Cine
Dragon Ball Super: Super Hero, crítica sin spoilers. Una oda a la familia
La nueva película redobla el ejercicio de traspaso generacional que los padres amantes de Dragon Ball hacen con sus hijos, los que más disfrutarán en el cine.
A Dragon Ball Super: Super Hero le pasa un poco como le pasó a Resident Evil hace unos años. La escala de lo que estaba sucediendo era tan grande que cuando Capcom decidió publicar Resident Evil 7, rebajó el foco a una zona concreta, alejada del apocalipsis mundial. Con Goku y Vegeta luchando contra los más fuertes no solo de su universo, sino de otros, es muy difícil dar espacio a personajes que han quedado atrás en proyección, como el propio Gohan. Eso lo sabe Super Hero, que llega de la mano de Crunchyroll a nuestro país y cierra el objetivo, se centra en la Tierra y quita de la ecuación a los protagonistas de siempre. Arriesgado, pero atractivo.
Por eso, y por el carácter global que tiene un estreno en los cines cuando hace cuatro años que no tenemos anime, la película es lo suficientemente inteligente para impedir que haya destripes de lo que sucede en el manga (transformaciones, enemigos vivos…) y para ubicarnos en nuestro planeta, con Piccolo y Gohan de protagonistas y el retorno de la Red Ribbon como gran enemigo.
Seguramente Super Hero no tiene el encanto único a nivel de historia y narrativa de la primera mitad de Broly (2018) ni la espectacularidad de los combates contra el saiyan legendario, pero juega muy bien sus cartas en lo que, a vista de pájaro, parece una especie de remake de la saga de los androides (Dragon Ball Z) y un retorno a ciertas esencia humorística y absurda made in Toriyama y que veremos en personajes como Bulma, Gotenks o incluso algunos de los refundadores de la Red Ribbon. Hay nombres, recuerdos y situaciones que son por y para el fan más acérrimo.
Super Hero nos presentó en los tráilers a dos enemigos, Gamma 1 y Gamma 2, con un particular diseño, que se autoproclaman a sí mismos superhéroes y en los que la explicación de su aspecto también es muy Toriyama (lo naíf que no falte nunca en la licencia). Ambos luchan contra Piccolo, contra Gohan y parece que retienen a Pan, que ya empieza a despuntar como luchadora. De telón de fondo, un peligro mucho mayor. ¿Funciona?
Decíamos que es una película que se va a sentir cómoda como plan familiar, padres y madres con sus hijos e hijas que pueden ver a pantalla gigante esto que seguramente ya les han ido inculcando poco a poco en casa. La trama argumental es sencilla de seguir, el ritmo es bueno, tiene puntos de humor y no llega a decaer… pero es cierto que no invita a la épica que hemos visto en otras películas recientes. Hasta la parte final.
Porque ahí Tetsuro Kodama (director) y su equipo se guardan varios ases en la manga para una explosión frenética de combates, ataques y sorpresas (que esperamos no hayáis visto pero los destripes llevan semanas a la orden del día).
El film quiere recuperar a Piccolo y a Gohan, y, en parte, lo consigue. Los fans del hijo de Goku (en popularidad casi siempre ha sido el tercero) están de enhorabuena, porque lucha, aprende y muestra sus mejores dotes junto a un namekiano que tendrá su espectacular momento de gloria. Las dudas de lo que sucede con ellos son más por el cómo sucede que no por el qué. A fin de cuentas, estamos en Dragon Ball y que los protagonistas se sobrepongan a las adversidades es el pan de cada día, pero es el cómo se plantean ciertos cambios lo que tal vez nos haga arquear la ceja. Lo que sin duda será más divisivo para el fan de toda la vida -a nosotros no nos ha gustado demasiado- es lo que la sinopsis define como “un peligro mucho mayor”.
Así las cosas, Dragon Ball Super: Super Hero acaba siendo una película que sienta algunas bases interesantes a futuro no solo con Piccolo y Gohan, sino también con unos Trunks y Goten que ya son adolescentes, aunque siguen sin ser tomados en serio. En Dragon Ball Z Goku le dijo a Piccolo que el futuro de la tierra debía estar en manos de estos jóvenes. Muchos, y no solo el propio Goku, se han olvidado de esto en los años que llevamos de Super.
Los caricaturescos miembros de la Red Ribbon, enemigos que parecen malos pero a lo mejor no lo son tanto (un clásico), un tramo final poderoso a nivel visual y pequeñas novedades suponen un cóctel que gustará a toda la familia, que tiene golpes de nostalgia y guiños para los más veteranos y que deja mucho mejor sabor de boca que La Batalla de los Dioses y El Retorno de F.
Película por CGI… ¿sí o no?
Una de las grandes novedades es el hecho que la película se ha producido completamente en CGI, animación 3D, cambiando lo visto hasta ahora. La puesta en escena en movimiento mejora, y los combates son frenéticos, pero nos sigue pareciendo un estilo con el que hemos perdido matices y riqueza, aunque es el estándar de los dibujos animados que muchos de nuestros pequeños y pequeñas ven hoy en día. Que no se entienda mal: en movimiento la película tiene momentos espectaculares, pero no tanto en momentos de pausa y contemplación.
De hecho, algunos escenarios son un poco más planos de lo que nos gustaría. En este sentido creemos que tanto en la animación como en el modelado de personajes hay un trabajo mejor que en los entornos y localizaciones.
Apuntes sobre el doblaje y la banda sonora
Dragon Ball Super: Super Hero llega a España con el doblaje al castellano y en Cataluña, en catalán (no la hemos podido visionar así, todavía). Si había dudas de cómo quedaría el doblaje con el salto de la distribución de la película a manos de Crunchyroll, ellos mismos se han encargado de despejarlas. En el caso del doblaje castellano dirigido por Mercedes Hoyos, éste es de gran calidad. Los años de experiencia, los trabajos previos y el respeto a los anteriores trabajos han servido para tener unas voces que recrean perfectamente cada situación y que acompañan bien una película donde los diálogos están muy presentes, más que en otras ocasiones.
Aquí es importante destacar que a diferencia de anteriores entregas, las voces más comunes (Goku y Vegeta) no son protagonistas, así que vemos a unos sólido Piccolo (Luis Fernando Ríos) y Gohan (Alejandro Albaiceta). Este último luce especialmente bien en los momentos de acción y lucha, la verdad. En este punto, destacar que los dobladores de los Gamma 1 (Juan Luis Aguayo) y Gamma 2 (Nacho Ruiz-Cruces), así como los otros antagonistas de la Red Ribbon, son muy buenos añadidos a un elenco en el que las reconocibles voces de Bulma, Krilín, Whis, Videl o Shenron no fallan cuando les toca hablar. Seguramente el papel más complejo es el de Pilar Valdés con Pan, que tiene solo tres años.
Todo ello con una banda sonora que toma partido sobre todo en los combates, que tiene un tono más tradicional respecto a lo que vimos en la película de Broly y apuesta más por sinfonías de corte épico y tambores de guerra que acompañan muybien, pero sin ser tan icónicas como en otras ocasiones.