Custom Robo, Impresiones (GameCube)

Custom Robo es un gran desconocido en Occidente a pesar de que esta versión es la tercera, contando con dos títulos anteriores en Nintendo 64, pero eso será una situación a la que Nintendo parece que pondrá fin en breve. Mientras, este impresiones servirá para hacer boca.

Custom Robo es una saga que Nintendo comenzó en la época de Nintendo 64 y que se quedó en Japón, con dos partes que forman parte de una librería oculta para muchos de los usuarios de la 64 bits. Y es que aunque no llega a la proporción de joyas niponas que tienen consolas como Saturn, N64 atesoró algunos títulos que sólo los nipones y los muy interesados en la consola pudieron disfrutar.

Ahora que el titulo acaba de salir en Japón, ha llegado el momento de valorar que es lo que va a ofrecer a un público que desconoce sus mecánicas y su mecánica de juego, que en realidad es bastante simple: robots montados por los jugadores luchando en campos de batalla 3D para hasta 4 jugadores.

Dicho así suena simple, quizás incluso demasiado simple, pero la verdad es que es el concepto básico que alimenta este título es ese. Cada Robot está dividido en diferentes partes, a las que el jugador puede optar según vaya avanzando en los combates. Cada una de estas piezas afecta a un movimiento específico, cambiando su daño, alcance, modo de empleo, durabilidad... hay cientos de estas piezas, por lo que la combinación de robots que se pueden montar es muy grande.

Por ejemplo, una de las piezas responde al disparo principal, que es un disparo simple estilo ametralladora y de daño escaso, pero que resulta extremadamente útil de cara a mantener cierto equilibrio en los combates. Dependiendo de la pieza que pongas obtendrás nuevos tipos de disparos. Lo mismo sucede con los misiles, que se pueden encontrar teledirigidos, más potentes, con más radio de acción... Como es de suponer, a lo largo del juego se irán encontrando piezas cada vez mas especiales con los que conseguir efectos devastadores, a la vez que tus enemigos se van haciendo más fuerte.

Esta simplicidad en el combate asemeja a Custom Robo en cierto modo a Super Smash Bros Melee, y es ciertamente un juego en el que se deberían fijar los amantes del título de Hal. Los combates se llevan a cabo en pequeños campos de combate tridimensionales, aunque con una perspectiva aérea en vez de semi-2D. Gracias a esto, los elementos que forman parte del escenario juegan un papel fundamental, pudiendo usar muros y estructuras como cobertura ante el disparo enemigo.

La competición sana, que suele ser un argumento recurrente en muchos juegos de Nintendo, es muy patente en Custom Robo, ya que cada jugador puede construir su Robo y llevarlo a casa de algún amigo para librar combates en luchas individuales o torneos. El hecho de admitir hasta 4 jugadores, sumado a la mencionada capacidad de llevar cada uno a su propio luchador, hace imaginar de inmediato una rutina consistente en conseguir el mejor Robo en casa para luego ponerlo a prueba frente a tus amigos, algo que funciona muy bien con títulos como Pokémon.

Se ha mencionado a Super Smash Bros, como referencia de multiplayer a 4 y por la simplicidad de los combates, que se reducen a combinación de botones simples, sin más complicaciones. Pero las semejanzas acaban ahí, ya que la perspectiva usada hace da a Custom Robo una jugabilidad que se asemeja a "la caza del ratón". Lejos del "melee" nunca mejor dicho en el que se suelen enzarzar los jugadores en SSBM, Custom Robo es más reposado, buscando esquivar y contraatacar, acorralando al rival por los laberínticos campos de batalla. Los jugadores se suelen quedar observando mutua y tensamente dando vueltas por el campo de batalla hasta que se detecte el momento justo de lanzar el ataque.

Hace unas semanas, se tuvo la oportunidad de analizar Gotcha Force, un título que tiene mucho en común con este en lo que se refiere a robots, piezas intercambiables, coleccionismo y simplicidad al combate. Tal y como se apuntó, al título de Capcom lo mató el uso de la cámara que si bien era muy espectacular, perdía completamente al jugador. En Custom Robo se apuesta por la visión aérea de toda la vida, que si bien no queda tan bien en capturas y no permite apreciar del todo el gran modelado y detallismo de los Robo, sirve infinitamente mejor para jugar a esta clase de títulos.

Para variar la mecánica de montar y combatir, Custom Robo GC incluye un pequeño RPG al igual que Pokémon Colesseum, del que no se puede decir mucho por la barrera del idioma, excepto que tiene un numero grupo de féminas con diseños bastante curiosos, y que parece que tiene un tono entre desenfadado y serio, con diversas viñetas de estados del animo sobre las conversaciones entre los personajes. No será Final Fantasy, pero parece que se tratará de un interesante añadido especialmente de cara a los que tengan pensado adquirirlo por el monojugador.