Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA

Doshin the Giant (GameCube)

En Japón están a punto de recibir la última locura salida de la factoría Nintendo: Doshin the Gigant. ¿Un juego raro? Sin duda lo parece, pero también una estupenda mezcla de conceptos. El resultado es algo parecido a Black and White, Populous y Mario, con una estética muy personal.

En Japón están a punto de recibir la última locura salida de la factoría Nintendo: Doshin the Gigant. ¿Un juego raro? Sin duda lo parece, pero también una estupenda mezcla de conceptos. El resultado es algo parecido a meter en una coctelera el viejo y maravilloso concepto de Populus, un poquito de Black and White, algo de Mario y una estética muy "japonesa".  En Japón lo esperan con bastante ansia, pues tuvieron la oportunidad de probarlo  en del extinto periférico 64DD. Y todo aquel que lo ha jugado, espera con los brazos abiertos esta secuela (que no remake) de tan maravilloso juego. Al igual que quien escribe este avance...

... Y no es de extrañar. Si tenemos en cuenta que Nintendo GameCube va a recibir una versión muy mejorada en todos sus aspectos que la que algunos disfrutamos en el 64 DD, no podemos más que sonreír y esperar lo mejor.



Un volcán en erupción, ¡huye!
Ahora nos piden que socavemos un poco...

El juego, básicamente, consiste en subsistir. Tu eres Doshin, un enorme ser amarillo que disfrutas de la compañía humana y con unos poderes extraordinarios. Estos te permitirán realizar innumerables acciones  tanto para el bien como para el mal. Tu has si ser maligno (intimidando y arrasando por allí donde pases) o, por el contrario, una deidad benefactora y servil con los aldeanos. E ti depende la elección.

... y ahora que levantemos un pequeño montículo

Pero ojo, que no es tan sencillo. La mayoría podría decidir ser totalmente bueno o malo, pero eso puede tener consecuencias desastrosas para ti. Cuando haces demasiadas acciones positivas, recibes amor por parte de los habitantes del lugar (representado por corazones) y aumentas de tamaño. Y si creces demasiado, puedes transformarte en un peligro para la comunidad: pisar accidentalmente una casa o a una inocente niña o caer rodando sobre el pueblo son acciones demasiado habituales cuando ves  desde muy arriba. Y es que ser grande tiene sus ventajas e inconvenientes. Desde luego se vive en la soledad más absoluta, porque nadie se fía de tener una mole gigantesca cerca por el riesgo inmanente de ser aplastado. Pero claro, tienes tu corazoncito

Vista general de todo el mundo por el que vagar

Aunque claro, ser malo siempre, tampoco es buena solución, ya que los aldeanos te temerán y odiarán, te atacarán y tu tamaño irá decreciendo paulatinamente hasta que desaparezcas. Así que tendrás que cuidar el comportamiento de tu gigante amarillo (o rojo según la ocasión) para conseguir pasarte el juego. No diré cual es el objetivo último para no desvelar la sorpresa, pero os aseguro que a más de uno lo dejará, cuan menos, estupefacto.

Los lugareños no paran de pedir y pedir

Gráficamente el juego ha mejorado muchísimo desde la versión de N64. La alta resolución le ha sentado bastante bien a nuestro Doshin, así como los 60 frames constantes. Las texturas del suelo resultan muy reales, aunque los aldeanos, los árboles y el propio Doshin no parecen excesivamente trabajados. De todos modos, todo sea dicho, no era la intención de los programadores de Param (first party de Nintendo), pues buscaban un aspecto muy de cuento mitológico japonés, cosa que sin duda lo han conseguido. En contrapartida, los efectos los rayos de luz reflejados en la cámara, el mar rompiendo en la costa o el paso a escasos centímetro del objetivo de una gaviota perfectamente recreadas son detalles impagables que muestran el notable nivel técnico del juego.

Además de dioses, somos botánicos

En cuento a sonido... Pues los típicos sonidos discretos y efectistas, llenos de grititos, cánticos, onomatopeyas, crujidos y demás vocecillas de los juegos Nintendo (como en animal Leader o Animal Forrest Plus). Y la música consiste en ritmos muy hawaianos mezclados con los aires místicos nipones de los cuentos. Desde luego no resulta sobrecogedor el aspecto sooro del juego, pero tampoco queda cojo.

En cuanto a la jugabilidad, entramos en el punto fuerte de Doshin. Manejar al gigante costaba más de lo recomendable en la versión del 64DD por culpa de un bajísimo frame rate, cosa solucionada en la Nintendo GameCube. Por lo demás, la experiencia de jugar con el gigantón amarillo es única.



Doshin, ¡tápate, por Dios!
Los habitantes quieren mucho a nuestro gigante

El número de acciones que puedes ejecutar es bastante amplio. Puedes elevar y hacer descender el nivel del suelo a tu antojo para crear protecciones naturales en la aldea, cambiar el curso de un río para evitar inundaciones o favorecer las nuevas plantaciones. Puedes mover cosas (tales como árboles, casas, cercados), personas (para sacarlos de más de un apuro) y animales (siempre hay ovejas descarriadas). Puedes derribar elementos del decorado (prácticamente todo), cavar en busca de hongos, nadar en busca de peces que comer, deslizarte montaña abajo cual Mario por un tobogán, saltar barrancos, construir puentes, detener tornados y un largo etcétera que vamos descubriendo poco a poco... y que os sorprenderán.

Esto siendo el bonachón amarillo, pero ¿y transformado en el violento y colorado alter ego maligno de Doshin? Pues podremos volar (más bien planear), lanzar bolas de energía o separar las aguas cual bíblico Moisés entre otros muchos movimientos.

Por cierto, que Doshin no nos obedece fielmente como perrito faldero. Pese a que lo manejamos con el stick, en ciertas situaciones se resistirá lo suyo y llegará a actuar por libre.

Doshin descansa antes de volver al tajo
Si se vuelve malo, le salen alas

Un último detalle, la interactuación con los aldeanos será vital. Ni habrá que obedecer ciegamente sus súplicas, ni desoírlas sistemáticamente. Y nos hablan a través de iconos. Por ejemplo, si necesitan ganado, saldrá una oveja en los bocadillos por los que se comunican. Fácil, intuitivo y muy útil de cara a una posible adaptación al mercado occidental.

La verdad es que esta joya del programador Kazutoshi Iida aparenta ser mucho menos que lo que es. Miyamoto ha confirmado que saldrá en Estados unidos y que depende de su aceptación, lo hará en Europa. Esperemos que los norteamericanos lo valoren en su justa medida y que podamos disfrutar en el viejo continente con la eterna disputa entre el Bien y el Mal del gigante Doshin.

Un buen chapuzón antes de currar nunca viene mal

Doshin the Giant

  • GC
  • Estrategia
Controla a un gigante y cumple los deseos de todos los habitantes de una isla. En el caso contrario, tu respetable figura será vista como la de un demonio sin escrúpulos...
Carátula de Doshin the Giant
7