Alan Wake: American Nightmare

Tiros, una nueva perspectiva excéntrica, y un argumento desquiciado. El deseado regreso del oscuro escritor Alan Wake abandonará algunas partes de su suspense terrorífico tradicional y disparará hacia una aventura descargable repleta de acción. La noticia no ha cuajado del todo bien en su enorme comunidad de seguidores, pero no todo está perdido, "no decepcionará", dice Remedy. De Stephen King a Quentin Tarantino, así califica la desarrolladora el salto que supone este spin-off, más centrado en la jugabilidad pura.

Actualizado a 2 de julio de 2017 02:44 CEST

Cuando el entrañable Alan caminaba despacio por los oscuros bosques de su última gran epopeya de terror, linterna en mano y haciendo frente a todos los demonios que lo atormentaban, no fueron pocos los que se enamoraron de forma directa del juego, una obra con muchos años en stand by que acabó cautivando por su demoledora y agria trama, con el escritor buscando desesperadamente a su esposa en el idílico Bright Falls. Para Remedy Entertainment, Alan Wake tenía algunos errores que pulir en materia de jugabilidad y una puesta al día no era suficiente. La compañía acaba de anunciar este Alan Wake: American Nightmare, una reinterpretación del universo opresor inspirado directamente de los marcos de las películas de Hitchcok, los libros de Stephen King, y leyendas y signos culturales norteamericanos inmortales. Los VGA de hace unos días nos dejaron ver en qué consistirá el spin-off hecho DLC, con una duración prevista de unas 5 o 6 horas:

Este tráiler extendido nos presenta a Mr. Scratch, el psicópata asesino y torturador rival de esta nueva aventura que llegará en formato descargable a Xbox 360 en los próximos meses y que abandona por completo su identidad de película/libro de terror serio para abrazarse más bien a nombres como Abierto hasta el amanecer, Grindhouse, Hostel o Saw. Un juego de disparos profundo y divertido, que mantuviera la identidad de la marca pero le supusiera una nueva interpretación, más desenfadada, más gore y macabra, con una trama y escenas más extravagantes. Ya el personaje de Scratch apareciendo en los monitores que contempla Alan lo deja claro: el humor negro será otra de las claves. Siguiendo con referencias para empezar, dentro de los propios videojuegos Remedy no ha dudado en contemplar de cerca el trabajo de autores consagrados como Suda 51, que trajo este mes de junio el polémico Shadows of the Damned y ya trabaja muy duro en Lollypop Chainsaw.

Desde luego, la premisa de programación y creación era clara en Remedy al confeccionar American Nightmare: Alan ahora manejará más armas dada la familiarización que tiene con éstas y la pérdida del sentido ético tras los acontecimientos del juego anterior, se las verá con más variedad de criaturas y tendrá todo tipo de movimientos y ataques especiales. Sobre los enemigos, aún no hay muchos datos pero sus desarrolladores han confirmado que algunos se dividirán en dos al ser disparados, que otros se deformarán y mutarán, habrá los que sean tan ágiles que nos puedan acechar por paredes y techos... La linterna volverá a ser una pieza clave en cualquier enfrentamiento, el arma que debilita a las criaturas de la noche para que podamos acabar a bocajarro con todo lo que se mueva, que no será poco ni similar. Se quiere acabar con la repetitividad y el camino de la acción no es mala opción para ello.

El argumento, menos importante en este episodio adicional según cuentan sus responsables, narrará uno de los relatos que Alan escribió de joven para el programa Night Springs. El escritor se verá dentro de su propia y macabra prosa, ambientada en el desierto de Arizona esta vez en vez de en las colinas boscosas y lagos del noroeste estadounidense que nos enseñó el anterior título. Su trasiego empezará en las afueras de un bar-motel de carretera, con brillantes luces de neón y cierto aire a estética de cómic, lo que crea un contraste cuánto menos interesante con la aventura original. Habrá explosiones y muchas armas, empezando por la nueva ballesta, lenta de recargar pero que nos dejará matar sin usar primero la linterna o antorcha. Habrá algunas excentricidades prometidas entre el arsenal, como sierras eléctricas y otras sorpresas, muy afines a la estética gore que buscará todo el juego.

Eso sí, pese a ser un descargable, American Nightmare no ha descuidado ni su jugabilidad ni sus valores de producción. Por ejemplo la música que acompaña a toda la aventura es de licencia, con temas de Kasabian y Old Gods of Asgard, entre muchos otros reconocibles. Tampoco falla, según lo que se ha podido ver, su apartado gráfico, más centrado ahora en las animaciones y la expresividad general, con una oscuridad no tan latente, buena iluminación y bastante nivel de detalle tanto en interiores como en los entornos al aire libre. Las texturas y la interacción con los escenarios parecen haber ganado varios enteros, según los primeros gameplay. La gran variedad de criaturas que saldrán a nuestro paso, sus formas de morir, comportamientos y mutaciones son la otra faceta de American Nightmare, que tiene preparados unos diseños chirriantes y psicodélicos que aseguran poner los vellos de punta hasta a los más insensibles.

El personaje y carácter de Mr. Scratch darán forma a la parte más trascendental del argumento, ya que servirá de alter ego de Wake y Alice volverá a ser la víctima de esta demente historia de terror. El co-protagonista es inteligente, controla los pasos del escritor y nos lo hará pasar verdaderamente mal, en situaciones límite que nos pondrán contra el tiempo, en algún que otro puzle a resolver y hasta dentro de tramos con escasez de munición. Remedy ha querido que ante todo sea un juego intenso, no será demasiado largo y se ha apostado por la variedad de situaciones y la velocidad, tanto en el dominio de la jugabilidad como en las satisfacciones que ofrezca, que prometen ser muchas. De hecho, el sistema de alumbrado, apuntado y disparo cambiará ligeramente, para adaptarse a toda la ola de nuevos enemigos que se nos presentarán. En cuanto al ritmo de juego, habrá momentos de cámara lenta para que podamos hacer esquivos, tiroteos múltiples, elementos que nos permitan iluminar zonas con mayor rapidez, etc.

Por otra parte, además de esta historia central, Alan Wake: American Nightmare contará con el modo Action Arcade, un survival de oleada clásico donde tendremos que sobrevivir a todos los enemigos durante varios minutos -de momento se ha dicho que habrá rondas de hasta 10- para anotar el máximo de puntos posible, dejando constancia de nuestras marcas en rankings online. El control del armamento, la potencia y los escenarios tendrán aquí un valor esencial, es una modalidad aún más ágil que la principal. El escenario que se ha visto de momento es un cementerio donde Alan debe aguantar hasta que amanezca y la luz le permita escapar. Todavía quedan otros parámetros por confirmar en este sentido, como su posible modalidad online y el papel de Barry en esta nueva visión de un juego que marcó a muchísimos jugadores.

Sin lugar a dudas, el paso que acaba de anunciar Remedy Entertainment con esta franquicia es atrevido e inspirado, para nada continuista y nacido del feedback de muchos usuarios que pedían más acción. Gustará más o menos la línea por donde se va a llevar próximamente al protagonista y sus allegados, pero desde luego Alan Wake busca convertirse en algo más que una única entrega notable, busca ser una marca con tirón y variedad de capítulos, y American Nightmare puede suponerle un nuevo respaldo por quienes no disfrutaron tanto de la primera parte. Hay que tener en cuenta que es un descargable que llegará a un precio inferior del de un juego en formato físico, es una reinterpretación de la dinámica de juego Alan Wake y un episodio que busca ofrecer unas horas más sobre este universo, eso sí, desde otro prisma. Ya no es oscuro y tenebroso, más bien es bizarro. Muy pronto veremos si mantiene su mejor luz y no se apaga la linterna que tan bien supo encender el año pasado.