladores de otro gran RPG de acción 2D, The Story of Thor, juego de Megadrive que posteriormente disfrutó de una secuela destinada a la malograda SegaSaturn). Puede que con Spectral vs. Generation Idea Factory entre en un género poco habitual para ellos. Pero el juego posee una calidad que le permite codearse con vacas sagradas de la lucha bidimensional como las sagas Guilty Gear o The Last Blade. Además de ser recibido con agrado en PS2, ya que los poseedores de la veterana consola de Sony llevábamos demasiado tiempo sobreviviendo a base de refritos de Guilty Gear X2, ports de viejas glorias de Capcom y títulos provenientes de SNK repletos de personajes recurrentes y desgastados, Spectral vs. Generation cuenta con un valor añadido en su versión PSP, ya que la portátil de Sony adolece de una notable escasez en juegos de este género.DE TURNOS PAUSADOS A GOLPES DESCONTROLADOS El principal talón de Aquiles de este Spectral vs. Generation reside sin ninguna duda en su plantel de personajes. Sólo existen diez, a los que se les unen las versiones potenciadas de tres de ellos, subiendo el número total a trece luchadores. Dos de estas versiones potenciadas pueden llegar a ser controladas por el usuario (la tercera hace las veces de jefe final), con lo que finalmente nos queda una plantilla de doce personajes jugables. Sin duda es poco para los tiempos que corren, pero al menos todos los luchadores han sido excelentemente trabajados en cuanto a su variedad de estilos y el notable catálogo de golpes, combos y magias que poseen. Los primeros títulos que nos vienen a la mente nada mas ver imágenes o vídeos del juego son sin duda The Last Blade y Guilty Gear, auténticas leyendas de la lucha bidimensional y pilares básicos sobre los que se ha construido Spectral vs. Generation. Casi todos los luchadores del juego combaten empleando diversas armas, al igual que los personajes de las dos sagas anteriormente mencionadas. Para ejecutar los ataques usaremos cuatro botones, tres de ellos destinados a golpes débiles, medios y fuertes con el arma y un cuarto reservado a las patadas. Las magias, ataques especiales y un último y apocalíptico ataque final por personaje estarán a la orden del día durante las refriegas, cubriendo la pantalla con un fenomenal espectáculo de ondas de energía, columnas de fuego, feroces tornados, mortales efigies espirituales, etc. El catálogo de ataques normales a disposición de los luchadores también es digno de mención, ya que incluso podremos ejecutar combinaciones encadenadas en las que se turnarán los golpes estándar con las magias, todo con el objetivo de mermar la barra de salud del rival de la manera más efectiva posible. En cuanto a las técnicas especiales, contaremos con la posibilidad de ejecutar un salto alto moviendo el stick de abajo hacia arriba en un movimiento fluido (justo como en la saga KOF), cancelar los movimientos de agarre del rival pulsando un determinado botón en el momento indicado, romper el combo de nuestro adversario, ralentizar brevemente el tiempo para recuperar fuerzas (esto consume una parte de la barra de energía destinada a los ataques especiales, obviamente), realizar un combo automático al pulsar simultáneamente los botones de ataque medio y fuerte
La técnica más poderosa a nuestra disposición será la denominada Fierce Flaming Awakening. Sólo se podrá activar cuando nuestro nivel de salud se encuentre bajo mínimos, y nos otorgará tres poderosas ventajas durante un tiempo limitado: aumento en el nivel de ataque, defensa potenciada, y barra de energía infinita que nos permitirá ejecutar cuantos ataques especiales queramos. Con un buen uso de esta mortífera técnica, lo tendremos todo a nuestro favor para dar la vuelta a un combate que ya parecía perdido. En los gráficos se nos dará una de cal y otra de arena. Por una parte los personajes gozarán de abundantes frames de animación para cada uno de sus movimientos, haciéndolos suaves y fluidos. Por otro lado, el colorido de luchadores, magias y escenarios (estos últimos, bidimensionales como el resto del juego, ascienden a un total de 11) es sobresaliente. Como puntos flacos del apartado gráfico encontramos la carencia de trasparencias para representar las magias y la baja resolución con la que aparecen tanto personajes como escenarios. Esto último al menos será mucho menos perceptible si nos hacemos con la versión PSP del juego, pero escuece comprobar que hasta la fecha sigue siendo únicamente Arc System Works (Guilty Gear, El Puño de la Estrella del Norte) la desarrolladora que lanza sus títulos de lucha bidimensional a una resolución más acorde a los tiempos que corren. El número de modos de juego y opciones será el característico de esta clase de títulos: Arcade, Versus, Survival y Training para los modos de juego y la posibilidad de seleccionar nivel de dificultad (4 distintos), límite de tiempo para cada asalto (desde 45 segundos hasta tiempo infinito), número de asaltos (1, 3, o 5) y porcentaje de daño causado por los ataques.PRIMERA IMPRESIÓN Nos encontramos ante un juego que desde luego no sentará cátedra en el género ni se convertirá en uno de sus principales valedores. Sin embargo, calidad para agradar a los aficionados a la lucha versus no le falta. Además, hay que tener en cuenta que los títulos de lucha bidimensional lanzados al mercado son cada vez más escasos (sobre todo en PSP, donde únicamente contamos con los ports de Darkstalkers y Street Fighter Alpha 3), por lo que este Spectral vs. Generation adquiere un valor añadido de cara a los devotos del género. En lo referente al sistema de control, parece estar confirmado que en PS2 sólo se podrá usar la cruceta digital para controlar a los luchadores. De todas maneras, si estás leyendo esto será porque seguramente te agrada el género, y si es así sin duda contarás con un arcade stick (por desgracia esta clase de periférico es enormemente difícil de conseguir, así que si posees uno guárdalo como oro en paño) para disfrutar con plenitud de esta clase de juegos. Es de esperar que la versión PSP sí cuente con la posibilidad de controlar a los personajes con el stick analógico, ya que jugar a Spectral vs. Generation usando únicamente la cruceta digital de esta consola daría como resultado un título prácticamente injugable debido a los giros que hay que efectuar para ejecutar las magias de los personajes, giros casi imposibles de conseguir con una cruceta de diseño tan erróneo como la de PSP, en la que pulsar una simple diagonal ya es toda una odisea. Aún quedan muchos aspectos de Spectral vs. Generation por reseñar, como la jugabilidad, la calidad de su música o la fluidez de los combates. Pero todo esto y algunas cosas más quedan reservadas para el análisis. De momento apuntaos las fechas de salida de las dos versiones de Spectral vs. Generation: 4 de mayo en PSP y 25 del mismo mes en PS2. Dado que es Midas, y no Ignition, su distribuidora en el viejo continente, esperamos que el título no sufra retrasos y sea lanzado en las fechas anunciadas. El mes que viene tenemos una cita con un prometedor título de lucha bidimensional, buen aperitivo sin duda mientras aguardamos la llegada del apoteósico El Puño de la Estrella del Norte, la nueva vaca sagrada en el género de las tortas a golpe de píxel.