Kirby: Triple Deluxe, Impresiones

Junto a Super Mario, Donkey Kong o Samus Aran, otro personaje mítico del plataformeo Nintendo es Kirby, adoradísimo en Japón y siempre exitoso en públicos menos mayoritarios de videojuegos como los niños pequeños o las chicas -por desgracia aún detrás y más ocasionales que el público masculino-. Explosión de color, un personaje adorable, planteamiento sencillo y gracioso, y un amigable mundo de fantasía repleto de niveles distintos y buen ritmo jugable. Kirby: Triple Deluxe se apunta este 16 de mayo a la estereoscopía sin gafas característica de Nintendo 3DS con una nueva aventura de saltos, succiones de poderes e inocentes combates para la inconfundible bola rosa tragona creada en 1992 por Masahiro Sakurai. El Rey Dedede vuelve a desplegar su ejército en un variado mundo en las nubes al que solo podremos acceder desde las plantas enredaderas, con todo el despliegue habitual de arco iris, flores, bichitos y entornos de fantasía de cuento.

3DS y 2DS recibirán con este título que ya hemos probado un nuevo compendio de niveles donde el globo rosa debe volver a saltar y flotar mientras absorbe poderes de todo lo que come, desde enemigos a pócimas únicas. Como en Donkey Kong Country: Tropical Freeze y otros plataformas de la compañía en los últimos tiempos, Nintendo juega de nuevo con los niveles laterales basados en los juegos de profundidad y los caminos paralelos, uno más atrás que otros. Y esto, con el efecto 3D activado, gana un aspecto único y bien pensado que realmente en este cartucho no se ha querido llevar muy lejos puesto que la profundidad y los relieves no están agudizados, de hecho los segundos son casi inexistentes siendo la propia pantalla a menudo el tope para los elementos a traer a primer plano. Está claro que el enfoque infantil y las considerables ventas estimadas en 2DS -sin opción 3D- haN hecho que sus creadores no quieran jugar demasiado con la tridimensionalidad estereoscópica. El efecto está presente pero de forma suave, aunque el juego esté claramente ideado para él.

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Nuevos mundos y poderes que clonar de los enemigos succionados pero también un montón de referencias a todo el universo Nintendo, como la clásica transformación de Kirby en algo muy parecido a Link de The Legend of Zelda, con gorro verde y una espadita y movimientos de ataque con ésta que se parecen demasiado a los de la prestigiosa serie ideada por Shigeru Miyamoto. Este poder era ya conocido, pero habrá algunos nuevos. También veremos algunas apariciones de elementos de Super Mario, y claro está, toda la estética de estrellas, puertas centelleantes, golpes distintos según la dirección y enemigos con mazos como el del Rey Dedede. La explosión de color, de mundos de sol, hierba, nubecitas, etc. y enormes jefes finales de cada mundo tras los cuatro niveles de éstos son otros aspectos que en esta edición se manifiestan con contundencia.

Es una obviedad el estilo Sakurai y el cierto airecillo a Super Smash Bros, con los ataques distintos según la dirección que pulsemos junto al botón de golpear, los items que convierten en otras cosas a Kirby, el brevísimo parón con cada sonoro impacto o las plataformas a las que subir y que atravesar desde abajo. En relación a esto, Kirby: Triple Deluxe añade un modo adicional para uno o hasta cuatro jugadores en conexión local a través de StreetPass de mecánica calcada a Super Smash Bros, con niveles cerrados con distintas alturas y objetos que van cayendo al escenario donde el único objetivo es acabar con los otros tres oponentes. Servirá para ir abriendo boca para el esperado beat'em up de este otoño en Nintendo 3DS y Wii U. A este modo se añade otro de estilo musical, con fases de plataformas donde Dedede va rebotando de forma rítmica en timbales y tambores, recogiendo platillos que suenan junto a la melodía de cada fase, etc.

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En su planteamiento central, bastante sencillo de ir completando aunque más exigente si se quieren todos los llaveros (coleccionables en una galería e intercambiables con StreetPass) y estrellas especiales del nivel, Triple Deluxe vuelve a intercalar puzles y recogida de coleccionables en todas las fases. El personaje se mueve como siempre, con su inercia y opción de vuelo escalonado. Recoger las estrellas especiales de cada fase nos permitirá abrir las puertas de los jefes de cada mundo, con viejos conocidos entre ellos. Para esto es necesario usar la astucia en determinados puntos, buscar llaves, mover bloques con nuestro poder succionador, grandes bolas pendulares o incluso mover la consola para completar con éxito los minijuegos y determinados segmentos que requieren un control con el giroscopio, muy intuitivo y eficaz. Tras cada nivel Kirby dispondrá también de un minijuego de mundo, el primero de ellos basado en un cañón que disparar para obtener bonificadores -comida que rellenen la salud, poderes...- parándolo justo en su momento de tiro más potente.

El diseño de los escenarios con diversos caminos según el plano de profundidad crea un gameplay donde no solo mirar lo que rodea a Kirby, sino también lo que hay detrás o delante. En cuanto a poderes, hemos visto transformaciones de fuego, de ninja con posibilidad de vuelo rápido, de arrojador de bombas como si fueran bolos, de Kirby electrificado con látigo voltaico, etc. Descubrir qué poder nos otorga cada enemigo una vez los devoremos y buscar cómo usar cada nueva destreza ha sido siempre lo mejor de la marca. En Triple Deluxe se vuelve a usar este incentivo, fortalecido por el Kirby súper succionador, capaz de tragarse orugas gigantes, árboles, rocas y demás elementos del escenario dejándolo todo vacío. Muy gracioso y espectacular. Gráficamente el juego se comporta, es redondeado y colorido, pero no presenta alarde alguno que nos haga hablar de algo especialmente notable en 3DS. En la línea de Yoshi's New Island o New Super Mario Bros 2. El sonido, por su parte, busca la contundencia de los golpes y las melodías de estilo retro con muchas piezas clásicas de Kirby recuperadas.

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Todo esto ofrecerá Kirby: Triple Deluxe, un producto enfocado a un público amplio pero bastante único, un juego accesible para jugadores ocasionales y un nuevo salto del entrañable personaje sobre una máquina sobre la que no se había estrenado. El suave efecto 3D lo hace idóneo para niños y no tiene una presencia crucial, lo que lo hace perfecto también para Nintendo 2DS. Los escenarios y su juego con las profundidades ayudan a crear un gameplay con elementos novedosos, algo que también ocurre con la utilización del giroscopio para determinadas secciones y minijuegos. Su multijugador a cuatro es el añadido ideal para cruzar partidas con otros en intensos combates a los Smash Bros, modo que se respalda del también adicional compendio de fases musicales con Dedede como rítmico protagonista. El 16 de mayo las tiendas se llenarán de este actualizado Kirby que tiene mucho, mucho de clásico y, aunque ya no sorprende en absoluto, sabrá encontrar sus seguidores una vez más.