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Review

Análisis VelocityOne FlightStick, la opción más barata para saltar al apasionante mundo de los simuladores de vuelo

La nueva palanca de vuelo de Turtle Beach ofrece un grado de inmersión sólo comparable a la realidad virtual y aunque mejorable, es la mejor y más asequible opción para echar a volar.

Adrián A.S.
Actualizado a
Velocity One Flightstick

De un tiempo a esta parte, Turtle Beach se ha hecho fuerte entre los periféricos de simulación de vuelo. Hace unos meses os hablábamos de su imponente timón de vuelo, el VelocityOne Flight, y esta misma semana hemos recibido el anuncio del nuevo VelocityOne Flightdeck, denominado “el HOTAS universal definitivo”. Pero entre los aficionados más exigentes y los amantes de las alturas hay un buen número de pilotos potenciales que no se atreven a dar el salto por precio y por miedo a dificultades. Nuestra recomendación de hoy, el VelocityOne FlightStick es precisamente un producto para todos ellos. El más barato (129.99 euros) y accesible. Un empujón para indecisos.

Especificaciones oficiales VelocityOne FlightStick

  • Palanca de 8 ejes con una alta precisión gracias a sus sensores sin contacto de alta resolución. Cuenta con un nanocompensador capaz de reconocer la inclinación exacta y presume de ofrecer “una respuesta más precisa que la mayoría de sticks” del mercado.
  • Gatillo de disparo rápido y hasta 27 botones programables y configurables a nuestro gusto.
  • Cable USB-A a USB-C de 3 metros para conectarlo a Xbox One, Xbox Series X|S o PC (con Windows 10/11 o posterior), siendo estos los únicos sistemas compatibles con el VelocityOne FlightStick.
  • Compatible con los Turtle Beach VeolcityOne Rudder Pedals en PC y hermano pequeño de los VelocityOne Flightdeck y los VelocityOne Flight.
  • Cuenta con una aplicación para móviles (Turtle Beack Flighstick) para personalizarlo.
  • Dimensiones: 164,1 x 216,84 x 230,47 milímetros.
  • Peso: 820 gramos.
  • Sin anclaje para escritorio incluido.
  • Puerto Jack de 3,5 mm para audio y micrófono estéreo.
  • Botones de Xbox con licencia y LED incluidos.
  • Patas de goma y reposamuñecas reversible para uso ambidiestro.
  • Sensor táctil a lo touchpad que sirve como ratón para seleccionar sistemas y controlar armas.
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Al abrir el VelocityOne FlightStick llaman la atención tres cosas. La primera, la alta calidad de sus materiales de construcción. Es un producto prémium, sólido, de agarre ergonómico y agradable. Y no nos referimos sólo a la palanca, sino también a la segunda sorpresa: la cantidad de botones a nuestro alcance. Técnicamente no estamos ante un HOTAS (Hands On Throttle-And-Stick), es decir, no tenemos delante una palanca con controles de mando y potencia, pero cuenta con todas sus funciones a través de decenas de botoncitos e interruptores (27). Es el modo que ha tenido Turtle Beach de ahorrarse los 200 o 300 euros de sus competidores, los Warthog de Thrustmaster y la serie X de Logitech. Un híbrido de lo más particular y completo al que aún así hay que acostumbrarse.

La tercera sorpresa serían su trackpad y pantalla OLED. Poco habituales entre las alternativas de la competencia, resultan un añadido tan inesperado como útil. No sólo para moverse por los menús y saltar de unos ajustes a otro (guardándose algún preset cuando cambiamos a un avión con cuyos instrumentos no estamos familiarizados), sino que también es un añadido de nivel que brinda lecturas de eje, cronómetro y otros datos útiles en pleno vuelo. El trackpad, más anecdótico quizás, ayuda si usamos un casco de realidad virtual en PC y perdemos de vista los botones.

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Nosotros hemos probado el VelocityOne FlightStick principalmente con Microsoft Flight Simulator 2020 y Star Wars: Squadrons (en Xbox) más alguna partida suelta a Star Citizen y War Thunder en PC. No cabemos en nuestro asombro con la sensación a los mandos. Se alcanza un grado de inmersión sólo comparable con la realidad virtual. Es como jugar a Resident Evil 7 con y sin casco VR. Los juegos parecen otros y una segunda pasada a los mismos es inevitable. Todo es mucho más intuitivo, más emocionante, más dinámico y absorbente. Uno hasta sale desgastado de experiencia, como si realmente hubiera estado pilotando las naves al frente de las cuales se ha puesto.

La sensación nos ha gustado tanto que nos da pena que el stick no sea compatible con PS4 y PS5 para jugar a Star Wars Squadrons con PlayStation VR. Mezclar ambos mundos debe ser como viajar al futuro. También hemos de admitir que nuestra sorpresa (para mal) con que no funcione con Ace Combat 7, uno los mejores juegos del género. Lo mismo con Everspace en Xbox (que sí que va en PC). Al haber diferencias entre los catálogos disponibles en PC y Xbox, casi que mejor dejaros con ellos. Añadimos asterisco a los que no permiten jugar con él de serie y necesitan un esfuerzo extra de configuración y habilitar y entender el modo compatibilidad.

Juegos compatibles con el VelocityOne FlightStick en Xbox

  • Microsoft Flight Simulator 2020 (pero sólo en Xbox Series X|S)
  • Elite Dangerous *
  • Star Wars: Squadrons *
  • War Thunder *

Juegos compatibles con el VelocityOne FlightStick en PC

  • Microsoft Flight Simulator 2020
  • X-Plane 11/12
  • DCS World *
  • Elite Dangerous *
  • Everspace *
  • Prepar3d *
  • Star Citizen *
  • Star Wars: Squadrons *
  • War Thunder *
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Nos parece que el peso es el gran problema del stick. La palanca exige ejercer cierta fuerza y presión (más de la que esperábamos tener que hacer), pero la base es tan ligera y liviana que en seguida se levanta. A menudo tiende a tambalearse sobre el escritorio y hace que echemos de menos algún tipo de anclaje. O mejor dicho, algún anclaje distinto a los tres tornillos M5 con los que viene, demasiado definitivos para nuestro setup, que es de todo menos la cabina de un avión.

Y aunque el precio es el más barato y accesible, mucho nos tememos que la puesta a punto no. Para algunos será apasionante, para otros engorrosa. Pero desde luego no es enchufar y jugar. Los habituales del género de simulación ya se las han visto y deseado con drivers, instalaciones de horas y hasta alimentaciones externas, pero a lo mejor pilla con la guardia baja a los recién llegados, sobre todo a los consoleros.

El VelocityOne FlightStick viene con un manual a modo de chuleta que será nuestro mejor aliado cada vez que lo probemos en un juego nuevo. Porque esa es otra, el proceso de aclimatación y configuración se “resetea” cada vez que pasamos de un título a otro. Al fin y al cabo no se parece en nada pilotar un vuelo comercial en Microsoft Flight Simulator que hacer maniobras de combate en DCS World. A la larga nos sabremos de memoria los pasos y los haremos sin pensar, momento en el que quizás sea recomendable dar el salto a algo con todavía más galones.

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Conclusión

El VelocityOne FlightStick es una grandísima opción para asomar la cabeza por el mundo de los simuladores de vuelo. Tanto por su precio (129.99 euros, uno de los más atractivos del mercado) como por la cantidad de opciones que pone a nuestra disposición. Los expertos en la materia quizás echen en falta un timón, controles de freno y cuadrantes de aceleración, pero incluso ellos admitirían lo completo del presente stick, de configuración densa y completísima. De hecho, quizás sea esa la mayor pega. Que está pensada para pilotos aún en la academia a los que exigirá leer el manual y trastear bastante con los menús antes de emprender cualquier vuelo. Ahora bien, una vez despegamos, las sensaciones no pueden ser mejores. A pesar de lo liviano de la base, la inmersión aportada sólo es equiparable a la conseguida por la realidad virtual. Turtle Beach sigue consolidándose como un sello de garantías en el género y con este VelocityOne FlightStick ofrece al fin una opción recomendable para todos los públicos.

Lo mejor

  • El precio es de lo más atractivo.
  • Diseño ambidiestro con reposamuñecas reversible.
  • Acabados prémium.
  • La cantidad de opciones y modos que pone a nuestro alcance.

Lo peor

  • La base es demasiado liviana y se levanta con frecuencia.
  • No compatible con PS4 y PS5.
  • No es conectarlo y jugar. Exige aprender a configurarlo y sacarle partido.
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