Gunbird Special Edition
Diversión por partida doble
Las dos entregas de una de las sagas de shooters más divertida se recopilan en este título para PlayStation 2. Diversión directa y sencillez para disfrutar como nunca acabando con cuanto enemigo aparezca en pantalla.
Si en algo destaca esta generación es en la gran cantidad de remakes y recopilatorios de antiguos juegos que ven la luz. Ya sean versiones mejoras de grandes joyas (Resident Evil, Metal Gear Solid), nuevas entregas de sagas olvidadas (Ninja Gaiden, Altered Beast) o recopilatorios con leves o ninguna mejora (Sonic Mega Collection Plus, King of Fighters), lo cierto es que numerosos títulos clásicos regresan al panorama actual.
Por suerte, las compañías desarrolladoras saben bien elegir los mejores títulos para tal fin, y con ello permiten que los usuarios podamos disfrutar de verdaderas joyas que no pudimos disfrutar en su momento o que nunca está de más recordar. Llega a nosotros ahora un nuevo recopilatorio, Gunbird Special Edition, que alberga en su interior las dos entregas de uno de los shooters más divertidos de todos los tiempos.
Por eso, la conversión a PlayStation 2 no supuso mayores quebraderos de cabeza a los chicos de Psikyo, ya que se trata de recuperar los títulos anteriores tal cual, sin grandes añadidos ni numerosos extras. Si la fórmula funcionó en Dreamcast, ¿para qué cambiarla en una consola que no dista tanto de la máquina de Sega?
Y sin embargo, pese a la simpleza y la sencillez en todos los aspectos de los juegos, nos encontramos ante un título verdaderamente encantador. Que los aficionados a los shooters esperen grandes innovaciones, ya que se trata del sistema clásico de los mismos, sin novedades, pero sabiendo manejar sabiamente esos elementos y llega a crearse un gran juego.
Ambas entregas de Gunbird ofrecen todo eso y con creces. Pese a pecar de ofrecer unas fases ligeramente cortas, estas son muy intensas, ofreciendo una descarga de adrenalina constante al jugador, quien sufrirá para intentar evitar todos los ataques enemigos mientras avanza por cada uno de los niveles.
La jugabilidad es sencilla, como debe ser en un juego de estas características. Aparte de moverse en todas las direcciones del espacio por la pantalla, el jugador tendrá a su disposición diversos tipos de ataque. Con cuadrado, será el disparo normal, que habrá que aporrear el botón para un ataque permanente. Este ataque se puede realizar dejando puslado triángulo.
Con X y círculo, se realizan los ataques especiales, que varían según el personaje elegido y que dependen de un número o de una barra de especial según el juego. Esto quiere decir que son limitados, y no se podrá abusar de ellos, ya que llega un momento en el que se acaban. Sin embargo, se pueden recargar recogiendo items que desprenden los enemigos.
Dichos items sirven también para aumentar y mejorar las habilidades del personaje protagonista, permitiéndole disfrutar de un ataque más potente y de ataques combinados, con lanzamiento de misiles a la par del ataque normal. Aparte de esos potenciadores, los enemigos también pueden soltar monedas que aumentarán la cantidad de puntos del jugador.
Como curiosidad, cabe destacar el modo en el que se presenta el juego, ya que el formato de pantalla es alargado en vertical, sin llenarla lateralmente. En esos huecos vacíos hará su aparición una ilustración a ambos lados de la franja central en la que se desarrolla la acción. A pesar de no ser unas grandes ilustraciones y de estar oscurecidas para no entorpecer el juego, consiguen resultar curiosas y se agradece que no se dejasen un par de franjas negras.
Así, Gunbird 2 hace gala de unos gráficos mucho más llamativo, unos mejores diseños de personajes (incluso de los que repiten, que ganan muchos enteros respecto al original) y unos enemigos finales muchísimo más grandes y llamativos. Los personajes protagonistas también han cambiado mucho para mejor, haciendo su aparición Morrigan o un Alucard en Gunbird 2.
Sin embargo, quitando el aspecto visual, ambos juegos siguen el mismo ideal de diversión, por lo que se puede disfrutar de ambos por igual, quedando para cuestión de gustos de cada uno el que se considere mejor entrega, aunque Gunbird 2 es ligeramente superior en muchos aspectos a su primera entrega.
Bueno
Cumple con las expectativas de lo que es un buen juego, tiene calidad y no presenta fallos graves, aunque le faltan elementos que podrían haberlo llevado a cotas más altas. Cómpralo sin miedo.