Exoprimal
Review
Análisis de Exoprimal, un multijugador divertido lastrado por algunas decisiones
Analizamos Exoprimal, el nuevo multijugador de Capcom en el que debemos sobrevivir a enormes oleadas de dinosaurios.
Ya lo decíamos durante nuestras impresiones finales: Exoprimal respira la identidad de Capcom desde el primer minuto del juego. La jugabilidad está al servicio del jugador para que no suponga una barrera ante las ingentes oleadas de dinosaurios. En la práctica se plasman muchos aciertos, pero también decisiones controvertidas que en nuestra opinión perjudican al desarrollo. Es un título en que le debes tener paciencia para descubrir todas sus virtudes.
Clases y la diversidad de elección
Exoprimal se compone de varios de los elementos básicos de las dos tendencias multijugador: el PvE y el PvP. Esa línea de diseño se plasma desde el primer minuto con su sistema de clases. El equipo divide en tres roles el papel que desempeña cada jugador en la partida; al ser equipos formados por cinco usuarios, gracias a la versatilidad de las clases no se transmite la necesidad de seguir un esquema de elección fijo. La mayoría de misiones se componen de seis objetivos que debes completar en un plano diferente al del equipo rival. Cuando las terminas saltas al modo de juego final, el que determina qué equipo ganará. Algunas veces los dos escuadrones confluyen para añadir el picante del PvP, donde realmente se muestra el balanceo de las exoarmaduras.
La habilidad de los jugadores determina cómo de efectiva es esa clase. Lo hemos visto en partidas donde la coordinación ha sido excelente entre los compañeros. Por ejemplo, en una de ellas teníamos un solo miembro de apoyo, la clase que hace las veces de médico, mientras que el resto de los huecos estaban monopolizados por asaltos a excepción de un tanque, que mantenía a raya a los grandes dinosaurios. Si en otros títulos es necesario llevar un número más alto de jugadores dedicados a la salud (salvo que haya restricciones por el meta), aquí un jugador capaz puede mantener el equipo a flote.
En relación con los apoyos, durante nuestro paso hemos detectado que precisamente esta es la clase más elegida por los jugadores. Si eres veterano del género sabrás de lo raro que es que ocurra esto. Las clases o personajes más demandados suelen ser los centrado en el daño puro, los DPS de toda la vida. Sin embargo, Capcom ha elaborado exoarmaduras tan divertidas como curanderos que al final la comunidad busca poder jugar con ellos.
Ejemplos concretos hay muchos. Nimbus, el apoyo que requiere más habilidad, usa pistolas duales que tienen dos modos de fuego. Al activar la primera podrás realizar daño balístico como un arma más; sin embargo, cuando activas su modo secundario puedes hacer que el plomo cambie su efecto a curación. Comienzas a disparar a tus aliados para controlar los daños y que puedan aumentar su supervivencia. El más difícil de controlar es tan divertido como el más sencillo. Witchdoctor, el primero en desbloquearse, tiene un bastón eléctrico que hace daño sostenido que ablanda a los enemigos para ser eliminados por un compañero. Para curar tiene dos opciones. La primera es un proyectil que crea un radio amplio de curación, mientras que si buscas algo más rápido tienes un pequeño látigo que al acercarte al compañero recobrará su vida.
Podríamos seguir poniendo ejemplos así durante párrafos y párrafos. Insistimos en la idea de que las exoarmaduras y su comportamiento en la batalla son el verdadero músculo de Exoprimal. Eso sí, el balanceo actual requiere algunos ajustes. En la clase de asalto hay un exceso de poder en Zephyr. Sus dos espadas de energía rompen por completo el balanceo de sus compañeros de clase. Deadeye hace mucho daño pero está limitado a esa ametralladora ligera; Vigilant se queda en tierra de nadie porque no existe el combate de larga distancia, y en los tiroteos muestra una escasa cadencia de disparo frente a sus compañeros; Barrage es la segunda mejor exoarmadura de su clase, aunque está un par de escalones por debaje de ese Zephyr. A mediados de agosto de 2023 se espera la llegada de las variantes de cada personaje, que alterarán su forma de jugar en formas que todavía no se han concretado.
Progreso confuso: más potencial del que realmente muestra
Marea Jurásica es la vertiente que lleva la voz cantante durante tu experiencia en Exoprimal. Es la opción por la que confluyen todos los modos de juego disponibles, ya sea con final PvP o PvE. El problema radica en una decisión que más que ayudar, confunde a los jugadores. Al inicio aludíamos a la paciencia que hay que tener para acceder al paquete completo. Sentimos que es contraproducente para un multijugador de partidas de entre 15 y 20 minutos que este lado del contenido esté bloqueado por cuestiones argumentales.
Entendemos que haya un progreso natural ligado al desbloqueo de nuevas exoarmaduras o chips que potencie tu rendimiento de forma pasiva, pero que los modos estén sujetos a jugar un número determinado de partidas manda un mensaje equivocado a la porción de comunidad que está decidiendo si quedarse en ella o seguir otras corrientes multijugador. Las primeras ocho horas de juego están prácticamente monopolizadas por unas poquísimas vertientes al final de la partida. Casi todo consiste en completar misiones como seguridad de datos (escolta), control de la conexión (dominio) y las típicas cadenas de asesinatos de objetivos.
Si la estructura fuese diferente, donde el argumento tomara un plano complementario, el ritmo sería más alto y aportaría una mejor carta de presentación que la que muestra actualmente. Cuando llevas tantas horas repitiendo los mismos contenidos terminas hastiado; hay tanta oferta ahí fuera que lo que propone Exoprimal queda en una anécdota. Es un cooperativo con tintes de competitivo realmente divertido cuando funciona bien, pero está demasiado lastrado por un desarrollo que restringe demasiado las posibilidades de cara al jugador. A medida que progresas desbloqueas nuevas formas de luchar, como un combate contra dinosaurios especiales, pero para verlo todo debes ser realmente entusiasta.
Y dentro de lo que propone tampoco hay la suficiente variedad como para dar muchos argumentos por los que permanecer en él. Nos gusta especialmente cuando se introducen a los Neosaruios, que son reinterpretaciones de los dinosaurios básicos añadiendo poderes sobrenaturales. Son combates algo diferentes que añaden una capa de dificultad al conjunto. En total hay más de 10 misiones disponibles, pero el matchmaking te suele colocar en las mismas de siempre. Hay mucho potencial en lo jugable, aunque la falta de contenido y el tipo de progreso le lastran demasiado. Exoprimal luce de nuevo el músculo del RE Engine que tantas alegrías ha dado a Capcom, desde la fantástica versión de Monster Hunter Rise en Nintendo Switch hasta las últimas entregas de Resident Evil, pasando por Street Fighter 6. El juego cuenta con voces y textos en completo castellano.
Conclusión
Exoprimal es un multijugador diferente. Mezcla elementos del PvE y PvP para encontrar su propia aproximación del shooter en tercera persona con clases. Es divertido, no cabe duda, pero su progreso es confuso y puede espantar a más de un jugador. La imposición de la campaña y el bloqueo de los modos de juego desde el inicio hacen que debas tener paciencia. Si eres paciente descubrirás el potencial que tiene de cara a sus contenidos postlanzamiento; si no, terminarás cansado de la repetición de vertientes.
Lo mejor
- La jugabilidad, un TPS que funciona genial a los mandos.
- La forma en la que han trasladado la clase de apoyo, divertidísima de jugar.
- El ritmo de las partidas y el choque (cuando ocurre) entre jugadores.
Lo peor
- Ligar el progreso de la historia al desbloqueo de misiones y otras vertientes de juego.
- Algunos desajustes en el equilibrio de las exoarmaduras de asalto.
- Debes tener paciencia para descubrir todo su potencial, y aun así queda corto de contenido.
Correcto
No es lo último ni lo más original, tampoco cuenta con la mejor ejecución, pero puede divertir si te gusta el género. Bien, pero mejorable. Cómpralo si te gusta el género y te gusta tenerlos todos.