Gigantic Overdrive (PlayStation 2)

De entre todos los géneros del manga japonés o anime el de los 'Mechas' ha sido uno de los mas característicos.  Gracias a las múltiples habilidades de estos robots han conseguido cautivarnos hasta hacernos creer que la máquina en cuestión tenía vida propia y hasta su propio corazoncito. Nada más lejos de la realidad. El juego de Enix nos propone una visión desde el verdadero protagonista de la historia: el piloto. Desde una vista en tercera persona tendrá lugar la acción.

Si nos vemos bien ya podemos empezar a subirnos por edificios, correr o encontrar un sitio seguro para controlar a nuestro compañero. Mide unas 100 veces mas que nosotros, pero tu tienes los mandos y él responde. Adéntrate en esta épica aventura y derrota a todo aquel que ose enfrentarse a ti.

Y todo empezó aquel día
La historia nos cuenta como una radiación llamada 'néctar de radiación' se encuentra muy cerca de la tierra haciendo imposible la huida o refugio fuera del planeta. Este tipo de radiación es muy mortífera, capaz de matar a gran cantidad de gente en pocos minutos. Esa es una parte del plan de quien quiere apoderarse del planeta azul. La otra parte es enviar grandes mechas con poderes similares al que exhibe el robot que controlaremos nosotros, sólo que con intenciones malignas.

Pero no valoremos el juego por el argumento, pues éste, como en muchos otros casos (desgraciadamente) es una mera excusa para entender y tener una causa por la que luchar y defendernos. Eso implica un rápido aprendizaje del control en el que un acertado tutorial nos introducirá en el gran reto de movernos por unas ciudad repleta de edificios, parques, casas, vehículos y gente con una gran sencillez pero resultando convincente. Todo lo que veamos se puede destruir, disparar, pisar, derrocar e incluso saltar sobre ellos o por encima de ellos.

Parece demasiado para un juego de este calibre pero además podremos transformarnos en un alter ego al que reconoceremos como vehículo de transporte mucho más cotidiano como un avión, un tanque o un helicóptero. Así nos desplazaremos con más rapidez hacia  cualquier objetivo que no siempre será un enemigo. A veces deberemos visitar a compañeros o NPJ's que nos ayudaran a mejorar nuestro robot o simplemente darnos otra misión que requiera de la gran máquina.

El índice y corazón serán sus piernas; tus pulgares, la salvación
Hablemos del control, un aspecto que sin dominar puede causarnos más una desesperante muerte por no saber girar, saltar o esquivar.Nuestra cruzada para salvar el planeta empieza con el modo Historia y cuenta el argumento arriba comentado. Pero no es el único modo de juego, también tenemos Training, Challenge, Versus y Options. Pero empecemos por el importante: El modo historia. Al empezar  deberemos seleccionar a uno de los 3 hermanos o hermana, cada uno de 17 años como protagonista de la historia. Después de pedir ayuda al centro de control el creador de esta máquina de defensa nos entregara el controlador mediante el cual ordenaremos sus acciones, movimientos y desplazamientos a través de la ciudad.

Los controles rezan así
El chico se mueve con el analógico izquierdo, los R1 y L1 sirven para caminar de lado. La redonda nos propulsa hacia arriba una cierta cantidad de tiempo y el cuadrado nos ofrece la posibilidad de lanzar pequeñas granadas para defender a nuestro gigante cuanto este desprotegido o para dar el golpe de gracia.En cuanto al chico eso es todo, pero el meollo del asunto se centra en el "mecha".

L1 y R1 representa el movimiento de las extremidades inferiores hacia delante (una pierna y después la otra para avanzar). Los L2 y R2 controla las mismas extremidades pero al sentido contrario, es decir, hacia atrás o retroceder.El pad de dirección controlará el torso para esquivar, apuntar o mejorar nuestro gancho respecto al ángulo que este nuestro objetivo. El analógico izquierdo mueve el brazo izquierdo y el derecho pues eso, el brazo derecho. La redonda  dispara misiles desde media y larga distancia.

El triángulo acciona un láser o diferentes armas depende del mecha que escojamos, pero con similar potencia y poder de destrucción. Con la X y el analógico se nos permite mover la vista del personaje en cuestión (unos de los 3 hermanos). El cuadrado es el botón que finalmente nos permitirá trasformarnos en la máquina que nos ayudara a ir mucho más rápido por el escenario, pero menguados de poder destructivo. Los botones L3 y R3 nos proporcionaran una mano o disparador diferente al normal.

Destrucción masiva
Escenarios detallados, con cientos de edificios de todas las formas y colores. Ruedos, estadios de fútbol ciudades de diferentes estilos y todo es rompible. Después de una lucha con algunos de los secuaces  dará la impresión que en vez de salvar la ciudad la habréis destruido en vez de intentar salvarla. Gracias al motor grafico se ha conseguido una verosimilitud muy importante a la hora de ver como caen los edificios, se destruyen coches o destruimos con nuestras pisadas la calzada, dando un aspecto estremecedor a cada secuencia de derrumbe. Lastima que los edificios se rompan formando polígonos simples y mostrando el edificio vacio por dentro, casi por triángulos se desploman sin dejar rastro de los escombros. Lógico por la parte de los escombros (más memoria que generar), pero la destrucción de un edificio implica algo más que la parte externa.

Conclusión
Es innovador y preciosista. Con un control muy especial y ajustado a los nuevos tiempos haciendo uso de los L3 y R3 y diferenciando de la presión a los botones mientras nos movemos. Técnicamente poco se le puede reprochar. Quizá un mayor esmero en detallar más a los mechas o una vista con mayor ángulo de visión y lejanía. Pero no ofrece nada más. Es repetitivo por no haber mucha variedad en las misiones, con pocos argumentos jugables para acabar lo que hemos empezado y sobre todo faltan mas armas, mas mechas y una jugabilidad mas rápida y arcade para llegar a la lente del mayor numero de aficionados de este genero posible.Sin lugar a dudas el multijugador es su mejor baza, pero faltan elementos diversos y espontáneos para llegar a ser el mejor. El control soberbio, lo demás es pura rutina.