Halo, del horrible y primer E3 a un crunch inhumano... y un lanzamiento histórico

Halo vuelve a estar en boca de todos gracias al buen recibimiento de Halo: Infinite, la última entrega de la mano de 343i para Xbox One, Series y PC. Pero la saga protagonizada por el Jefe Maestro no tuvo el mejor de las presentaciones hace algo más de 20 años, cuando Microsoft trabajaba contrarreloj para sacar su primera consola a la venta y debían ganarse la confianza de todo el mundo. El documental Xbox Story recupera distintos momentos del proceso de creación y auge de la marca, y una de ellas recuerda, en el capítulo 4, como Halo: Combat Evolved estaba en el punto de mira.

El título, arrebatado a Apple, fue una gran sensación a principios de 2001 cuando se presentó jugable en el CES. Ahí la gente empezó a ver que se podía controlar bien con mando, algo que obsesionaba a Microsoft: querían que se viese que se estaba jugando sin teclado ni ratón. Que no había trampa. Esto y su apartado gráfico convencieron a un público que dudaba de las capacidades del control, aunque en el pasado ya hubo juegos FPS bien resueltos en otras plataformas. Pero el primer E3 de la historia de Microsoft, meses después, en mayo, fue un fracaso y puso en la picota a la gran obra de Bungie.

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Tras una presentación desastrosa en la que la Xbox que estaba en el escenario no se encendió, lo peor todavía estaba por llegar en el stand de Microsoft. Ahí los jugadores podían disfrutar del multijugador a pantalla partida de Halo. Pero las sensaciones fueron horribles. Robbie Bach, Chief Xbox Officer durante la década de 2000-2010 explica en el documental cómo se sintieron: “teníamos un evento de lanzamiento malo y el juego clave que será el gran reclamo se ve mal y la gente piensa que estamos locos”. El framerate era desastroso y los errores y glitches afloraban a cada partida multijugador. Halo estaba en duda.

SEGA: “el producto es malo y caro”

El mismo Bach explica en el documental como Peter Moore, jefe de SEGA en esos momentos, se le acercó y le dio su opinión: “Las tiendas no la tendrán, los desarrolladores no trabajarán para ti y los consumidores piensan que el producto es malo y caro”. Bach quiso renunciar pero Bill Gates no le dejó. Quedaban pocos meses para la salida de la consola (de mayo a noviembre) y se pusieron manos a la obra. ¿Qué pasó con Bungie?

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La prensa y los usuarios fueron devastadores con Halo, explican sus protagonistas en el documental, ya que se consideraba que el juego era “terrible”, por lo que había una presión sobre el título enorme… Y eso iba a marcar el futuro de la marca Xbox.

Joseph Staten, figura clave en el éxito de Bungie (1998-2013) y que volvió a la saga Halo en 2020 para cambiar el rumbo de Halo Infinite, explica en el documental cómo fueron esos seis meses: “hicimos algo que la gente pensaba que no funcionaría, un FPS; y el framerate era horrible”. A seis meses de salir la consola y Halo, ambos con un destino que iría de la mano, se decidió recluir al equipo. Halo se escondió, nadie sabía qué estaban haciendo ni cómo iba el desarrollo, ni siquiera incluso algunos jefes importantes de Xbox. “Tuvimos que construir un juego entero nuevo para un hardware nuevo, con una historia y personajes convincentes mientras tomábamos atajos, nos saltábamos pasos… En una loca carrera de días largos, dormir debajo de los escritorios y un enorme crunch para terminar el juego”, recordaba Staten.

De ese crunch inhumano, en el documental se señala que solo hubo una cosa buena, el perfeccionamiento con el que Bungie se tomó el trabajo para que saliera lo mejor posible. Para ellos fue “un esfuerzo vehemente por hacer el mejor juego posible”, relata Staten, que sabía que el nivel de crítica sería enorme por el simple hecho de estar en Microsoft.

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En Bungie estaban convencidos que el juego gustaría, pero no eran conscientes del nivel de éxito que tendría Halo: Combat Evolved cuando el 15 de noviembre se hizo el lanzamiento mundial de la consola y del juego. El equipo recuerda como empezaron a mirar conversaciones, análisis y cómo todo el mundo alababa el juego por encima del resto. Entre sus virtudes, la sensación de poder hacer todo lo que se quisiera, sus gráficos de última generación y que controlar un FPS en mando era preciso como nunca antes. El hecho de poder jugar la campaña en cooperativo, el uso de vehículos y las situaciones que se generaban con ellos, así como el multijugador que iba a cambiarlo todo.

Jack Tretton, CEO de Sony entre 2006 y 2014, explicaba en el documental: “Con Halo, Microsoft tenía ese título que definía la plataforma, que, si querías, tenías que salir y comprar la Xbox. Y eso siempre lo envidié y admiré”. El resto, en ventas, críticas y demás, ya es historia. Phil Spencer lo resumía de la mejor manera. “Sin Halo, no estaríamos aquí”.