Análisis de The Talos Principle II, uno de los mejores juegos en un año extraordinario

Que no pare la racha. En un 2023 que está siendo espectacular para el sector del videojuego, no paramos de recibir nuevos lanzamientos de excelsa calidad que están provocando que amar esta bendita forma de entretenimiento electrónico sea una fiesta continua. Hace un par de días se publicaba Alan Wake 2, la confirmación de todo lo que Remedy llevaba prometiendo muchos años en forma de colosal survival horror revolucionario y rompedor. Un título que se suma a una larga lista de videojuegos candidatos a ser el mejor de un año donde el galardón va a estar más que reñido. Para que a cosa no decaiga, este 2 de noviembre se publica otro de los grandes juegos del año, un The Talos Principle II que toma todo lo bueno de su predecesor y lo eleva a la enésima potencia, dejando el listón para futuros juegos de puzles a una altura realmente difícil de igualar. Y todo ello, a cargo de un pequeño estudio independiente croata de poco más de 40 empleados, Croteam.

En 2014, los creadores de la saga de disparos en primera persona de acción desenfrenada Serious Sam sorprendían a propios y extraños con un cambio de registro total para facturar The Talos Principle, un soberbio juego de puzles en primera persona, con una narrativa muy peculiar que bebía fuertemente de la filosofía y el existencionalismo, para hacer pensar al jugador tanto con sus maravillosos rompecabezas como con su potente narrativa. El videojuego se convirtió rápidamente en un título de culto, traspasando las fronteras del género de los juegos de puzles para convertirse en una de las joyas modernas del sector. Con estas credenciales, no sorprende que su secuela, anunciada hace casi siete años, fuera uno de los títulos más deseados entre el público del sector. Desgraciadamente, la ausencia total de información acerca de su desarrollo hizo temer que nunca llegaría a ver la luz. Por fortuna, en el pasado Palystation Showcase de mayo se anunció por sorpresa que se publicaría este mismo año, para regocijo de miles de seguidores.

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Y la dicha ha resultado ser plena, porque The Talos Principle II es un juego mayúsculo, un triunfo total y absoluto de esta forma de arte que es el videojuego. Pese a tener una duración muy superior a la media actual, ofreciendo una experiencia que superará ampliamente las 30 horas, el videojuego de Croteam siempre resulta sorprendente, siempre nos hace desear saber más, descubrir con qué nos va a maravillar a continuación. Ya sea con una nueva mecánica en sus rompecabezas, con un nuevo y exuberante entorno a explorar o con otra vuelta de tuerca a su espectacular trama de ciencia ficción, este colosal videojuego de puzles hace que las horas vuelen haciendo que el jugador sienta una sensación sumamente placentera, tanto a la hora de resolver unos puzles enormemente satisfactorios como cuando se sumerge en una narrativa reflexiva de profundas implicaciones filosóficas.

Todo ello con una escala, duración y valores de producción más propios de un lanzamiento puntero de una gran compañía que de un pequeño estudio independiente, y además, siendo publicado a un precio muy ajustado, inferior a los 30 euros. Además, no es necesario haber jugado a la primera entrega para disfrutar plenamente de esta continuación, aunque recomendamos encarecidamente a quien no la disfrutara que lo haga, porque es un título inolvidable. Disponible para PC, Playstation 5 y Xbox Series, The Talos Principle II nos ha conquistado completamente al igual que hizo su predecesor en su momento, y se ha convertido por méritos más que sobrados en un nuevo y firme candidato a mejor videojuego del año. Y desde luego, no ha conseguido tales méritos por escasez de candidatos, en un año que sin duda pasará a los anales del medio.

Un renacimiento sintético

El título comienza miles de años después del final de la primera parte. Avisamos de que en este párrafo vamos a desvelar la trama de aquella, por si alguien todavía no la ha jugado, cosa que recomendamos más que encarecidamente que haga. En The Talos Principle descubríamos que la humanidad había sido barrida de la faz de la tierra por una plaga biológica que exterminó la especie, cosa que no ocurrió con otras razas de animales. En un intento por preservar el legado de la humanidad, la científica Alexandra Drennan y su equipo crearon un proyecto de inteligencia artificial para que una suerte de seres sintéticos heredaran la tierra y continuaran con la historia de la raza humana. Para dotar de personalidad a estas nuevas entidades, Drennan y su equipo crearon una simulación, donde las inteligencias artificiales eran sometidas a la resolución de puzles y al análisis de textos y grabaciones de diversa índole, recibiendo en última instancia la posibilidad de revelarse contra el “Dios” de la simulación, Elohim, probando su individualismo y despertando al apocalíptico mundo real heredado de sus creadores humanos.

Miles de años después de que el primer ser artificial, Athena, despertara de la simulación y plantara la simiente de un nuevo mundo, The Talos Principle II arranca con el despertar de la simulación del ser sintético número 1000 de esta nueva sociedad. Esta es una cifra muy importante, ya que según los estudios este número de seres es el ideal para mantener el equilibrio en el ecosistema y no repetir los errores del pasado que desembocaron en la erradicación de la especia humana. Apodado 1K en honor a su nacimiento, nuestro mudo protagonista despierta en medio de una magnífica ciudad de seres sintéticos, con una sociedad plenamente desarrollada. Sin mucho tiempo para contemplar las maravillas de este nuevo mundo, una enigmática entidad deja un críptico mensaje a los sintéticos, y la aparición de una colosal estructura en una isla lejana, de la que emanan extrañas lecturas energéticas, llamará la atención de los herederos de la humanidad. De manera inmediata se organiza una partida de exploración a la gigantesca estructura, siendo 1K parte del grupo.

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Ya desde los primeros compases se aprecia un cambio de tono en esta secuela con respecto a su predecesor, apostando por una puesta en escena más cinemática y tradicional, frente a ese tono reflexivo y enigmático del primero. Se ha buscado el empleo de una narrativa más tradicional, con sus respectivas escenas cinemáticas, transiciones y conversaciones con otros personajes, cosa que no ocurría en el primero. Por fortuna, siguen estando presentes los terminales con diversos textos filosóficos y sobre la historia de este peculiar mundo, y también obtendremos información de grabaciones y ciertos discursos esparcidos aquí y allí. Esta secuela consigue que mantengamos el interés por los temas filosóficos y existencialistas que trata, al igual que la primera parte, pero a su vez es capaz de ofrecer una trama mucho más sólida y llena de sorpresas, con una narrativa más tradicional. The Talos Principle II ofrece una soberbia historia de ciencia ficción, que consigue sumergir al jugador en un mundo exquisitamente construido y atrapa todo su interés por saber qué nos deparará a continuación.

Rompecabezas majestuosos

El verdadero meollo del asunto son unos puzles magistrales, medidos al milímetro, desafiantes pero siempre lógicos y justos, y sobre todo de resolución enormemente satisfactoria. Para que la cosa sea aún mejor, el juego está constantemente introduciendo nuevas mecánicas, de forma que resulta siempre sorprendente y nos obliga continuamente a estar asimilando y probando nuevas formas de afrontar los rompecabezas. Se conservan las mecánicas de la primera entrega, pero a mayores se añaden infinidad de nuevas posibilidades. A los ya conocidos rompecabezas de dirigir rayos azules y rojos, emplear interruptores y cubos y ciertos mecanismos, se han añadido mil locuras más. Los rayos se han potenciado con un tercer color, la posibilidad de invertir la polaridad de los mismos o juntar dos colores para obtener un tercero. Se ha añadido un dispositivo que crea agujeros en ciertas superficies, teletransportadores, mecanismos que trastean con la gravedad, la posibilidad de controlar un androide a modo de marioneta e infinidad de nuevas sorpresas.

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El objetivo de todos los rompecabezas es muy sencillo: llegar a un panel de control que da el puzle por superado. Puede que dicho panel esté protegido por una barrera que hay que desactivar, o por interruptores que hay que pulsar, o simplemente esté fuera de nuestro alcance y tengamos que acceder a él. Los rompecabezas son muy orgánicos, ya que una vez visto qué necesitamos conseguir para acceder al terminal, el juego invita a ir probando cosas, de manera fluida hasta dar con la solución al entuerto. Los rompecabezas resultan desafiantes, aunque la sensación es que se ha relajado un tanto la dificultad con respeto a la primera entrega, aunque bien es cierto que dicha sensación también está provocada por el aprendizaje seguido en aquella. Como novedad, la posibilidad de cambiar la vista entre primera y tercera persona en cualquier momento pulsando un botón.

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La isla donde se desarrolla gran parte de la aventura está dividida en cuatro puntos cardinales, con tres zonas por punto cardinal. Cada uno de esas tres zonas tiene ocho puzles principales más dos alternativos, siendo necesario superar solamente ocho puzles en cada zona para superarla, por lo que si nos atascamos en alguno siempre podemos recurrir a los alternativos para seguir avanzando. Se ha introducido la posibilidad de resolver un puzle de manera automática usando unos ítems muy escondidos y limitados repartidos por el escenario. Las áreas donde están ubicados los puzles son extensas e invitan a la exploración, ya que descubriremos varios secretos que abrirán las puertas a unos puzles especiales de dificultad demencial.

Todo ello consigue un ritmo magnífico y todas las posibilidades del juego son muy satisfactorias: llegamos a una zona, exploramos, resolvemos puzles, buscamos los terminales y nos empapamos de la historia del mundo y de interesantes cuestiones filosóficas, mantenemos conversaciones con otros seres sintéticos con la posibilidad de elegir las respuestas a los diálogos y varias sorpresas más. Como ya hemos comentado, el juego supera las 30 horas e incluso se irá más allá de las 40 si queremos desvelar todo lo que ofrece, cifras que se incrementan si nos atascamos en algún puzle. Pero por su variedad de mecánicas en los rompecabezas y la manera tan inteligente que tiene de irlas introduciendo, por lo interesante de su trama, y por lo satisfactorio de su exploración, el juego siempre se mantiene fresco y engancha como pocos a seguir. Realmente consigue que sea un auténtico placer devanarse los sesos para dar con la solución a ese rompecabezas que nos bloquea el camino, con el aliciente de seguir avanzando en su espectacular trama de la mejor ciencia ficción.

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Una maravilla visual

Pese a no ser un portento técnico con un apartado gráfico de nueva generación como es el caso de Alan Wake, hay que reconocer que The Talos Principle II es un título que luce escandalosamente bien en pantalla, y que sabe dejar multitud de estampas de gran belleza y espectacularidad. Solo hay que ver la infinidad de capturas que ha ido sacando la comunidad estos días con la demo para percatarse de ello. El magnífico modo foto del título da mucho juego, y es un placer recrearse tratando de obtener la mejor instantánea a partir de los excelentes mimbres visuales de los que el título hace gala. A mayores, la dirección artística del juego es una maravilla, y hace gala de un buen gusto exquisito. La iluminación crea ambientaciones muy exuberantes, y algunas estructuras de ciclópeo tamaño resultan realmente espectaculares. La acertada variedad de entornos completa un trabajo gráfico magnífico.

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Al apartado sonoro no se queda atrás, con una banda sonora excelente, variada, relajante y que sabe acompañar a las mil maravillas a lo que acontece en pantalla, sabiendo ser épica cuando se lo requiere. Las melodías hacen gala de una calidad excelente, y logran reforzar el espíritu del juego. El trabajo de voces también es de mucha calidad, aunque a diferencia de lo que ocurría en la primera parte no están dobladas al castellano, pese a que se había anunciado que sería así. Por fortuna, todos los textos del juego sí están perfectamente localizados a nuestro idioma. Apartado técnico, jugabilidad y narrativa alcanzan cotas elevadísimas para facturar uno de los mejores juegos de este 2023 que pasará a los anales del medio.