Bonk's Revenge (GameCube)

Desde las brumas de la historia, reaparece la mascota por autonomasia de Turbo Grafx: Bonk, para darse un garbeo por la nueva generación y ver como han cambiado las cosas desde entonces.

En la época de las 16 bits, cuando el nuevo mercado de las consolas estaba consolidado gracias a Nintendo y su NES, todo aquellos que lanzaron una máquina de videojuegos intentaron copiar un poco el modelo de la consola que tantas ventas había reportado a la compañía de Kyoto. Por supuesto, cada una con su estilo y sus ideas, pero había patrones comunes, y uno de ellos era la necesidad de tener una mascota, un personaje reconocible de cara al público y a ser posible, un plataformas.

Nintendo ya tenía a Mario, Sega se sacó a Sonic de la manga en Mega-Drive, pero había otras compañías en la contienda, particularmente NEC y su Turbo Grafx, que también buscaba hacerse con un hueco en el mercado. El problema es que NEC es una compañía de hardware, no de software, por lo que no contaba con la capacidad creadora que tenían sus competidores, ni podían lanzar por sí mismo juegos, mucho menos hacerse una mascota a medida, así que tiró de la compañía con la que se había aliado para llevar su consola a lo más alto: Hudson.

Los creadores de Bomberman en su momento decidieron que para dar a la consola su propia mascota, nada mejor que rescatar a Bonk, un personaje que nació en la época de NES protagonizando un juego llamado "Bonk's Adventure". Aprovechando las virtudes técnicas de la consola, se le dio un completo lavado de cara al juego, que ganó en color, detalles y música, realzando sus virtudes.

El protagonista, Bonk, tiene su gancho: una especie de bebé cabezón con una fila de dientes impresionante y vestido de cavernícola. Su misión en el juego será rescatar a la princesa Za,  además de tener que luchar contra sus amigos (todos dinosaurios) que han sido sometidos a un lavado de cerebro por parte del rey Drool. Bonk usa como armas su propia cabeza y lo que él llama "Poder Super Neanderthal" que debió de ocurrírsele a algún miembro del estudio original en plena sesión de "Brainstorming" con mucho sake de por medio.

Básicamente, tan pintoresco nombre se corresponde con la capacidad de Bonk de engullir trozos de carne para transformarse en una versión más poderosa de él mismo. Un trozo de carne hará que el protagonista se transforme en una especie de gorila con siniestra expresión, que tendrá como mayor atributo un mayor poder de golpear con la cabeza. Si se come otro trozo de carne, se convertirá en un Super Neanderthal, que pondrá en el rostro del afable Bonk una mueca psicópata, mientras arrasa a diestro y siniestro con todo lo que se le ponga de por medio.

La técnica para acabar con los enemigos es muy particular. Bonk tiene dos opciones: lanzar un cabezazo frontal contra un enemigo, o saltar y caer de cabeza. En ambos casos el enemigo saldrá posiblemente disparado hacía arriba, por lo que podrás poner en práctica una de las particularidades de este juego: el toque de pelota. En medida de que el enemigo esté en el aire, puedes saltar y usar tu cabeza para subirlo de nuevo en el aire. Si lo haces con el ángulo correcto, te puedes pasar todo el tiempo que quieras pegando toques, cuantos más toques, más puntos, así hasta a un límite.

Otra de las habilidades ofensivas de Bonk es la de golpear al suelo con la cabeza, lo que provocará un temblor que paralizará a los enemigos, pudiendo dar buena cuenta de ellos, o bien permitiendo pasar por su lado en el caso de que no sea posible acabar con ellos de forma normal. Según su estado de "evolución" el temblor de tierra será mucho mayor, acaparando más pantalla.

Hudson ha aprovechado la nueva generación para darle un lavado de cara a uno de esos juegos emblemáticos. Como ya hiciera con Star Soldier o Adventure Island, es un lavado de cara parcial, nada de sacarse unas 3D de la manga, sino una pequeña puesta al día que sirva como homenaje y despierte la nostalgia de los potenciales jugadores. La mecánica sigue siendo la misma, un plataformas/acción 2D al más puro estilo tradicional, ideal para los amantes de la época de los 16 bits en donde este género alcanzó su apogeo.

Técnicamente, no son los gráficos 2D más brillantes que vas a ver en GameCube ni mucho menos (tal honor corresponde a Viewtiful Joe), pero son muy agradables y deja en buen lugar el trabajo realizado anteriormente en Turbo Grafx. Los paisajes usan colores primarios y tienen un aspecto entrañablemente infantil, llenos de color, aunque están carentes de cualquier tipo de complejidad.

Uno de los aspectos más renovados es el propio Bonk, que al igual que el resto de los personajes, ha ganado un aspecto tridimensional. Esto hace resaltar uno de los puntos más interesantes de este personaje, que es la gran expresividad que siempre ha demostrado gracias a lo visible que aparece su rostro. Gracias al nuevo aspecto, Bonk ha ganado en gestos y expresiones, además, Hudson ha aprovechado para introducir un curioso bonus en el que puedes cambiar los ojos del personaje, pudiendo jugar con un Bonk totalmente cambiado, luciendo gafas de sol, o cualquier otra de las 30 variaciones que puede haber.

En cuanto al juego en sí, este remake de PC Genjin resulta un mejor juego que el original. Puede que un principio no te convenza el nuevo aspecto de Bonk y te quedes con la nostalgia de las 2D puras que lucía el juego originalmente, pero si juegas a los dos, comprobarás de inmediato que el remake es una experiencia más refinada. En el modo normal, Hudson ha reorganizado los niveles, los ha hecho más cortos, ha hecho a Bonk más rápido y ha eliminado algunos de los aspectos que hacían el juego original mucho más complicado de lo que es su remake.

Pasando el juego accederás a otros dos modos de juego, que aumentan considerablemente la dificultad del título, alargando así su vida. Con todo, es un juego que te puede causar algún problema si no estás acostumbrado a esta clase de juegos. Nuevamente, Viewtiful Joe le gana en cuanto a su dificultad (pero es que Viewtiful Joe estaba pensando como una versión a la décima potencia de la clase de juegos que representa Bonk).

En definitiva, PC Genjin es una pequeña joya, con un precio asequible y totalmete apta para la importación (ya que no habrá otra manera de adquirirlo). Es una versión revisada y muy digna de un pedacito de historia de los videojuegos, y como tal, es una pieza de coleccionista, amante de los juegos 2D, o simplemente, algo entretenido con el que sacar más diversión a tu GameCube.