Ciencia
Ni de Minecraft ni de Palworld: esta armadura de piña es real y resiste el fuego
Un Youtuber demuestra las propiedades de disipación del calor y las llamas de la piña, creando un peculiar escudo e incluso un traje de cáscaras de de esta fruta.
Si alguien te hablara de una armadura de piña, seguramente pensarías en un objeto sacado de Minecraft o Palworld, algún ropaje improvisado dentro de un mundo virtual de supervivencia y crafteo. Pero lo sorprendente es que este atuendo no es un ítem de videojuego, sino una creación real. Inspirado por un experimento viral en el que una bola de metal al rojo vivo no lograba atravesar la cáscara de una piña, un YouTuber decidió llevar la idea al siguiente nivel: construir un escudo con cáscaras de piña para poner a prueba su extraordinaria resistencia al fuego. Tras el resultado positivo, decidió llevar la proeza aún más allá, creando esta armadura casi ignífuga a base de piñas.
De la cocina a la forja: ¿puede una piña convertirse en un escudo y un traje ignífugo?
Aunque parezca sacado de un videojuego tipo Minecraft, el escudo de piña es una realidad que demuestra las peculiares propiedades de la cáscara de este alimento. Todo comenzó con un experimento viral en el que una bola de metal al rojo vivo no pudo atravesar la cáscara de una piña, lo que llevó al YouTuber Tyler Csatari a preguntarse hasta qué punto este material natural podía resistir el fuego.
Gracias a una combinación de curiosidad y creatividad, decidió cortar varias cáscaras de piña y unirlas para crear un escudo. Para su sorpresa, el objeto resultante demostró ser increíblemente eficaz, aguantando llamas directas de un lanzallamas y altas temperaturas sin desintegrarse ni quemarse con facilidad.
Pero el experimento no terminó ahí. Animado por el éxito del escudo, el creador de contenido llevó la prueba a un nuevo nivel y se embarcó en un desafío todavía más arriesgado: fabricar un traje ignífugo usando cáscaras de piña. En el vídeo podemos ver cómo utiliza las cáscaras como la capa externa de esta singular armadura. Convencido del resultado tras el experimento exitoso previo con el escudo, Tyler se volvió a prestar voluntario para poner a prueba la capacidad de aislamiento térmico de la piña. Tras someterse a pequeñas exposiciones al fuego vía chorros de lanzallamas, el traje demostró ser sorprendentemente resistente, evitando que el calor extremo y las llamas pudiesen abrasar al “conejillo de Indias”, validando la curiosa teoría que había planteado.
La clave de esta resistencia parece estar en la composición de la cáscara de piña. Este material es rico en celulosa y lignina, dos sustancias que actúan como una barrera contra el fuego, ralentizando la combustión y disipando el calor. Si bien el escudo y el traje de piña no están cerca de reemplazar a los materiales ignífugos convencionales —no esperéis ver cuerpos de bomberos con estos peculiares “trajes de piña” en un futuro— este hallazgo tan interesante podría abrir la puerta a nuevas investigaciones sobre su posible uso en la fabricación de tejidos o microfibras de origen natural y sostenible.
Más allá de lo llamativo del experimento, tanto el escudo como la armadura de piña demuestran que la naturaleza puede albergar soluciones ingeniosas para problemas tangibles como un incendio. Aunque su uso en aplicaciones reales todavía está lejos de ser viable, estudios más exhaustivos sobre la resistencia térmica de la cáscara de piña podrían inspirar nuevos avances en la ingeniería de materiales y en el desarrollo de nuevos materiales ecológicos. Al fin y al cabo, la ciencia a menudo avanza gracias a la curiosidad y a preguntas tan inesperadas y que pueden parecer absurdas como: “¿qué pasaría si fabricamos una armadura con piñas?”.