Dungeons
Kaylpso Media y su RealmForge Studios planean recuperar uno de esos exitosos conceptos que datan de hace más una década, Dungeon Keeper. Repasemos algunas de las características que incluirá el título que está por llegar durante el año que viene.
Kalypso Media ha anunciado que publicará un simulador estratégico que se ambientará en esos rincones oscuros plagados de extrañas criaturas, dónde se pueden encontrar damiselas en apuros y mágicos brebajes... No, no estamos hablando de ese tugurio en el que pasaste el fin de semana, si no de las clásicas mazmorras que durante mucho tiempo han sido la ambientación principal de tantos y tantos juegos de rol.
Ahora vendría el momento en el que la inmensa mayoría de jugadores dice algo así: 'Eso me lo conozco, y se llamaba Dungeon Keeper.' Pues no os falta razón. La idea de RealmForge Studios, responsables del desarrollo, parte de los mismos conceptos que pudimos disfrutar de mano de la ya extinta Bullfrog Productions, y es que no son pocos los que guardan gratos recuerdos de cualquiera de las dos entregas de Dungeon Keeper. La siempre atractiva posibilidad de encarnar al malvado, el original planteamiento, una calidad gráfica nada desdeñable para la época, el control indirecto, una segunda entrega de éxito y, lamentablemente, algo que suele elevar aún más el reconocimiento, una tercera entrega que nunca llegaría a nuestros ordenadores. Y es que la sensación de que al cancelar Dungeon Keeper 3 nos arrebataban un derecho como jugadores es el principal motor de que casi todos añoren este título.
La posibilidad de encontrarnos con un sucesor de la idea de Bullfrog es tan atractiva como desafiante, y es que la experiencia general con remakes' de las grandes figuras del pasado acaba con resultados de lo más dispar. El caso reciente de Elemental: War of Magic, intento de recrear al maravilloso Master of Magic, es un ejemplo concreto del miedo que pueden tener los usuarios ante este tipo de incursiones a lo más profundo de la memoria. En ocasiones es mejor dejar las cosas como están, y tener que echar mano de alguna herramienta para volver a disfrutar de los clásicos. Claro que, por otro lado, la posibilidad de que el trabajo de RealmForge Studios se convierta en un magnífico reencuentro con el concepto de Dungeon Keeper es razón más que suficiente como para que decidamos posar nuestra mirada en su desarrollo y seguir con atención este proyecto. Al fin y al cabo, será el tiempo el que termine por darnos o quitarnos la razón.
Si trazamos en una gráfica los éxitos que preceden a otros productos de Kalypso Media tendríamos un plano perfecto de una sensacional montaña rusa, y es que la compañía ha producido buenos juegos, como Tropico 3 o Galactic Civilizations, y otros tantos que difícilmente habrán salido bien parados. A su vez, la desarrolladora no ha destacado formalmente, pero si echamos un vistazo a su curriculum encontraremos nuevos intento de remake', como M.U.D. TV, y algunos títulos para plataformas móviles. Por otro lado, no parece que exista ningún tipo de soporte por parte de algún 'ex-Bullfrog', así que el equipo de desarrollo se involucra de lleno en este proyecto sin contar el apoyo que puede suponer la experiencia de quienes realizaron un trabajo muy similar en su día. Con todo y con eso, la verdad es que los primeros datos que recibimos sobre el título en producción son alentadores en muchos sentidos.
Partimos de la conocida premisa en la cual tomamos el papel de un Dungeon Lord', un ente malvado por naturaleza cuyo único fin en esta vida y la siguiente es hacer todo lo posible porque el mal triunfe sobre el bien. Y mientras algunos malvados se dedican a forjar anillos o invadir pacíficos reinos, nosotros optaremos por crear una mazmorra llena de todo tipo de seres y trampas, con la intención de atraer a los héroes de todo el reino a su interior y allí darles su merecido. Sin embargo nuestro malvado protagonista es a su vez una víctima de sus más profundos sentimientos, y es que el argumento nos contará como nuestra ex-novia, más malvada aún que nosotros, se las ha arreglado para dejarnos a la altura del betún, y que ahora mismo ocupemos el puesto más bajo de la jerarquía maléfica. Si queremos recuperar nuestra posición y reconocimiento, tendremos que trabajar duro.
No será tan sencillo, porque otros tres Dungeon Lords' serán el obstáculo en nuestro camino al éxito. La fama en este submundo se mide en término de almas, y es que la esencia que se puede recolectar a partir de las almas de los mortales es lo que distingue a un Dungeon Lord' respetable de un simple villano de pacotilla. De esta manera, tendremos que intentar atraer tantos héroes como sea posible, y una vez se hayan introducido en nuestra compleja mazmorra, raptarlos y recolectar la esencia que guardan en lo más profundo de su interior. Por eso, y aunque al nivel de arquetipos debería ser al contrario, no se puede decir que nuestro objetivo sea derrotar a los héroes, sino atraer a tantos como podamos para que el poder de nuestro protagonista siga creciendo. En su lugar, los verdaderos enemigos a batir son el resto de competidores y a nuestra vil ex-novia, dando paso a una venganza amorosa narrada en cerca de 20 misiones.
Atraer a los más valientes del reino no será una tarea fácil, y nuestro calabozo tendrá que ser lo suficientemente emocionante y aterrador como para que puedan considerar asaltarlo. De igual manera, las recompensas que esperen encontrar dentro tendrán que ser igualmente satisfactorias. El objetivo de Dungeons es crear una mazmorra que cumpla las exigencias de los distintos héroes, 10 en total, desde el mismo momento en el que accedan a su interior, para así atraerlos al punto concreto donde extraer su esencia. No será un trabajo trivial, porque se tendrán en cuenta numerosos aspectos: cantidad de enemigos, premios, decoración del interior si queremos llegar al éxito tendremos que convertirnos en el mejor anfitrión para héroes, de manera que nuestro entramado laberíntico goce de fama y prestigio, y nuestro nombre se asocie a la pura maldad. Cada fase superada nos permitirá gastar puntos en nuevas habilidades y características, consiguiendo ventajas para las misiones venideras.
Casi toda la emoción residirá en la planificación del propio calabozo, y tendremos que tener en cuenta casi todo lo relativo al mismo. La idea es que los héroes sean capturados con vida, lo que no ocurrirá si nos enfrentamos a ellos o les colocamos demasiados esbirros en su camino. Si la cantidad de retos, o la decoración, son escasas, los valientes optarán por irse de nuestro proyecto arquitectónico antes de que podamos apurarnos a extraer sus almas. Cada uno de los 10 héroes tendrá sus propias preferencias, así que no se necesita lo mismo para atraer a un guerrero que a un estudioso de la magia. Contaremos con 15 tipos de criaturas, aunque algunas tendrán que desbloquearse al superar ciertas fases. Asimismo, existirán tres tipos de entorno distintos: volcánico, rocoso y ladrillo. De igual forma, no todas las fases se limitarán a un único nivel de profundidad del calabozo, sino que pueden consistir en entramados que se extiendan en varios pisos.
El manejo diferirá de lo que Dungeon Keeper ofrecía, y es que en principio no nos encontraremos ante un manejo indirecto, como se veía en el título de Bullfrog y en otros juegos como Evil Genius o Dwarf Fortress. En esta ocasión tendremos que controlar a nuestros sirvientes de forma directa, al puro estilo de los juegos de estrategia en tiempo real, y en este control se incluye la propia forma adoptada por nuestro Dungeon Lord', quien podrá pasearse por el complejo calabozo a placer, e incluso interactuar con los distintos elementos que hemos construido en el mismo. Esto incluye la posibilidad de enfrentarnos cara a cara con los héroes que acceden a la mazmorra, pero nuestro poder será considerablemente mayor que el suyo, y de un muerto no se puede extraer ninguna esencia que valga. Eso sí, ir golpeando a nuestros esbirros y dando patadas a las puertas puede llegar a ser una experiencia divertida y acorde con el trasfondo del sujeto protagonista.
Por lo que podemos ver en las capturas, el diseño también se asemeja bastante al estilo marcado por Dungeon Keeper, aunque con gráficos más actualizados. Sin embargo, la posibilidad de considerar Dungeons como un sucesor pasa por puntos más altos que el propio aspecto visual, y es que todos recordarán los grandes momentos que se podían pasar con ese juego. Acabamos con uno de los mayores puntos en contra que se puede destacar en este momento consistiría en la total ausencia de un modo multi-jugador, lo que sin duda habría sido un golpe de efecto considerable por parte de Kalypso y RealmForge. Ahora, solamente nos queda esperar al año que viene para empezar a construir mazmorras y extraer almas Que la espera sea leve .
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