Lunar Legend (GameBoy)

Hay quien piensa que Lunar es el mejor RPG de la historia del género. Para gustos los colores, pero sin duda que es uno de los más maravillosos y ricos de cuantos pueblan la historia de los videojuegos. Ahora se puede disfutar de esta maravilla en cualquier parte gracias a GBA.

Lunar es un RPG que ha venido encandilando a aficionados desde la época de Mega CD, donde apareció por primera vez aprovechando las habilidades multimedia del nuevo soporte de Sega para dar pie a un RPG que ponía en pantalla un gran numero de colores, una aventura más larga de lo que era habitual en cartuchos y una banda sonora de lujo, unida a una cinemática al más puro estilo anime que era toda una revolución para la época. Sin duda, este, junto con su secuela, fueron quizás los mejores títulos que tuvo el comercialmente fallido "add on" óptico de Mega Drive.

Es tal la popularidad del juego de Game Arts (creadores de Grandia, entre otros), que las dos partes fueron convertidas a Saturn y a PSX, algunas veces intentando añadir cosas nuevas, como vídeos más largos y de mayor calidad (un ejemplo claro se puede encontrar en la versión completa para Saturn, que requería de la tarjeta Mpeg de la misma para funcionar dado a la gran calidad de reproducción que se alcanzó).

Por supuesto, la calidad de vídeo que se va a encontrar en lugar Legends no es la misma, pero sí lo es el espíritu de la saga, manteniendo las mismas virtudes que el título del que toma su forma,  Lunar: Silver Star Story (en concreto, el de Mega CD), que fue el primero y sobre el que se basa esta conversión para GBA. En realidad no es una conversión "perfecta" en el sentido de que se han introducido nuevos giros y situaciones, más destinados a la curiosidad de los jugadores del original que a afectar seriamente la trama y el desarrollo.

Al contrario que su sucesor, la ambientación del primer Lunar es alegre y ligera, muy al estilo de Grandia, con un joven aspirante a héroe de nombre Alex que aspira a ser nombrado "Dragonmaster"" el más alto honor que puede alcanzar un héroe, para lo que decide partir de su pequeño y acogedor pueblo en busca de aventuras. A pesar de la simpleza del arranque, Lunar se ha caracterizado siempre por tener una historia muy sólida y rica, con numerosos giros inesperados y bien llevada de principio a fin. No en vano hay quien tiene a la saga Lunar como el mejor RPG existente.

La mecánica general no es muy diferente de la de cualquier otro RPG, superficialmente. Pero profundizando un poco, uno se da cuenta de esos detalles que separan un título divertido de otro aburrido. Los combates son aleatorios y por sorpresa (al contrario que en la versión de PSX en donde se podían ver y evitar), con una frecuencia alta, pero para compensar, la velocidad del personaje también es alta. Esto implica que si se tiene prisa por llegar a un sitio, no hay que sufrir en exceso por los encuentros aleatorios que te obstaculizan ya que se llega pronto, pero si se quiere subir niveles, no habrá que esperar mucho hasta que salga un enemigo dispuesto a ser pasado por tu espada.

El combate es por turnos, aunque se incorpora unos cuantos sistemas para automatizar en mayor o menor medida la gestión de los mismos, lo que implica que o bien se puede completar todos los aspectos del combate, o dejar que la computadora maneje parte o todos, ideal para cuando uno se canse de tanto combate pero quiere subir niveles. El sistema de desarrollo de personajes es realmente muy bueno, obediente con respecto a la marcada personalidad de cada uno y dando lugar a un aumento de las habilidades que conforma una buena variedad de opciones en los combates, lo que al final se traduce en diversión para los amantes de los RPG de este tipo.

En cuanto a los gráficos y audio, hay que tener en cuenta el salto que supone un formato CD al de un cartucho, lo que no ha impedido que se incorporen unas adaptaciones, que si bien no tienen la calidad acústica de las anteriores, sí mantiene la calidad de su composición, alegre en su mayor parte, pero sin olvidar dar ese toque mágico que necesitan las grandes escenas para que realmente sean grandes.

Los gráficos mantienen un nivel más que digno, e incluso equiparable en algunos aspectos al del propio CD, sprites detallados, paisajes bellamente plasmados y efectivos artificios gráficos para dar vida a magias, reflejos... de lo mejor que se puede encontrar en un RPG para este sistema, solo un poco por detrás de Golden Sun (aunque la diferencia de recursos y medios entre uno y otro es abismal, teniendo en cuenta que uno es una conversión de un juego antiguo por un pequeño grupo de desarrollo y el otro es una producción que acaparó los medios de un prestigioso equipo como es Camelot).

Pero no todo está en el despliegue técnico a la hora de que un juego sea bello, y que el sentido artístico del Game Arts cuando desarrolló por primera vez el juego es innegable. Tanto en las ilustraciones que acompañan a los personajes, en el diseño de los personajes, en la composición en el escenario... uno no puede evitar sentirse prendado por la delicadeza, personalidad y maestría que salpican estos detalles, que siguen manteniendo su atractivo a través de las generaciones, los bump mapping, los antialising y los millones de polígonos.

Lunar Legends ha sido traducido al inglés y ya es disfrutable para los occidentales, aunque solo para U.S.A o para quienes quieran importarlo de allí. No debería haber motivos para que no llegara a Europa, en cuyo caso a buen seguro que hará disfrutar a cuantos aficionados al género quieran perderse en los bosques, pueblos, mazmorras y, especialmente, en la historia y en la relación entre los personajes que integran el mundo de Lunar.