Tecnología
El exjefe de Activision Blizzard está interesado en comprar TikTok y quiere asociarse con el CEO de OpenAI
La popular aplicación de vídeos cortos se enfrenta a una posible prohibición en Estados Unidos y puede verse obligada a vender si quiere continuar sus operaciones en suelo norteamericano.
Bobby Kotick dejó de ser el CEO de Activision Blizzard poco después de que se completara la operación de compra de la empresa por parte de Microsoft. El polémico directivo, salpicado por las denuncias de acoso laboral y sexual en el seno de la compañía, dejó su puesto como máximo responsable el pasado 29 de diciembre de 2023. No se ha mantenido en silencio durante demasiado tiempo, al menos de acuerdo con una información de The Wall Street Journal, que apunta a que Kotick está estudiando la posibilidad de comprar TikTok, la red social más utilizada entre los jóvenes.
La situación es la siguiente: en Estados Unidos se está debatiendo una ley que puede conducir a la prohibición de TikTok en territorio norteamericano si no se fuerza una venta de la compañía. Todo esto ha pillado por sorpresa al servicio, lo que ha incrementado el interés de posibles compradores ante la perspectiva de un cierre de la aplicación en este país.
¿Una alianza con Sam Altman para la compra de TikTok?
Según el periódico, Boby Kotick ha comunicado su interés en adquirir TikTok al ejecutivo de ByteDance Zhang Yiming, empresa propietaria de la aplicación de vídeos cortos. El precio de la adquisición sería probablemente de varios cientos de millones de dólares, de acuerdo con The Wall Street Journal. Durante una conferencia de prensa de Allen & Company, Kotick dejó caer supuestamente la idea de asociarse con un un grupo que incluye a San Altman, el actual CEO de OpenAI, una operación que quizá tenga sentido para esta empresa porque podrá utilizar la aplicación para entrenar modelos de inteligencia artificial.
“Esta legislación tiene un objetivo predeterminado: la prohibición total de TikTok en Estados Unidos”, ha señalado TikTok en un comunicado. “El Gobierno está intentando despojar a 170 millones de norteamericanos de su derecho constitucional a la libre expresión. Esto dañará millones de negocios, impedirá que los artistas tengan su audiencia y destruirá el modo de vida de incontables creadores a lo largo del país”.