El mejor de la serie

Lógica evolución gráfica
A simple vista, ambos títulos son muy parecidos a nivel gráfico. Pero a medida que vamos jugando, podemos ir apreciando como Tecmo sí se ha esforzado en ofrecer a los usuarios de Xbox un renovado aspecto a la altura de las posibilidades de su consola. En Meristation, hemos empezado dos partidas desde el principio tanto en la versión PS2 como en la versión Xbox, y hemos ido alternando una con otra para ir observando que diferencias gráficas existen entre ambos. La principal evolución reside, lógicamente, en la resolución. La versión de Xbox es mucho más definida, y tanto las protagonistas como los diferentes elementos que componen los escenarios están dotados de un mayor nivel de detalle.

Donde antes veíamos una oscura tabla de madera prácticamente monocolora, ahora vemos una detallada tabla en la que son apreciables la suciedad, rascadas y detalles que pasaban desapercibidos en la anterior versión. Además, los colores en este port para Xbox lucen mucho más vivos que en PS2, utilizando la paleta tonos mucho más fuertes, dejando de este modo un aspecto gráfico mucho más limpio y nítido en contraste con la palidez, en ciertos elementos, de la versión para PS2. Y gracias al modo en primera persona, del que hablaremos más detenidamente en el apartado de la jugabilidad, esa mejoría se torna en evidente al acercarnos a observar armarios, paredes y puertas: es ahí donde realmente nos daremos cuenta del salto técnico que se ha producido en este año de intervalo que ha habido entre el lanzamiento de los dos juegos.

Un apartado sonoro envolvente
Project Zero 2: Director's Cut sigue manteniendo la misma calidad de sonido que su homónimo en PS2. Gracias a la ventajas que ofrece el sistema Dolby Digital del que hace gala durante toda la aventura, se crea una atmósfera prácticamente irrespirable, y uniendo este apartado a los gráficos, se consigue una ambientación sin precedentes en el género. Es literalmente escalofriante andar por el pueblo de All God: gritos, gemidos, puertas faltas de aceite y suelos de lo más
crujientes. Todo ello, por supuesto, acompañado del más puro de los silencios, solamente quebrantado por los sonidos que os listábamos antes. No hay banda sonora en Project Zero 2, salvo un tema cantado por Tsukiko Amano, Chou, para los créditos finales, y algún que otro ritmo durante los combates, aunque su presencia responde más a un objetivo ambiental que musical. Un apartado impecable y que cumple a la perfección con su cometido: ambientar y hacer de Project Zero 2 una experiencia, a nivel auditivo, verdaderamente acongojante.

El terror desde dentro
Como ya sabéis, la saga Project Zero se caracteriza, en el terreno jugable, por su peculiar forma de enfocar la acción. Aquí nos olvidamos de pistolas, rifles y escopetas. Ni tan siquiera un mísero cuchillo para hacer frente a las hordas de fantasmas, pues el único arma útil para esta clase de espectros que nos encontraremos será la Cámara Oscura. Mediante este peculiar arma, deberemos fotografiar a todos los fantasmas que nos vayan apareciendo, mientras mejoramos las habilidades y posibilidades de la cámara a partir de los puntos que conseguimos al eliminar a los fantasmas. Este sencillo concepto, se torna complejo a medida que avanzamos por el juego, de modo que la aventura queda teñida por unas pequeñas pinceladas a modo de RPG que añaden variedad al desarrollo.

¿El mejor Survival Horror hasta la fecha? 
No nos gustaría arriesgarnos a afirmar tal sentencia sin haber tenido la oportunidad de exprimir al máximo el recién aparecido Resident Evil 4, pero está claro que Project Zero 2 es una experiencia única dentro del género. Un argumento de película (basados en inexplicables y a su vez ilógicos rituales), un apartado gráfico destacable y una ambientación que debería ser recordada y tomada como referencia para los próximos Survival Horrors que las compañías en mente para los próximos meses. Y sobretodo, un modo en primera persona que por sí solo justifica la compra del juego, tanto para los que no hayan probado aún esta aventura de Tecmo como para los que ya disfrutaron en su día con la versión para la 128 bits de Sony. Silent Hill 4 se quedó a medio camino, y el hipotético port de Resident Evil 4 está lejos aún de confirmarse, así que los fans del terror en XBOX no tienen excusa a la hora de entrar en All God Village. ¿Os atrevéis?