¡Megaman vuelve a GameBoy con más fuerza que nunca!
La Red está en peligro. Un pernicioso y voraz virus informático quiere hacerse con el poder a toda costa, pero tú y tu réplica virtual de Megaman no podéis permitirlo...
Parece estar de moda que las sagas más famosas de los video-juegos sufran algunas modificaciones. Final Fantasy y su posibilidad on-line, Resident Evil en su salto a GameCube, Link con su "atrevido" aspecto shading... y no podía faltar un buque insignia de los video-juegos de los 80 que últimamente no era capaz de mostrar grandiosos juegos. Hablamos, cómo no, de Megaman.
Atrás quedan los juegos en los que, gracias al uso de un grandioso scroll lateral, teníamos que enfrentarnos a máquinas cybernéticas y precipios desmesurados. Interminables esperar miestras nuestro arma se cargaba para emerger de ella una inmensa bola de energía que destrozaba finalmente la maquinaria de nuestro enemigo. Nada de perros que acompañen a nuestro "pitufo virtual" o malos malísimos a los que combatir. Este nuevo look sorprende a los más carrozas y atrae a los novatos porque rezuma originalidad por todos lados.
Con un aire muy Pokémon mezclado con el sistema de combates de Final Fantasy, y mezclando también espadas, bombas, misiles y un sin fin de poderosas armas, deberemos matar a los "bichitos" que aparecerán súbitamente en pantalla, de forma que el combate se desarrolle por fases, que explicaremos posteriormente como funciona...
Además, cada vez que dialogamos con otro personaje, aparece un pequeño bocadillo en la parte de abajo con la foto de dicho ser, ya sea real o virtual. Así se evita de forma muy simple la confusión entre los miembros de esta trama. El cartucho de Capcom también goza de unos menús muy bien estructurados, que sin presentar un aspecto 10, la intuición hace que nos movamos por ellos con una facilidad espasmosa, gracias en parte a un juego de ventanas parecido al de la saga Pokémon.
El sonido mono de la GBA es más que suficiente, puesto que no es un aspecto que influya mucho en el desarrollo del juego, pero la posibilidad de jugarlo con cascos se debe tener en cuenta. Parece que nos creemos más la historia si escuchamos las melodías a cada lado de la cabeza. Mejor que saliendo de un minúsculo altavoz que en frecuentes ocasiones taparemos involuntariamente con la palma de la mano.
Eso sí. Se echan de menos los diálogos, pero debido al limitado tamaño de los cartuchos de GBA, era mucho pedir que se incluyeran. Además, es común que en los juegos de acción con pizcas de rol sólo se incluyan los diálogos. Un ejemplo claro es Final Fantasy, que hasta su nº X no ha podido incluir voces debido a la limitación que suponía el CD (y no hablemos del aún más limitado cartucho). Nada que acharcar, pero tampoco nada que resaltar.
Otro punto a favor en este apartado es el combinado real-virtual. En unos momentos controlaremos a nuestro personaje en una agradable ciudad, y de repente entraremos en la red para controlar a nuestro PET. Además existen retos que aparecen poco a poco que tiene como resultado chips, información para acabar con los enemigos o conseguir "zetas" que son algo así como euros pero en virtual. Con ellos podemos comprar infinidad de cosas.
No olvidar mencionar la multitud de opciones que adornan el juego. Leer e-mails, luchar amistosamente contra nuestros amigos, relacionarnos con nuestros padres, ir al colegio a aprender tutoriales sobre los combates y varias sorpresas más que no quiero desvelar.
8
Muy Bueno
Juego de notable acabado que disfrutaremos y recordaremos. Una buena compra, muy recomendable para amantes del género. Está bien cuidado a todos los niveles. Cómpralo.