Fire Emblem Warriors: Three Hopes, avance. Un musou muy estratégico

Altas dosis de acción, machacar botones y una cantidad ingente de enemigos por derrotar son algunos de los elementos que componen un buen musou, un tipo de juegos englobados dentro del género del beat’em up en los que la saga Warriors de Koei Tecmo reina. Fue el pasado 2017 cuando pudimos disfrutar de Fire Emblem Warriors y son muchos otros los ejemplos que hemos tenido entre manos estos últimos años para ofrecer una visión algo distinta de títulos como The Legend of Zelda: Breath of the Wild con su Hyrule Warriors. A partir del próximo día 24 de junio llega en exclusiva para Nintendo Switch Fire Emblem Warriors: Three Hopes, el musou basado en el universo de FE: Three Houses. Ya lo hemos podido jugar durante unas cuantas horas, por lo que aquí os contamos nuestras impresiones detalladas acerca de este frenético título.

Mucha acción…pero también estrategia y narrativa

Quien recuerde cómo fue el primer Fire Emblem Warriors se encontrará en esta nueva entrega una versión ampliada y mejorada de dicho título, pero que sin embargo contiene muchos elementos en común. Al contrario de lo que ocurre en otros musou, mucho más centrados de forma prácticamente exclusiva en la parte de la acción y el machaque de botones, en los títulos de la rama de Fire Emblem la estrategia es un componente indispensable desde el principio.

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Será algo que notaremos más en los niveles más avanzados de dificultad y a medida que los capítulos progresen, pero aún así deberemos estar atentos en todo momento a los avisos que salen en pantalla para comprobar cómo varía el objetivo de nuestra misión, qué tareas secundarias surgen y cómo avanzan nuestros aliados y enemigos por el mapa en cada caso. Al respecto de esto, como buen juego de estrategia que es, podemos comandar a nuestras tropas más importantes para que se dirijan a eliminar a un capitán en concreto, aunque esté en la otra punta del mapa. Esto nos permitirá aprovechar las vulnerabilidades y fortalezas de cada clase para así, por ejemplo, enviar a Edelgard y su espada a enfrentarse a un enemigo con lanza mientras que nosotros escoltamos a una aliada recién rescatada fuera del castillo, sana y salva.

Usar ataques ligeros, fuertes y cargar una habilidad definitiva especial de cada personaje al que manejemos será algo constante durante toda la batalla. Cada vez que subamos de nivel podremos mejorar nuestras estadísticas de vida, fuerza, magia, habilidad, velocidad, suerte, defensa, resistencia y carisma, que nos servirán para disponer de varios personajes con cada uno de estos stats más o menos elevado y con ello configurar nuestro equipo ideal para salir al campo de batalla. Cómo veis: estrategia para dar y regalar. También hay que tener en cuenta las clases de cada personaje: flügel, luchadora, monje, soldado…y configurarlos de forma correcta para poder adaptarnos al enemigo y sobrepasar sus fuerzas.

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Cada misión es un tanto distinta y a pesar de correr el riesgo de que a medida que pasen las horas los combates terminen sintiéndose algo repetitivos, lo que hemos jugado por ahora nos ha resultado satisfactorio a los mandos y sorprendentemente variado. A esta idea ayuda la gran cantidad de escenas cinemáticas y de diálogos que hay entre peleas, algo que permite a Three Hopes disponer de una versión alternativa a la historia de Three Houses. No os podemos desvelar hasta qué punto con tal de no entrar en terreno de destripes, pero sí podemos avanzar que cualquier jugador que disfrutara de la aventura principal lanzada en 2019 podrá reencontrarse con todos aquellos personajes con los que pasó tantas horas en su momento.

Nuestro o nuestra protagonista es Shez, una mercenaria con un misterioso pasado que deberá desentrañar todos los misterios que envuelven a su persona al mismo tiempo que se enfrenta a su gran enemigo, el Azote Sombrío, y conoce a los líderes de las tres grandes naciones que gobiernan Fódlan: Águila Negra, León Azul y Ciervo Dorado. Tal y como ocurría en el juego principal, desde el principio tendremos que escoger a qué casa apoyamos, algo que dividirá nuestras opciones de ruta en hasta tres partes y multiplicará enormemente las horas de juego totales para ver todo el contenido que la obra tiene por ofrecernos.

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El sistema de amistades y relaciones no es tan complejo como en Three Houses, pero aun así encontramos muchas conversaciones con opción de respuestas variadas en las que podemos mejorar nuestra conexión con los aliados a la par que forjamos la personalidad que queramos para Shez. Serán los jugadores que disfruten de la dualidad entre acción y narrativa quienes más aprovechen este Three Hopes, mientras que a aquellos más centrados en la parte del hack & slash tal vez se les haga un poco tedioso la parte de extensa narrativa.

Discreto a nivel técnico y gráfico, pero cumple su función

Para tratarse de un musou, Fire Emblem Warriors: Three Hopes aguanta bien a nivel técnico y no sentimos grandes caídas de FPS a pesar de la cantidad de personajes que aparecen en pantalla durante las batallas. Tampoco podemos afirmar que se vea muy detallado y de lo mejor que tiene por ofrecer la consola de Nintendo, pero sí está a un nivel considerablemente superior al del primer Fire Emblem Warriors que aterrizó en Switch. En lo que a gráficos se refiere, toma las bases y modelados de Three Houses para presentar algo muy similar, tanto en gameplay como en cinemáticas y conversaciones.

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Su apartado sonoro se compone de temas musicales que ya conocemos y otros nuevos añadidos para la ocasión, además de voces en inglés y efectos de sonido logrados para acompañar a la acción. Podemos destacar y confirmar que el juego llega totalmente traducido al español, por lo que no hay barrera de idioma que nos impida comprender nada de lo que se cuenta en esta nueva versión alternativa de la historia que vivimos en su momento con Fire Emblem: Three Houses.

Aún nos quedan muchas horas de juego por delante para descubrir todo lo que este nuevo Warriors tiene para ofrecernos, pero el primer contacto nos han dejado un buen sabor de boca. Abrumador en contenido debido a las tres rutas distintas que se nos plantean por delante, satisfactorio en jugabilidad y con muchas posibilidades, este nuevo musou de la franquicia Warriors se presenta como recomendable para los fans del género e imprescindible para los que disfrutaron de Fire Emblem: Three Houses y se quedaron con ganas de seguir explorando su universo.

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