Eternal Threads: Análisis Pc - Jugando con el Flujo Temporal

Con la tremenda vorágine de lanzamientos que vive el sector del videojuego, resulta fácil perderse muchos títulos interesantes que por una razón u otra no terminan de recibir toda la atención que merecen por parte de prensa y jugadores. Sirva como buen ejemplo de ello el título objeto de este análisis, Eternal Threads, una más que interesante propuesta de fuerte carga narrativa que bien merece una oportunidad si nos gustan los videojuegos de este corte.

Estamos ante un título complejo de catalogar, apostando como ya hemos comentado por una gran carga narrativa y cediendo el principal protagonismo de su desarrollo a esta. Para hacernos una idea, y salvando las distancias, Eternal Threads sería una suerte de híbrido de títulos como Gone Home, Tacoma, Her Story o Telling Lies. Su principal objetivo es contarnos una historia muy interesante, permitiéndonos interactuar ligeramente con ella para tratar de modificarla.

Toda la acción transcurre en un pequeño piso donde ha ocurrido un terrible incendio que ha segado la vida de 6 personas. Nuestra misión será movernos por el flujo temporal de los acontecimientos del piso, observando varias secuencias hasta desvelar lo acontecido. Podremos alterar los acontecimientos en determinadas secuencias que nos permitirán tomar decisiones binarias, que en función de la elegida variarán la historia. También deberemos obtener información de las secuencias para poder acceder a nuevas estancias.

Y la verdad es que el cómputo global de Eternal Threads nos ha parecido positivo y nos ha convencido. Su narrativa es buena, sus diálogos están muy bien escritos, y todo ello conecta con el jugador haciendo que la labor de descubrir qué ha acontecido resulte placentera. Pese a su simpleza, la jugabilidad está bien resuelta, cuenta con un interfaz accesible y satisfactorio para viajar por el flujo temporal, aunque debemos ser conscientes que la mayor parte del tiempo nos limitaremos a contemplar secuencias sin participación del jugador. Si nos gustan este tipo de juegos “narrativos”, estamos ante una opción a tener muy en cuenta.

Arreglando el pasado

Nada más ejecutar el juego, una pequeña pantalla de texto nos pondrá en una terrible situación. En un futuro lejano, los viajes temporales han destrozado el mundo. La radiación producida por las partículas liberadas en dichos viajes ha devastado la Tierra. Sin demasiada información, se nos presenta como un operario de una especie de agencia que se dedica a arreglar los desperfectos en la línea temporal causados por los viajes en el tiempo, reconduciendo sucesos que transcurrieron como no debían.

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En concreto, nuestro superior en la agencia se refiere a nosotros como 43, y de inmediato se nos envía a nuestra misión. Alejada de toda esta presentación futurista y catastrófica, la misión transcurre en una mundana ubicación del Reino Unido en 2015. El objetivo de la misma será evitar el fallecimiento de seis personas que viven en un pequeño piso que fue presa de un terrible incendio. Para ello somos transportados a dicho piso, y tendremos acceso al flujo temporal de la semana anterior al trágico final.

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Como se nos informa al principio de la misión, una intervención directa podría incluso empeorar las cosas en el desmadejado tejido temporal, por lo que deberemos ser discretos y concisos. Nos limitaremos a observar lo acontecido en el piso en los últimos 7 días, y en algunas de esas secuencias podremos elegir entre dos decisiones que escinden el flujo temporal, abriendo nuevos sucesos y bloqueando otros. Toda la historia transcurre dentro del piso que terminará siendo pasto de las llamas.

Sus inquilinos serán 3 mujeres y 3 hombres, cuyo destino quedará en nuestras manos. Seremos testigos de sus problemas, la relación entre ellos y sus preocupaciones, a través de una historia muy madura que toca temas cotidianos y del día a día con los que seguro conectamos e incluso en muchos casos nos sentiremos identificados. Los diálogos están muy bien escritos, y pese a narrar una historia muy mundana y sin excesivas pretensiones, logran que el jugador empatice con los personajes e incluso llegue a preocuparse por ellos. Hay lugar para un cierto halo de misterio, y en general la narrativa es muy buena y sabe sostener el protagonismo del videojuego de manera muy sólida.

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Elige tu propia historia

A la hora de jugar, nos moveremos en primera persona por las distintas estancias del piso que visitamos. Contamos con una especie de aparato futurista que nos permite acceder a las distintas secuencias que componen el flujo temporal de la semana anterior al trágico desenlace. Este dispositivo nos permitirá emplear un efectivo y manejable interfaz que nos da acceso a dichas secuencias. Seleccionamos la que queremos contemplar, nos desplazamos a la estancia pertinente donde sucedió, y presenciamos una recreación virtual de dicha secuencia.

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En total tendremos 197 sucesos que componen el flujo temporal, algunos bloqueados en función de las elecciones tomadas. Lo interesante es que podemos acceder a todos los sucesos del flujo temporal en el orden que queramos, pudiendo comenzar por el final y tratando de evitar los acontecimientos que llevaron a ello, seguir la secuencia cronológica en orden para ir desentrañando la historia tal como sucedió, o incluso centrarnos en la línea temporal concreta de uno de los 6 personajes. El interfaz es muy intuitivo y funciona muy bien, y esta libertad para encarar la trama nos ha gustado mucho.

De los 197 sucesos, en 54 se nos presentarán decisiones binarias, de tal modo que podemos optar por dejar que la trama fluya como aconteció, o variarla con otra opción que varía los hechos, y desbloquea otros sucesos en el flujo temporal. Esto resulta muy interesante, porque como ya hemos dicho, podemos viajar por dicho flujo en el sentido y desde la perspectiva que queramos, lo que nos permite sacar deducciones de la manera en que afectarán dichas decisiones desde diversos ángulos.

Para que la jugabilidad no se limite a elegir entre dos opciones en esas 54 decisiones, estaremos limitados a la hora de movernos por el piso. Ciertas estancias requieren una llave, o una combinación, cuyo paradero se nos descubrirá contemplando alguno de los 197 sucesos, debiendo realizar una ligera labor detectivesca. La totalidad del flujo temporal está a disposición del jugador desde el inicio del juego, pero si no tenemos acceso a la estancia donde transcurre un suceso, o no está disponible en el flujo temporal porque no se ha tomado la decisión que lo integra en el flujo principal, no podremos verlo.

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El objetivo final es alterar el flujo temporal para salvar la vida de los 6 inquilinos, para lo que habrá que jugar con las decisiones hasta dar con la solución satisfactoria. El mapa del flujo que nos proporciona el interfaz facilita mucho la labor para conectar sucesos con decisiones, y nos permite cambiar estas directamente sin volver a ver los sucesos. A mayores, hay resoluciones más satisfactorias que otras, de modo que además de salvar la vida de los personajes, les ayudamos con ciertos traumas y problemas. En unas 8-10 horas podremos llegar a salvar a la totalidad de los personajes, aumentando esta cifra hasta las 12-14 si queremos ver todos los sucesos de la línea temporal y arreglar las cosas de la mejor manera posible.

Si no somos jugadores pacientes, el título cuenta con un modo abreviado que se limita a 121 sucesos y 37 decisiones, si bien jugando de esta manera ni tendremos acceso a todas las estancias de la vivienda ni podremos alcanzar el final más satisfactorio. Para que el idioma no suponga una barrera a la hora de disfrutar del título, este cuenta con una estupenda traducción de todos sus textos al castellano, un dato importante dada la enorme carga narrativa del título.

Pasado imperfecto

No estamos ante un título que destaque especialmente en el apartado técnico, al menos no en lo visual. Eternal Threads luce correcto sin más en pantalla, y desde luego sus gráficos no serán una razón de peso a la hora de decantarnos por darle una oportunidad. La recreación del piso donde transcurre el título es sólida, detallada y bien construida, aunque si tenemos en cuenta sus reducidas dimensiones y el hecho de que toda la aventura transcurre únicamente en este escenario la cosa tampoco es para tirar cohetes.

Lo que sí es mejorable son los modelados de los personajes, más allá de que son recreados en una suerte de reproducciones holográficas que reproducen secuencias del pasado. Se podrían haber trabajado más en darles un mejor acabado y unas animaciones más orgánicas y creíbles, sin llegar a ser malos ni empañar en demasía el resultado final del producto.

Lo que sí resulta impecable es el trabajo de doblaje de las voces de los personajes, muy correctos y haciendo una gran labor de dotar de mucha personalidad a quienes prestan su voz. Dichas voces tienen un acento británico muy marcado, como no podría ser de otra manera al transcurrir la aventura en el Reino unido. La banda sonora pasa bastante desapercibida, cayendo el protagonismo sonoro casi por completo en el fantástico trabajo de doblaje.

Pese a que el rendimiento general del título es bastante sólido, moviéndose fluído incluso en equipos no muy punteros, sí que nos hemos encontrado con el problema de que el título se ha colgado 3 veces durante nuestras partidas, provocando un reinicio del equipo donde lo ejecutábamos. Y lo que es más grave, en una ocasión el título se quedó colgado al salir del mismo, perdiendo todos nuestros progresos en ese momento y debiendo volver a comenzar una nueva partida desde el principio. Viendo los comentarios del juego de Steam, no parece un caso generalizado, pero en nuestro caso vivimos esta experiencia negativa.

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