Act of War: Direct Action, Impresiones

La situación es insostenible. Tras varios años de inestabilidad, la 'guerra energética' ha estallado. La drástica reducción de las compañías petrolíferas en el número de barriles diarios y los ataques terroristas a las plantas de producción, ha hecho que el precio de la gasolina se dispare de forma exponencial. Los gobiernos se culpan entre ellos mientras la economía mundial se resiente por segundos.

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Puede parecer una predicción de un futurólogo, pero no es más que el argumento de Act of War: Direct Action, el próximo título de estrategia de Eugen Systems distribuido por Atari. El juego nos sitúa en un futuro muy próximo a cargo de la Brigada del Ejército de los Estados Unidos con la misión de equilibrar la peligrosa guerra por el petróleo.

Un militar de alto rango

Nuestro pasado como comandante del Primer Destacamento de las Fuerzas Especiales Delta nos hace hombre de confianza del mismísimo presidente de los Estados Unidos de América y rápidamente nos nombran líder de una nueva fuerza antiterrorista: Fuerza Espacial Garra.

Este hilo argumental nos introduce en lo que podemos esperar de Act of War. Toda la trama argumental ha sido creada por Dale Brown, conocido autor estadounidense de bestsellers de corte bélico y escritor del NY Times. Para dotar de aún más realismo al título se han grabado más de 40 minutos de escenas de vídeo con un gran detalle que nos sitúa en muchos de los lugares más conocidos del planeta.

Real como la vida misma

Éste es uno de los puntos fuertes del juego: Batallas fugaces contra grupos terroristas que intentan asaltar el Buckingham Palace, amenazas suicidas contra la Casa Blanca o vernos obligados a defender de ataques aéreos la Plaza Roja de Moscú. Todos los edificios emblemáticos serán fácilmente reconocibles gracias al potente motor gráfico del que hace gala Act of War, un juego no apto para todos los ordenadores.

Para los más aficionados a los temas militares, será un placer poder contar con unidades reales, más algunas diseñadas para la ocasión: Sobrevolar la base terrorista de San Francisco con un invisible B2 o preparar un ataque con varios BlackHawks en pleno centro de Libia son ejemplos de lo fidedigno que llega a resultar Act of War.

Alto componente táctico

Con algunos detalles que recuerdan al clásico C&C: Red Alert (salvando las distancias), los ataques aéreos cobran vital importancia, aunque para dinamizar el juego se ha prestado gran atención a las unidades más básicas. En un intento de ampliar la importancia de los soldados de a pie más allá de los primeros minutos de cada partida, sus virtudes tácticas serán decisivas y ejercer un perfecto control sobre ellas no será tarea fácil.

Podremos agrupar varias unidades y comandarlas por una de ellas, lo que mejorará los movimientos del grupo, pero si este líder cae en combate, nos veremos en serios apuros. Una solución es resguardarlos en algún edificio a la espera de refuerzos, pero un radar de calor enemigo puede delatar su posición y les bastará con destruir el edificio para deshacerse de todos. O podrán atacar al enemigo desde puestos de control elevados, aunque un simple ataque aéreo acabaría con ellos.

Primeras impresiones

En la demo distribuida por Atari podemos hacernos una idea de lo que podemos esperar en el título definitivo. Nos situamos en una zona árida en la que estamos obligados a desembarcar para desestabilizar las fuerzas enemigas. En un primer momento sólo controlamos los ataques aéreos con el objetivo de acabar con las bases situadas en la playa para poder desembarcar a nuestras tropas. En pocos segundos los ataques aéreos no dejarán de sucederse hasta dejar completamente limpia la playa.

Al tratarse de una fase de prueba, en cuanto lleguen las tropas a la orilla, las construcciones se hacen solas y bastará con crear más y más soldados y pequeños vehículos acorazados para acabar con los primeros acosos enemigos. Todo lo que nos vayamos encontrando a nuestro paso puede ser arrasado. Los tanques tirarán árboles a su paso y habrá que destruir muros para hacernos paso o tirar edificios abajo si queremos que las unidades de más tamaño.

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Para disfrutar de Act of War en todo su esplendor necesitaremos un ordenador de gran potencia. En la presentación del juego en España utilizaron un P4 a 3.0 GHz, 512 RAM y una ATI Radeon 9800 XT y lucía realmente magnífico, sobre todo cuando mostraban el modelado de edificios como el Big Ben o el Capitolio, aunque desde Eugen System asegura que los requerimientos mínimos serán un Pentium 4 1.5 GHz, 256 RAM y una tarjeta gráfica de 64 megas.

Act of War sale a la venta el próximo 15 de Marzo, y es sin duda una de las grandes apuestas de Atari para PC en el presente año. La primera toma de contacto nos deja un muy buen sabor de boca, veremos en qué queda el resultado final.