Railworks
Railworks promete un nuevo concepto en simulación ferroviaria. Una pasión por los trenes que comparten miles de personas desde hace más años de los que podemos contar. Los chicos de Kuju entertainment tienen la experiencia suficiente en el tema como para estar confiados en su trabajo.
Railworks promete un nuevo concepto en simulación ferroviaria. Una pasión por los trenes que comparten miles de personas desde hace más años de los que podemos contar. Los chicos de Kuju entertainment tienen la experiencia suficiente en el tema como para estar confiados en su trabajo.
La famosa obra de teatro de Tennessee Williams "Un tranvía llamado deseo' nos recuerda que tanto los tranvías como trenes han estado en el imaginario popular desde que fueron creados en el siglo XIX. Mucho antes de que existieran los aviones, millones de personas hacían volar su imaginación pasando tardes enteras en las estaciones viendo partir los trenes hacia rumbos que se creían llenos de exotismo y fuente de aventuras. Hoy en día, la simulación trata de recuperar un poco de aquella magia, porque cuando nos ponemos al mando de un avión o al volante de un coche, hemos comprado un billete para recrear experiencias que nos son imposibles vivirlas en aquel momento, sea por el motivo que sea. Igual que aquella gente que veía partir los trenes desde el andén.
El mundo de la simulación está plagado de simuladores de vuelo o de cualquier tipo de carreras, pero hay ciertamente un mercado interesante donde mucha gente vive una pasión de por vida con los trenes. Desde los mayorcitos que cuando eran pequeños ya jugaban con esas maquetas que recreaban trenes de hace más de un siglo, hasta gente más joven con pasión por la velocidad de locomotoras como las shinkansen (tren bala japonés) o los más cercanos TGV y AVE. Hubo un tiempo que el mercado de simulación de trenes estuvo dominado por Microsoft con su Train Simulator desarrollado por los británicos Kuju Entertainment hace ya casi una década y que años más tarde lanzarían Rail Simulator, publicado por Electronic Arts.
Tenemos en nuestras manos la beta en español del último juego desarrollado por la gente de Kuju Entertainment, Railworks, con una serie de mejoras respecto a su anterior título y digno sucesor espiritual de aquel ya lejano Train Simulator. Hemos decidido escoger una de las ocho rutas que vienen recreadas, y darnos un tranquilo paseo por el norte de Inglaterra desde NewCastle hasta York. Aquí hablamos de una ruta de unas dos horas con recreación de cada una de las estaciones por las que pasamos y su entorno, puentes, señales, etc. pero hay rutas de todo tipo, desde la ya mencionada, a la ruta de Castle Rock en la montañosa Colorado, pasando por la Ruta minera de Hagen-Siegem en la zona del Ruhr.
Cada una de las rutas comprende también una serie de misiones que nos darán cierto juego a la hora de explorarlas y evitar un simple ir del punto A al B. Tenemos de todo tipo, como misiones de llevar una carga complicada por la ruta, o transportar a los seguidores de un equipo de futbol (con lo que ello conlleva) a tiempo para ver el partido de la Copa de Inglaterra, también supondrá un reto conducir nuestro tren por el norte de Europa sin apenas visibilidad por la niebla. Hay unas diez por ruta, así que da para bastante. Otra de las ventajas es que por internet hay una autentica legión de seguidores de Railworks , se pueden encontrar bastantes misiones creadas por ellos, y algunas son de una calidad excepcional. Por supuesto que contaremos con un editor del mundo que nos permitirá si tenemos tiempo y dedicación crear nuestras propias rutas.
Pasajeros al tren
La enorme estación de Newcastle nos da la bienvenida antes de subirnos a nuestra locomotora, una Class 55 Deltic Napier. En estas latitudes no sorprende precisamente la lluvia que está cayendo, pero parece un buen día para que nos demos un paseo hasta el casco antiguo de la bonita ciudad de York. Bueno, al menos hasta su estación. La cabina está muy bien recreada en 3D y tenemos libertad absoluta para mirar donde queramos, desde la velocidad, afuera por la ventanilla o si nos apetece al suelo, ¿por qué no? Hoy en día cualquier simulador que se precie debe dar total libertad en la cabina, y Railworks como su antecesor, no iba a ser menos. Podremos recrear la experiencia desde un nivel muy sencillo, ideal para no complicarse la vida, o un nivel experto que nos permite usar cosas como los frenos dinámicos, aumentar o disminuir el nivel de agua y vapor en los inyectores. Una muy buena experiencia para los que quieren más.
Mientras nos alejamos de los depresivos suburbios industriales y nos adentramos en la campiña Inglesa ya acercándonos a la estación de Durham, nos ponemos a examinar las diferentes vistas y el nivel gráfico del simulador. A parte de la vista en cabina, entre otras, tenemos vistas exteriores, a pie de vía, a vista de pájaro (que por momentos nos recuerda a una inmensa maqueta) y una de las más interesantes, vista de pasajero. Dicha vista recrea el vagón de pasajeros del tren que hayamos decidido escoger, cada uno con su estilo, y nos pone en la piel de un pasajero y su entorno. El viaje en tren desde esta posición, compartiendo vagón con otros pasajeros, es totalmente diferente a conducir la locomotora. Tiene cierto encanto, eso sí, no es apta para los que busquen emociones fuertes.
Hay una mejoría gráfica respecto al título anterior, pero continúan sin llegar a ser unos gráficos que destaquen, algunas texturas del exterior son algo flojas, pero en general simplemente cumplen y bien, que ya es mucho cuando se tienen que recrear rutas de 2 o más horas de duración sin que exista una sensación de repetición. Los trenes y locomotoras están muy bien diseñados y con gran realismo, aunque los pasajeros siguen estando a unos cuantos niveles por debajo a lo que hoy en día estamos acostumbrados. No es una crítica, es un simulador de trenes no de pasajeros, pero a veces son esos detalles los que hacen resaltar aun más un buen producto. En el apartado sonoro está al nivel de lo que se espera, una autentica recreación de los sonidos propios de una experiencia ferroviaria, como el inconfundible repicar de las vías o el bocinazo que despierta a más de uno al pasar por una estación a toda máquina.
Reducimos la marcha a medida que vamos entrando en la periferia de York, después de un agradable ruta de algo más de dos horas, con un frame estable con todos los niveles de detalle a máxima potencia en un Quad Q6600 y una Geforce 8800. En pocas palabras, estamos delante de un simulador de trenes muy sólido con la experiencia que tiene la gente de Kujú Entertainment, y con una traducción excelente de los manuales y misiones, algo a lo que ya nos están acostumbrando los chicos de Friendware (un óscar por la traducción de DCS:Blackshark).
Si tiene algún pero, es que las novedades con respecto a Rail Simulator son mínimas, destacan el mayor número de locomotoras y las mejoras gráficas y por supuesto compatibilidad con su predecesor. Una cosa está clara, Railworks está pensado para los amantes de los trenes, más o menos expertos, pero sólo para ellos. Es primordial tener un poco de inquietud con respecto a los simuladores o a los trenes para sacarle partida a un titulo de este tipo, pero se puede disfrutar y mucho viendo la repercusión que tienen esta clase de juegos en foros específicos. Con Railworks hablamos de un tren de largo recorrido con la multitud de Add-ons con rutas y locomotoras nuevas que corren por la red; hay diversión para mucho tiempo.
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