Bienvenidos a la jungla

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Roller Coaster Tycoon es una saga actualmente bastante conocida que se ha convertido en uno de los máximos exponentes en el género. La popularidad la ha obtenido por su propio peso ya que Atari y Frontier han sabido poner en su sitio todos los elementos que forman un parque de atracciones dándole al jugador un gran abanico de posibilidades. Cada nuevo capítulo o expansión ha renovado lo visto con anterioridad. ¡Salvajes! es la segunda expansión que recibe este tercer capítulo en poco más de un año y hay que dejar clara una cosa: Mientras sigan en esta línea, que saquen las que quieran.

Visualmente, esta expansión aporta una mejora cualitativa. Los efectos principales que ejecuta el motor gráfico del juego ya habían sido implantados en su gran mayoría con la expansión anterior. Ahora, ¡Salvajes! aporta una notable mejora en cuanto a lo que el desarrollo de nuestros escenarios se refiere.

Esto se debe a que con la nueva expansión tienes la posibilidad de convertir tu parque de atracciones en todo tipo de entornos naturales. Trabajando con las diferentes texturas que ya existían y con las nuevas que instalará la expansión crearás múltiples terrenos de lo más diversos. Para ello, usarás las herramientas de construcción que el juego pone a tu disposición. Con ellas podrás cavar hoyos en el suelo, situar zonas elevadas que formen montañas o crear la cuenca de un río.

Gracias a esto, nuestro parque estará formado por terrenos ambientados en todo tipo de lugares y épocas. Desde la prehistoria hasta la actualidad. Cualquier motivo, terreno, atracción etc. está presente en RCT3. De este modo podremos crear parques ambientado en un estilo de lo más futurista, zonas de recreo que nada tienen que envidiar a la morada del mismísimo Conde Drácula, pirámides egipcias, rescatar los restos de las civilizaciones clásicas etc.

La peculiaridad de esta expansión es que incluye los elementos necesarios para generar parques ambientados en zonas naturales. Sin tener en cuenta a los animales, que más que una parte del terreno son atracciones, las posibilidades que da el título no son pocas. Ponte manos a la obra y crea un ecosistema de lo más simpático combinando todo tipo de elementos. De este modo, tu parque albergará zonas de selva, bosques, montañas, ríos, lagos etc. Y si nos ponemos más serios y nos lo curramos un poco más, podrás crear hasta tu propio parque jurásico. Eso sí, asegúrate de tomar las medidas de seguridad necesarias para evitar sorpresas.

La lista de texturas para elegir es bastante amplia, variedad que es de agradecer al dar más diversidad a los lugares. Uno de los aspectos más importantes es el hecho de que podamos trabajar con cualquier tipo de terreno en nuestro parque. Esto quiere decir que el jugador tendrá total libertad a la hora de recrear diferentes entornos porque como su propio nombre indica, ¿qué es un parque temático sin representar diversos ambientes o épocas?

El motor gráfico del título ofrece una experiencia visual que gana muchos enteros gracias a algunos efectos. Destacar el agua, que nada tiene que envidiar a la de otros grandes títulos recién salidos para PC. Además, el sistema de reflejos que se proyecta sobre el líquido elemento es sobresaliente. Es toda una gozada ver cómo se reflejan las atracciones en el lago o el río que hemos hecho justo a su lado, ver las caras de los visitantes que miran al agua desde un puente, etc.

Por otra parte, la iluminación también está muy conseguida. Cada atracción que realicemos tendrá una fuente de luz propia. También podemos colocar todo tipo de lámparas, farolas, luces y antorchas para que acompañen el caminar de los visitantes durante la noche, momento del día en el que nuestro parque ganará una belleza visual muy especial.

Pero, ¿qué es un parque sin visitantes? En este caso, los modelos de los visitantes son simplones pero muy resultones. Hay una buena variedad de personas. Cada individuo lleva una ropa determinada lo que le da variedad al asunto. Hay todo tipo de vestimentas. Incluso algunos de los visitantes llevarán camisetas con el símbolo de ATI y Atari; ¡qué simpáticos son estos desarrolladores!. Resaltan por sí mismas las animaciones de los visitantes: ver la cara de un chico al que la atracción le está causando de todo menos diversión no tiene precio.

La idea principal es construir y gestionar todo un parque de atracciones. El problema está en que tenemos que controlar los gastos necesarios para ello. Todo lo que coloquemos en nuestro parque valdrá sus euros. Cada atracción tendrá un coste adicional de mantenimiento que debemos ir cubriendo con el paso del tiempo. Para conseguir fondos, podemos, además de por supuesto cobrar la entrada al parque, colocar todo tipo de tiendas en zonas estratégicas. No hay nada mejor para cazar unos cuantos euros que colocar unas cuantas tiendas de merchandising cerca de las atracciones o en la salida de nuestro parque.

Pero también es importante que nuestros visitantes tengan comida y bebida a su disposición. Como bien se dice en estos casos: el cliente es lo primero por lo que plantar pizzerías, hamburgueserías, tiendas de perritos, refrescos, zumos, batidos, cócteles etc. será un aspecto a tener en cuenta. Ni que decir tiene lo útil que pueden llegar a ser los cajeros automáticos cerca de los establecimientos. ¡Qué el afán consumista no se frene por nada!

Para asegurar la diversión, tendrás que ir creando todas las atracciones que te parezcan. Hay dos opciones: con las diferentes herramientas vas generando las montañas rusas a tu antojo seleccionando la dirección y la altura que deben tomar los railes o utilizas las atracciones prefabricadas que el juego pone a tu disposición. Hagas lo que hagas, cada atracción irá dirigida a un público determinado, es decir, habrá atracciones de corte infantil, arriesgadas, rápidas... Al igual que ocurrió con el título original, siempre podrás utilizar la cámara para montarte en tus propias atracciones y ver la cara del público.

Hasta aquí nada nuevo que no hayamos visto en las entregas anteriores. Pero no te preocupes, porque las novedades de la expansión van a hacer de tu RCT3 un juego diferente.

En primer lugar, las atracciones ganan el toque salvaje. Aparecen nuevas atracciones con temática animal en las que el visitante se sentirá en su estado natural. Además de las atracciones normales, en las que el visitante se montará y se dará un simpático paseíto siguiendo la dirección de los raíles, podrás a tu disposición observatorios de animales.

Y es que en este punto está la gracia de esta expansión. Con la herramienta de construcción, elige el tipo de corral que quieres y colócalo en el terreno. Asegúrate de que la extensión es la correcta y de que has creado el hábitat necesario para que los animales estén agusto. La vegetación es muy importante y por ello RCT3: ¡Salvajes! cuenta con un inmenso listado de elementos naturales para tu elección.

En función de los animales que vayas a exponer al público, tendrás que crear un hábitat u otro. Después de esto, es necesario que te hagas con una guarida para los animalitos, lugar donde pasarán la noche y donde se mantendrán en forma tomando suculentos manjares. Al construir la guarida, aparecerá un empleado que se dedicará sólo y exclusivamente al cuidado de los animales que estén allí presentes. Dependiendo del número de animales que tengas en la jaula, será necesario que contrates un número determinado de cuidadores.

Por otra parte, tienes que tener especial cuidado a la hora de crear el recinto que albergará a tus animales. Es necesario que uses las vallas específicas para cada raza, ya que si no te podrías llevar alguna sorpresilla. Y es que si no pones, por ejemplo, vayas electrificadas a los leones, terminarán rompiendo la barrera de seguridad y acabarán traspasando la frontera que hay entre su reino y el de tus tranquilos visitantes.

Así, verás como sin comerlo ni beberlo la gente corre despavorida hacia todas partes perseguidas por el rinoceronte Manolo que salió a dar un paseíto por el recinto. Pero siempre hay una solución para estas situaciones extremas. Para ello, cuando un animal se escape bastará con que lo selecciones para que aparezca la opción para cazarlo. En vista de primera persona y con un rifle francotirador cargado de dardos sedantes, tendrás que acertar desde un helicóptero al espécimen, sedándolo hasta que quede dormido y puedas devolverlo a su morada.

La variedad de animales es un punto muy a favor de la expansión. Tigres, avestruces, elefantes, leones, osos pardos, osos pandas y así podríamos seguir con un largo etcétera. El género también cuenta, por lo que comprando hembras y machos potenciarás la especie haciendo que tus criaturas tengan cachorritos que por cierto, son el reclamo perfecto para aumentar tus ingresos. Prácticamente, tienes todo lo necesario para convertir a tu parque de atracciones en el zoológico perfecto.

A todo esto hay que sumarle algunos aspectos que aunque ya estaban presentes en el juego original y en la expansión anterior no son menos importantes. En primer lugar, hay que destacar el creador de eventos para las atracciones. Como ya ocurrió con RCT3: ¡Empapados!, podemos colocar en cualquier parte de una atracción un evento determinado. De este modo, se puede hacer que un animal motorizado ataque una vagoneta al pasar por un lugar determinado de su recorrido.

También vuelve el mezclador de fuegos artificiales que tanto nos gustó en la anterior expansión. Con él podrás deleitar a tus visitantes con unos espléndidos espectáculos de pirotécnicos visualmente muy dinámicos y entretenidos. Además, podrás sintonizar los fuegos con la música que quieras, con la posibilidad de importar tus propias canciones y temas favoritos. Es una tarea que no es nada fácil pero si lo logras, estarás más que satisfecho.

La opción de importar música también está disponible para diferentes eventos en el parque. Por ejemplo, cada atracción tiene una música determinada y en cada caso puedes elegir entre el listado que trae el juego o tu música importada en formato wma.Dentro de las muchas opciones que da el juego, también está la posibilidad de importar tus propias imágenes para colocarlas como publicidad de tu parque.

Los modos de juego que encontraremos en esta expansión son quizás uno de sus puntos más flojos, ya que no se separan mucho de lo que ya hemos visto. A nuestra disposición tenemos un modo "Tutorial" que recomiendo encarecidamente jugar incluso si eres todo un experto en la materia. Después, está el modo "Carrera" en el que tendremos que ir administrando diferentes parques en cada misión. Para ello, controlarás todos los aspectos del parque y tendrás que ir mejorando la calidad de las atracciones y los servicios. A medida que vayas avanzando, aparecerán nuevas carreras.

La jugabilidad es un aspecto que queda ampliado de una manera positiva con esta expansión. Si con ¡Empapados! podías crear tu parque de atracciones al más puro estilo acuático, ¡Salvajes! pone a tu disposición un zoológico en toda regla. Y es que estas expansiones hacen que el concepto de parque temático se haga realidad con títulos como éste.

Si te gusto la tercera parte y disfrutaste en verano con la refrescante primera expansión, no debes dejar escapar está segunda entrega de RCT3.