Avance
Impresiones Tekken 8, nuestros primeros combates en el Puño de Hierro
El torneo de Puño de Hierro saca sobresaliente en su prueba online
Este 2023 se ha iniciado una nueva generación de fighting games. Con el recién y contundente de Street Fighter 6, dos titanes de la escena preparan su próxima salida al mercado: Mortal Kombat 1 y Tekken 8. Hoy nos centraremos en el título de lucha de Bandai Namco, quien ha hecho hervir la espera con sus emocionantes tráilers de personajes. En este pasado fin de semana jugamos a su beta cerrada para PS5 que puso el online contra las cuerdas y hoy os traemos sus impresiones.
Un Puño de Hierro más contundente que nunca
Tekken 8 pretende ser toda una declaración de intenciones tanto dentro de la escena de los videojuegos como en la misma industria del videojuego, desde el punto de vista tecnológico. Como adivinamos en los tráilers, el torneo del Puño de Hierro es puro espectáculo audiovisual. No solamente las animaciones dentro de la propia partida, sino las secuencias cinemáticas de introducción de los personajes y la activación de sus Heat y Rage Art. La calidad de las texturas tanto de los mismos personajes como de los escenarios alcanza un gran preciosismo y vistosidad. También es notoria la evolución del diseño de los personajes, donde Bandai Namco ha apostado por un grado mayor de madurez en sus 18 personajes iniciales que han evolucionado desde sus respectivas primeras apariciones, sin renunciar a la personalidad de los mismos o del propio juego. Y, para redondear la inversión, debemos aplaudir la labor de localización, con expresiones muy actuales y en consonancia con el carácter de los personajes.
Pero vayamos a la misma carne del asunto: el dinamismo del combate. Tekken 8 se mantiene en un sistema tradicionalista dentro de la misma saga, que hace que los jugadores asiduos sientan la familiaridad de los combos, el uso del side-step y el Rage Art, el ataque definitivo que ya se introdujo en Tekken 7 y con el que es posible darle la vuelta a la partida cuando nuestra barra de vida está en las últimas.
En Tekken 8 accedemos a la gran novedad que es el Heat, un potenciador temporal que podemos activar una vez por ronda para acceder a potenciadores de cada personaje y a nuevos combos. Bajo la misma barra de salud, observamos el Heat Timer que nos indica su disponibilidad y duración mientras permanezcamos en este estado. También es posible frenar su consumo golpeando, atacando u obligando al rival a cubrirse. El hecho de que empecemos cada rondas con esa barra llena ya es una invitación para que la aprovechemos cada vez y, por supuesto, con cierta mente estratégica para calcular cuál es el mejor momento.
Harada había asegurado que había apostado por la agresividad en esta entrega y corroboramos su intención. Las posibilidades que ofrecen el Heat System y el Rage Art, así como la posibilidad de unirlos para remontar un combate, son toda una invitación a lanzarnos contra el rival sin timidez, sobre todo el Heat Smash, un ataque definitivo que sólo es posible activarlo en este estado y que causa un significativo destrozo al rival.
El equilibrio entre agresividad y estrategia
Se mantienen también mecánicas como el wall-break y el mando háptico subraya cada golpe y combo que entra en el rival, así como la suavidad de los bloqueos, con lo que Tekken 8 pasa a ser una experiencia sensorial que va más allá de un apartado audiovisual sublime. La banda sonora nos ha acompañado con temas enardecedores y pegadizos que, tras horas de juego, se han quedado en nuestra cabeza.
Eso sí, Bandai se ha cuidado de no caer en el favorecimiento de la impulsividad, y será muy necesario aplicar estrategias defensivas que ya conocemos, como el bloqueo, side-step, parry o el consabido castigo. Así, los combates tienen una duración bien equilibrada: en sets donde se gana al mejor de tres partidas, cada combate esta dividido en tres rondas. Es posible conocer bien a los rivales a lo largo del transcurso del enfrentamiento y adaptarnos y para nada nos encontramos ante un combate lento; al contrario, la fluidez de los movimientos aporta un ritmo vivo, muy bien equilibrado por la agresividad y defensa exigida durante cada batalla.
El rollback netcode, la piedra angular
Tekken 8, además, hace toda una declaración de intenciones con el añadido más deseado y que se ha desevuelto con soltura durante esta beta cerrada: el rollback netcode. A lo largo del primer fin de semana, hemos tenido partidas con jugadores conectados por cable y Wi-Fi, desde Europa, Estados Unidos y Oriente Medio y la conexión ha sido, en la mayoría de casos, excelente. En el segundo fin de semana, con el crossplay añadido a la ecuación, sí experimentamos algunas desconexiones del servidor, pero la experiencia fue más estable en los últimos días, con algún combate contra Wi-Fi donde el combate parecía desarrollarse en diapositivas.
Además, es posible ajustar si deseamos que se prioricen gráficos o respuesta, o mantener un estándar. Sí nos hemos encontrado ocasionales tirones en combates contra jugadores de Wi-Fi donde había cierto retraso de fotogramas, pero sí hemos percibido que en otros casos el delay se mantenía a 0. En cuanto a la búsqueda de partida, había momentos donde no era posible la conexión, o bien porque el contrario no confirmaba o porque el emparejamiento se da con varios jugadores a la vez. Asimismo, es posible aplicar los requisitos de con quién queremos jugar, según su calidad de conexión o diferencia de rango con respecto a nosotros.
Bandai Namco ha pasado con creces la prueba de la beta, demostrando que es posible llevar uno de sus títulos estrella a un nuevo nivel y superando la experiencia online. Queda por ver los modos que Tekken 8 acabará ofreciendo, tanto online como offline, pero ya su modo competitivo parece prometedor. No obstante, cabe advertir que se nota que se trata de un título pensado para jugadores expertos en la saga y que aprender a dominar el sistema Heat requiere un proceso de aprendizaje y adaptación.
Tekken 8 ofrece el Estilo Especial, pensado para jugadores novatos y que simplica los inputs de sus técnicas y combos. No obstante, los jugadores que suban al ring por primera vez pueden encontrarse con una curva de dificultad muy empinada. Hemos accedido también a su tutorial, que solamente cubre las nociones más básicas y con una fuente de letra minúscula; y a sus desafíos de combo, durante los cuales se detiene la búsqueda de rival. No obstante, se echa de menos que se profundice en el sistema de juego y sus particularidades para jugadores más casuales.
Pero Tekken 8 es consciente de que la saga no necesita presentación y espera que el jugador esté más que acostumbrado a la complejidad de su sistema de combate, al ritmo de sus combos, a las características y manejo de personajes ya conocidos y al control del espacio en 3D. Si es la primera vez, es aconsejable aplicar dedicación y paciencia para acabar disfrutando de un juego que ha hecho una declaración de intenciones en convertirse en uno de los fighting games del año que consolida de nuevo un título clásico. Sin fecha de lanzamiento prevista, esperamos nuevas noticias en el EVO.