Otogi 2, Impresiones (Xbox)

Raikoh... no estás solo; acompáñame. Tu ausencia ha sido un suplicio para todos los humanos. Las bestias vuelven a campar a sus anchas. Pero he conseguido un ejército, una compañía de bestias que te ayudarán. Despierta, Raikoh. Las almas esperan ser liberadas. Coge tu espada, sí, y te presentaré a tus compañeros...

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De una manera similar a este previo empieza O-to-gi 2, secuela del fantástico título de From Software que distribuyó Sega en nuestro país y que hizo las delicias de todos los buenos aficionados a los videojuegos de calidad, que ocupó cientos de páginas en foros y que obtuvo excelentes resultados de crítica y ventas. Pocos meses después de que esa primera entrega saliera a la venta en nuestro país, estamos en disposición de daros unas impresiones de la segunda parte, que salió al mercado hace unas semanas en el país del Sol Naciente.

El objetivo de esta primera misión es encontrar el lugar donde Raikoh se encuentra atrapado; una vez descubierto y despertado de su sueño, recorreremos a la inversa la misma pantalla con el personaje del O-to-gi original, pero con una fuerza más sobrehumana si cabe y con un potencial destructor sorprendente para ser el inicio del juego.

Una vez concluyamos este primer nivel podremos acceder por fin al menú de configuración, donde se mantendrán las mismas opciones que ya vimos en la primera parte: comprar y vender armas, seleccionar la magia, equiparnos con accesorios... Podemos también acceder, como ha sido habitual, a las pantallas que hayamos terminado para descubrir todos los secretos o bien seleccionar una misión nueva. Momento en el que nos encontramos una segunda y grata sorpresa...

Raikoh es el personaje más equilibrado de los seis, con una magia bastante potente, veloz y con una fuerza destacable para su fibroso cuerpo. El resto de caracteres presenta sus propias peculiaridades lo que nos obligará a realizar una buena elección antes de cada misión, debido a que alguna de ellas se adapta mejor a un tipo de personaje que a otro. Así, la bella geisha que aparece en el prólogo tiene un ataque bastante débil en comparación con sus compañeros, pero lo suple con velocidad y una magia potentísima.

Junto a estos dos, cuatro freaks de armas tomar que consiguen añadir la variedad que necesita un juego como este. Tenemos a una especie de hombre lobo armado con sables y que posee una velocidad muy elevada; un corpulento guerrero chino, lento pero armado con una potente hacha y que puede agarrar a los enemigos para posteriormente lanzarlos; una criatura vegetal, con forma de tronco y armada con un timón de barco que puede saltar indefinidamente y atacar desde mayores distancias que sus compañeros, pero cuyos movimientos son bastante lentos; y por último, otra jovencita equipada con una larga guadaña a la que no habrá rival que se le resista. Cada uno de ellos tiene sus propias habilidades, algunos pueden saltar de manera indefinida o saltar tras hacer un dash o deslizamiento, los que agarran a los rivales para lanzarlos posteriormente...

Durante las misiones, seguimos recibiendo oro y experiencia según destruyamos el entorno, acabemos con enemigos, recuperemos las almas ocultas y ahora también, encontrando los diversos signos que se encuentran escondidos en cada pantalla. Con esos puntos, obtendremos mejoras en la tienda, tales como magias y complementos, que por supuesto se han visto incrementados en número y poder para la ocasión. En esta ocasión las armas no se compran en la tienda, sino que deben ser descubiertas en cada escenario.

Otra mejora añadida y que hemos comentado antes está en el desarrollo basado en misiones con distintos niveles cada una; ello obliga a replantear bien cada fase (correcta elección de personaje y magia) antes de comenzarla, si no queremos salir maltrechos de ella. Pese a no ser un cambio significativo, a nivel argumental puede que ofrezca una mayor coherencia y una historia más trabajada que en la primera parte, aunque al tener entre manos una versión japonesa las diferencias idiomáticas no nos han permitido averiguarlo.